Antes de su muerte, Lucie había leído una novela de fantasía, donde era el clásico cliché de la pareja enamorada, una joven que se enamora del príncipe heredero, pero su amor no es fácil, pues está la villana Noelle Le Blanc, prometida del príncipe, intenta sepáralos, pero al final su compromiso es roto y ella debe casarse con el gran duque Raizel Ivanov, quien nunca se interesó en Noelle y ella termina siendo asesinada mientras regresaba de una fiesta, siendo así el final de esta villana.
Ahora tras su muerte, Lucie ha reencarnado en Noelle Le Blanc cuando apenas es una niña, ella sabe lo que le espera en el futuro, aun así, deja que todo pase de acuerdo a la trama, permitiendo que los protagonistas se enamoren, hasta que llega el día en el que ella debe partir de su casa para encontrarse con su futuro esposo, el joven gran duque Raizel, conocido por ser un mujeriego, quien solo se ve obligado a casarse con Noelle, pero pronto descubrirá que ella no es solo una joven dama presumida como dicen y, por el contrario, es una mujer fuerte, decidida y con el objetivo de tener a Raizel a sus pies, pues desde que Noelle leyó la novela, Raizel le había gustado más que el propio protagonista, por ser un hombre atractivo y apasionado.
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capítulo 22- discusión
- escuche por ahí que la reina finalmente aceptó tu matrimonio, lo has hecho bien Odette.
- muchas gracias padre, yo se que la reina es muy estricta pero le haré ver que soy la indicada.
- por supuesto la indicada para arruinar el país.
- ¡Clarice! Ya tuve suficiente, Odette no te ha hecho nada para que la trates así.
- lo siento padre, madre me odia porque en lugar de mi hermana yo soy a quien el príncipe quiere.
Odette se cubre el rostro y se escuchan sollozos, lo que hace enojar aún más al Barón.
- el príncipe es poca cosa para mi Noelle, ya que es demasiado tonto como mi esposo, que caen por las lágrimas de una chiquilla.
- ya tuve suficiente, Clarice, en esta mesa no vuelves a comer a menos que pidas perdón.
- jamás pediré perdón, el que suplicara más tarde eres tú, pedirás perdón de rodillas ante Noelle.
- no digas estupideces, largo, ustedes lleven a Odette a su alcoba.
Ordena a sus doncellas, pero la baronesa es quien sale primero de esa sala, Odette se pone de pié.
- lo lamento padre, por mi culpa, madre y usted pelean.
- no es tu culpa, es de ella por comportarse así.
Las doncellas se llevan al Barón, mientras que este se queda en el comedor, pero estando enojado tira todo lo que había ahí. Clarice estando en su habitación escribe una carta para Noelle donde menciona que es probable que pida el divorcio del Barón, pero lamentablemente la ley estará del lado de su esposo, por lo que pide a Noelle le pregunte al gran Duque si puede dejarla quedarse ahí mientras consigue un sitió para vivir, al acabar la carta llama a su doncella para que lleve la carta al mensajero.
- señora ¿esta bien? Hace un momento.
- estoy bien, lo que me preocupa es que Noelle este bien.
- la señorita sabe como lidiar con los problemas, ella debe de estar bien.
- tienes razón, mi hija es fuerte.
Odette escucha tras la puerta y sonríe, porque ella investigó sobre Raizel Ivanov y su fama de mujeriego seguramente hará que Noelle no sea feliz, un esposo infiel es de lo peor y quien acaba humillada es la esposa. Por suerte ella ha conseguido al príncipe, es un hombre devoto y además, la hará reina.
Por otro lado, Raizel ha salido a divertirse con sus amistades, entre ellos Rafael y Nicolas, Gloria también estaba presente, notando que dos chicas se sientan a lado de Raizel, Gloria las conoce, sabe que suelen frecuentar ese tipo de fiestas y también sabe que les gusta Raizel.
- escuchamos que te casaste, que pena.
- te vamos a extrañar, Rai...
- ¿por qué? Si me tienen aqu...
Raizel siente como alguien le abraza por el cuello desde atrás y las manos se deslizan por su pecho, entrando bajo la ropa desabotonada.
- gatito malo, saliste a divertirte sin mí...
- pero que...
Voltea notando que era Noelle quien frota su mejilla contra la suya. Las otras dos chicas se muestran molestas, pero Noelle sonríe ladina.
- saludos, me llamo Noelle Le Blanc de Ivanov. Aunque solo Noelle Ivanova o Duquesa Ivanova esta bien.
- ¿como llegaste hasta aquí?
- es un secreto. Bueno y ¿de que estaban hablando?
- algo que no debe importarte, solo regresa a la casa.
- volveré cuando tu vuelvas. La cama sin tí es muy fría.
Noelle le muerde el lóbulo de la oreja causando que Raizel se sobresalte, quienes están cerca se sorprenden, en especial las chicas que estaban a lado del azabache, Noelle les sonríe con burla.
- no hagas eso. Ya te dije regresa a casa, yo necesito diversión.
- no me molesta hacerlo aquí, siempre quise intentar hacerlo con público.
- tú...eres tan descarada, una señorita de la nobleza no habla así.
- soy un caso especial, cariño.
Noelle no duda en darle varios besos en la mejilla, los presentes tratan de mirar de manera discreta, mientras que las dos chicas se han apartado, pues Noelle las miro de manera amenazante. Finalmente Raizel se pone de pié y carga a Noelle por debajo de su brazo como si de un costal se tratase.
- ya me aburri, nos vamos.
- chau, chauu..
Noelle se despide agitando la mano y mandando besos, los presentes estaban sorprendidos de que Raizel cediera y se fuese con la chica.
- su esposa...es un caso especial.
- sabe lidiar con él.
- y es preciosa...aunque me dio algo de miedo.
Incluyo una de las chicas presentes, Gloria y Nicolas la miran extrañados, normalmente una amante estaría enojada porque fue dejada. En el caballo de regreso al castillo, Noelle iba sentada delante de Raizel en el caballo, aunque iban con ellos los guardias debido al peligroso que suele ser el camino.
- no puedo creer que ya no pueda divertirme un poco.
- para eso me tienes a mí, tengo la seguridad de que lo hago mejor que ellas.
- ¿te crees única o que?
- por supuesto, soy lo mejor que puedes tener.
Raizel solo sonríe por las palabras de la chica, pero tira de las riendas para ir más rápido, no saben en que momento se puedan encontrar con una bestia.