Por Tí Seré...La Bruja

Al escuchar esa voz me quedé estupefacta sin poder mover un solo músculo de mi cuerpo.

_ ¿Qué pasa Susan porque aún no entras?._ Vuelve a insistir.

Pero antes de que la mujer contestara el jefe de Anne lo hizo.

_ Lo siento señorita pero ya estamos cerrados._ Le dice acercándose.

Al ver que venía, bajé la cabeza y salí de ahí rápido hacia la cocina.

Llegué y me senté en una silla, sentía que el aire me faltaba, comencé a acariciar mi vientre mientras un par de lágrimas se me escapaban.

_ Perdóname bebé... perdóname por no darte un bueno padre que te ame._ Le decía mientras lo acariciaba con mucho amor.

Un par de minutos después el jefe de Anne entró a la cocina con una cara un poco molesta.

_ No sé que se cree esa gente que piensa que el mundo les pertenece._ Dice enojado._ Sabes esa mujer quería que salieras y te disculparas, obviamente por algo que no hiciste porque en ningún momento escuché que hablaras._ Me dice aún enojado.

_ ¿Todavía están afuera?._ Le pregunto preocupada y sumamente nerviosa.

_ No, ya se marcharon pero como le dije a la señorita que no iba a permitir que fueras a disculparte por algo que nunca hiciste, el hombre me amenazó que si no te corría iba hacer lo imposible para que me cerraran el café._ Me dice soltando un suspiro pesado.

_ Lo siento señor._ Le digo apenada.

_ No lo sientas, mejor termina de limpiar las mesas para irnos a descansar, tú bebé necesita reposo._ Me dice con una sonrisa cálida.

_ Muchas gracias._

Salí a limpiar las mesas aún con nervios y miedo de que regresaran, estaba tan temerosa por eso que cuando tocaron a la puerta me lleve un gran susto. Miré de reojo y ví que se trataba de Kimberly, rápidamente le abrí y cuando la tuve frente a mí la abracé y comencé a llorar como niña pequeña.

_ ¿Qué pasa Luna? ¿Te sientes mal? ¿Te hicieron algo?._ Me pregunta preocupada abrazandome.

Lentamente tranquilice mi llanto y le dije escondiendo la mirada.

_ ¿Kimberly si te cuento algo no me juzgaras y no dejarás de ser mi amiga?._

_ Claro que no Luna, puedes decirme lo que quieras que yo nunca te abandonaré._ Me dice abrazandome fuerte.

_ Solo término estas dos mesas y nos vamos, en el camino te platico._ Le digo triste.

Quería... necesitaba hablar con alguien, sacar todo esto de mi pecho y Kimberly es una buena amiga, sé que me escuchara.

Ella me ayudó a terminar de limpiar las mesas que faltaban y cuando terminamos el jefe de Anne me entrego un sobre con dinero, mucho más del que pensé, también me regaló un par de cafés descafeinados y varios postres que le habían quedado. Le di las gracias y luego me fui junto a Kimberly.

Caminamos por la acera mientras tomábamos el café que nos habían regalado hasta llegar un parque, en este ya no había casi nadie solo un par de parejas que aún quedaban por ahí, nos sentamos en una banca y ella me tomó suavemente de la mano mostrándome su apoyo.

_ Te escucho Luna, ahora sí dime ¿qué pasó?._ Me pregunta mirandome a los ojos.

_ Hace un momento cuando estaba limpiando el café vino el padre de mi hijo._ Le digo con un nudo en la garganta.

_ ¿Cómo? ¿Lo viste? ¿Qué te dijo? ¿Qué pasó?._ Me hace un montón de preguntas.

_ No alcance a verlo, pero estoy cien por ciento segura que era él, podría reconocer su voz donde sea._ Le digo entre sollozos.

_ Tranquila._ Me dice mientras me da unas palmaditas en la espalda.

_ Ahora se que nunca me amo, fuí yo la que se creó una novela romántica en la cabeza, la única estupida aquí fuí yo._ Le digo llorando.

_ ¿Porqué dices eso?._

_ Porqué yo lo dejé quedarse en mi cabaña el primer día que lo conocí, porque yo me enamoré de él sin saber quién era, de dónde venía, no sabía nada, solo su nombre, su edad y que vivía aquí en la Capital._ Le digo mientras me limpio mis lágrimas._Yo me entregué a él precisamente el día de mi cumpleaños, él en ningún momento me dijo que amaba, después lo hizo pero fue porque yo se lo pregunté._ Le digo ahogándome en mi llanto.

_ Si te hace mal no sigas, le puede hacer daño al bebé._ Me dice Kimberly mientras me abraza.

_ Sabes, un día tuve el valor de preguntarle si no sentía nada por mí y ahora entiendo la razón por la que dudo tanto en decirme que me amaba._ Le digo con una mueca de lado.

_ ¿Porqué?._

_ Porque hoy venía acompañado de una mujer muy hermosa, fina y elegante, nada que ver conmigo._ Le digo entre sollozos.

_ ¿Entonces él es una persona adinerada o porqué estaba con ella?._ ¿Me pregunta curiosa.

_ No lo sé, el día que yo conocí vestía un traje muy elegante pero nunca me habló de su familia, ni de nada._ Le digo bajando la cabeza.

_ ¿Nunca le preguntaste si era casado, tenía novia o prometida?._ Me pregunta mirándome.

_ Sí, una vez le pregunte pero él me dijo que no, pero ahora ya sé que me mintió._ Le digo un poco apenada.

Nos quedamos callados por un par de minutos miraba como Kimberly quería preguntarme algo pero no sé atrevía hasta que finalmente lo hizo.

_ Perdona mi pregunta, pero ¿cómo lo conociste?._ Me pregunta expectante a mi respuesta.

Ante su pregunta solté un suspiro pesado y después le comencé a contar todo desde el día que conocí a Anthony, lo golpeado que estaba y del intento de secuestro que tuvo, lo que pasó con el señor Santiago, el porque deje que Anthony se quedara en mi cabaña, del día que me enteré que posiblemente estaba embarazada y que regrese con mucha ilusión a contarle a Anthony y que lo único que encontré fue que él se estaba llendo sin siquiera decirme. Le conté las duras y crueles palabras que me dijo antes de marcharse y que hasta este momento se clavan como puñales en mi alma, prácticamente le platiqué todo hasta el porqué salí casi huyendo del pueblo.

_ No es posible que te hayan echo eso Luna._ Me dice afectada mientras me toma fuerte la mano._ Escúchame bien tú no eres ninguna bruja, tú eres una mujer muy hermosa y ese color en tus ojos ya muchos los quisiéramos tener._ Me dice mientras sus lágrimas bajan por sus mejillas.

_ Gracias Kimberly._ Le digo abrazandola.

_ No me agradezcas linda, que desde hoy yo seré como tu hermana y la tía de este bebé hermoso y no dejaré que nadie los intimide por que se las verá conmigo._ Me dice acariciando mi vientre.

Al escucharla comencé a llorar de emoción de haber podido encontrar a una persona tan buena como ella.

Unos minutos después de calmarnos las dos respiramos profundo y estábamos listas para regresar a casa cuando me pregunta.

_ Oye Luna, ¿cómo se llama el cucaracho?._

_ ¿Cucaracho?_ Pregunto confundida.

Por momento no entendí lo que me preguntaba hasta que comenzó a reírse por mi reacción al no saber lo que me preguntaba.

_ ¿Cómo se llama el padre del bebé?._ Me dice sonriendo.

_ Ah...se llama Anthony Smith._

_ ANTHONY SMITH._ Grita dejándome casi sorda._ ¿Estás segura que así se llama?._ Me pregunta exaltada.

_ Sí o bueno eso fue lo que me dijo y luego me mostró una identificación y ahí decía ese nombre._ Le digo ahora con duda de que de verdad se llame así.

Kimberly inmediatamente sacó su celular y comenzó a buscar algo en el, de pronto me mostró la pantalla y me pregunto.

_ ¿Esté es el padre de tú bebé?._ Me pregunta expectante a mi respuesta.

Al ver la imagen en la pantalla realmente se trataba de Anthony así que no tuve duda en contestarle de inmediato.

_ Sí, él es el padre de mi bebé._ Le afirmo.

Kimberly al escucharme se dejó caer sobre la banca con la mirada perdida como si hubiera visto al mismísimo demonio.

^^^Continuará...^^^

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