La Guerrera Del Aire

NARRADOR

Mientras en el palacio esperaban a que Rakia despertara, tal y como se sentenció, Torm y Auretta fueron dejados a su suerte en los bosques cercanos a la frontera con el reino de la Tierra, la razón por la que se eligió este lugar fue por su clima extremo, puesto que la frontera entre ambos reinos estaba naturalmente dividida por una cordillera montañosa y la única manera de llegar al otro lado era cruzando dichas montañas.

El único camino seguro para cruzar la frontera era una cueva que era resguardado por guardias de ambos reinos, y debido a su exilio, ni Torm ni Auretta podían usarla, además de que habían sido dejados muy lejos de este camino, por lo que su única opción era cruzar por las montañas si es que querían llegar a un poblado del otro lado de la frontera, algo sumamente difícil y peligroso, aun contando con los recursos necesarios, por lo que para la pareja era algo prácticamente imposible.

Ambos caminaron por días cuando de repente encontraron una cueva en medio de las montañas, cueva que los llevo, no solo del otro lado de la cordillera, sin tener que sufrir de las inclemencias del clima, sino que también los dejo a las afueras de un poblado, ni Torm ni Auretta podían creer la suerte que habían tenido, puesto que hasta donde ambos sabían, no había ni un pueblo tan cerca de la frontera, pero debido a que ambos tenían serias carencias en sus conocimientos no lo pensaron suficiente, y decidieron ignorar este hecho.

Mientras que ambos avanzaban al poblado, la entrada de la cueva que los había llevado hasta aquel lugar se cerró por completo y desde dentro solo se pudo oír el eco de la risa de una mujer, pero ambos ya se encontraban muy lejos, por lo que no oyeron nada.

A pesar de lo que la pareja creyó, el llegar a dicho poblado no resolvió sus problemas, puesto que dicho poblado pertenecía a las tierras del ducado Kasar, y si bien las cosas ya habían mejorado para los pobladores desde que el anterior duque fue destituido, no había pasado mucho tiempo desde aquello, por lo que aún sufrían de algunas carencias, por lo que al ver a estas dos personas tan sucias, el pueblo opto por ignorarlos, apenas tenían lo suficiente para vivir ellos, no pensaban desperdiciar lo poco que tenían en dos pordioseros.

Ante la negativa de la gente por darles comida o alimento, Auretta y Torm comenzaron a agredir a las personas, a las que veían como seres inferiores a ellos que debían de servirles, puesto que ellos solo pensaban en recibir sin dar nada a cambio, lo que causo que ambos fueran agredidos en más de una ocasión por los pobladores, que cada vez estaban más hartos de su actitud, la situación se volvió tan insostenible, que padre e hija pelearon, culpándose mutuamente de su situación, pelea que causo su separación, y ambos optaron por tomar rumbos distintos, lejos de aquel poblado.

Auretta partió rumbo al norte, pues recordaba que allí se encontraba la capital, y en el camino un carruaje muy lujoso se detuvo a su lado y de este bajo un muy apuesto hombre, de ojos azules y cabello verde.

- ¿Qué hace tan hermosa flor, sola? – le preguntó aquel hombre a Auretta, con quien quedó encantada inmediatamente y erróneamente creyó haberlo cautivado con su belleza, por lo que cuando esté la invitó a viajar con él, ella no lo duda y sube al carruaje.

En el camino, aquel hombre le pregunta varias cosas a Auretta sobre su vida, a lo que la joven contesta todas y cada una de ellas con una sonrisa.

- Así que, ¿estás sola? – pregunta el hombre nuevamente.

- Sí, mi madre fue encerrada por una injusticia, y no sé quién es mi padre, él nos dejó cuando yo era muy joven – le dice Auretta mientras finge llorar. La joven inventó una historia para así conmover al hombre frente a ella, puesto que para la chica él es su boleto para una vida lujosa.

- Oh, ya veo – dice el hombre con una sonrisa, puesto que si bien noto que la chica frente a él, le ha estado mintiendo, puedo notar que sí dijo la verdad en ciertas cosas, y una de ellas fue el hecho de que se encuentra sola, y si algo le pasa, nadie la buscará.

Esa misma noche aquel hombre lleva Auretta a un hotel en donde la joven al fin puede asearse y el hombre le compra un hermoso y lujoso vestido para posteriormente llevarla a un restaurante para que la joven pueda comer hasta saciarse, puesto que a aquel hombre le importaba mucho que la joven luciera bien.

Lo que Auretta no sabía era que Torm, quien arrepentido por su separación, comenzó a buscar a la chica, y guiado por su “instinto”, llegó a aquel lugar, y al ver a Auretta tan cómoda, no duda en entrar, puesto que piensa que la chica lo ayudara.

Pero eso no pasa, Auretta al ver al hombre que por mucho tiempo creyó su padre, entra en pánico y comienza a gritar por ayuda, y cuando Torm hace alusión a que ambos se conocen, Auretta niega todo y solo lo insulta, puesto que la presencia de Torm, dejaría en evidencia todas las mentiras que dijo, y ella no piensa abandonar su posible vida de lujos ni por Torm ni por nadie.

La actitud de Auretta dejó devastado a Torm, puesto que para él, Auretta era todo lo que le quedaba y ahora incluso ella le estaba dando la espalda.

Con los ánimos en los suelos, Torm comenzó a vagar por aquella pequeña ciudad, lamentándose por lo que estaba pasando, pero a pasar de lo ocurrido, para Torm nada de esto era su culpa, sino que culpaba a los demás por su situación.

Mientras que Torm se alejaba de aquel restaurante, una sombra lo observaba desde la oscuridad.

- Este es algo más inútil que mi marioneta anterior, pero tiene un gran potencial – dice aquella persona, su voz es extraña, siendo esta la combinación entre un hombre y una mujer, y así de la nada esta persona desaparece, y una pequeña estela de color negro sigue los pasos de Torm

Por su parte Auretta, quien creía que tenía la vida resuelta, fue a dormir cómodamente, sin saber el infierno que la esperaba, puesto que el hombre que la ayudo no era para nada quien ella creía, puesto que a solas en su habitación aquel hombre se quitó el lodo de su rostro, de su cabello e incluso de sus ojos, mostrando una apariencia totalmente diferente, este hombre era conocido como “mil caras” un criminal perteneciente al reino de la tierra, quien usaba magia para cambiar su apariencia, colocándose lodo en el cuerpo, para luego usar un hechizo que este transformara su aspecto, usando el lodo como base.

Mil caras era un conocido secuestrador, que se llevaba a jovencitas a base de engaños y luego las vendía a burdeles en todos los reinos, siendo su principal comprador el reino del fuego, debido a que nadie conocía su verdadera apariencia, y al hecho de que la mayoría de sus víctimas se iban por voluntad propia, no había sido posible su captura, algo que ponía sobre alerta no solo al reino de la tierra, sino a todos los demás.

Así, a la mañana siguiente ambos salen del hotel con rumbo desconocido para la chica, pero no para el hombre que viaja con ella, quien ya se tiene en mentes varios posibles compradores para Auretta.