El CEO de una empresa popular descubren que tiene dos hijas de 7 años muy hermosas, su padre siempre les da los que desean, pero hay algo que no puede darle y es una madre.
por eso varias chicas tratan de conquistar el corazón de aquellas niñas para que la elijan, pero los que ellas quieren es el dinero.
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Capitulo 21
Al día siguiente se fueron del hospital en la mañana, se separaron en el camino.
Jane llegó a la casa de su jefe sin ningún problema, pero se dio cuenta de que había autos casi cerca de la casa de su jefe y había hombres pasando por ahí. Creía que su jefe los había puesto a vigilar, pero ellos no son los hombres que conoce así que deduce que son los hombres del abuelo de las niñas.
Jane entra rápido a la casa y llama rápido a su jefe y le dice lo que está sucediendo.
—Jane ¿Dónde estamos? -dijo su hermana mirando alrededor.
—Estamos en la casa de mi jefe, duerme un poco más aún es temprano -dijo terminando la llamada de su jefe y guardando su celular.
—¿En serio? ¿Y las niñas? Quiero verlas.
—Como dije aún es temprano, las niñas están durmiendo en su habitación.
—Oh bueno... esperaré a que despierten para hablar y jugar con ellas -dijo emocionada Caroline.
—Está bien, pero ten paciencia con Elizabeth es un poco... cómo decirlo...
—Está bien hermana, le tendré paciencia -dijo Caroline sentándose en el sofá mientras miraba las escaleras.
—De acuerdo, pero no asustes a las niñas, te conozco Caroline.
—Tranquila, eso fue antes -Se burló- ahora estoy más tranquila.
Jane va a la cocina a hacerle el desayuno a las niñas y en eso se percata que Lizzy la niñera de las niñas no estaba en la cocina o en la sala, eso se le hizo muy extraño, pero también la preocupo, puede que esos hombres hayan secuestrado a Lizzy.
—Espero que no le haya pasado nada malo -dijo tomando su teléfono.
Antes de enviar un mensaje, se escuchó la puerta abrirse y corre hacia la sala.
-¡Lizzy! ¿Estás bien? No te paso nada ¿Verdad? -dijo preocupada.
—¿De qué hablas? Solo fui a comprar algunas cosas, pero ¿Cuándo llegaste?
—Hace un rato ¿Estás segura de que estás bien?
—Que si Jane, no te preocupes -deja las compras en la mesa- ¿Y Evan? ¿Dónde está?
—Él fue a terminar un trabajo, dijo que volvería en unas horas.
—Mm... Bueno haré el desayuno de las niñas -tomas las compras y lo lleva a la cocina.
—...
A Jane le resultaba extraño que a Lizzy no le importará o no sospechara por esos de afuera, estaban casi cerca de la casa y se podía decir que era obvio.
Unas horas después. Ya eran las 11 de la mañana, su jefe no volvía y las niñas no despertaban. Caroline estaba impaciente, tenía muchas ganas de conocer a las niñas y jugar con ellas.
—Lizzy ¿Estás bien? Te noto distraída.
—Ah sí, estoy bien... iré a despertar a las niñas -dijo subiendo las escaleras.
Algo estaba mal en Lizzy, estaba muy distraída, antes casi se corta un dedo cocinando, no le presto atención a lo que Jane le decía.
Las niñas bajaron rápidamente y se alegraron al ver a Jane, corrieron a abrazarla y darles muchos besos por todo el rostro. Elizabeth comenzó a llorar cuando vio a Jane, la abrazo muy fuerte y le pidió perdón por lo que había pasado.
—Cariño no llores, ya no estoy enojada contigo nunca me enojaría contigo -al final le da un beso en la mejilla.
—Papa me dijo que no volverías nunca -dijo gimoteando.
—Tu papá es exagerado, nunca voy a abandonarte -mira a Isabela- a ninguna de las dos.
—Más te vale Jane o si no le diré a papá que te pegue -dijo Isabela.
—¿Quien es ella? -fruncio el ceño al ver a Caroline.