Un Romeo Para Julieta.

Luego de todos los servicios y de despedir a las personas salimos rumbo al despacho del abogado de Mariano, en el ya se encontraba su madre y su hermana. Tal parece que estas víboras no pueden esperar a ver que se llevarán.

- Buenas tardes a todos los presentes y mi más sentido pésame, trabaje muchos años junto al señor Mariano y está noticia fue devastadora, era un hombre demasiado joven todavía con una vida entera por disfrutar así que esto me duele en lo personal porque perdí a un amigo.

- Por favor vaya al grano señor no estamos para palabras de consuelo que de nada sirven ahora que mi hermano ya no está entre nosotros.

- Bien. El señor dejo escrito un testamento en que se ve beneficiada su madre la señora Elba como única dueña de su seguro de vida también le deja a su hermana Ana sus acciones en la empresa filiar más una mensualidad.

- Disculpe abogado entiendo todos los puntos anteriores ¿Pero de dónde saldrá la mensualidad? ¿Y qué acciones está dejando a Ana?

- Bueno las acciones son del 15% de la empresa "TECNOADA". En cuanto a la mensualidad específica que debe de salir de usted señora Julieta.

- ¿Por qué yo tengo que pagarle algo a estas mujeres que se están llenando los bolsillos desde arriba?

- Maldita desgraciada, tuviste a mi hijo como esclavo trabajado día y noche para llenar tu cuenta bancaria y te niegas a compartir su esfuerzo con nosotras que somos su familia.

- Mejor cierre la boca y no hable de cosas que no sabe señora si es que se le puede decir así por qué yo prefiero decirle carroñera.

- Te enseñaré modales mocosa hija de pu..

- A mi mamá no le va a faltar el respeto alguien de su calaña.

El abogado interfiere de inmediato antes de que nos desgreñemos justo en el lugar. - Señoras por favor no inicien una pelea aquí. Las acciones son legalmente del difunto aquí esta la firma de su padre.

- Si mi padre se las dio el día de nuestra boda, pero yo no creo que deba de dar ni un solo centavo más a estas personas, no son mi responsabilidad y como usted puede ver tampoco somos cercanas.

- Entiendo aquí dejo una carta para usted. Cuando una persona realiza un testamento no lo hace pensando que morirá pronto es más bien un seguro para el futuro, quizás el señor Mariano pensó que ustedes se llevarían mejor al pasar de los años.

Tomo la carta buscando alguna respuesta porque justo ahora tengo muchas preguntas, en cierto punto entiendo que quisiera dejar a su familia algo para que pudieran estar bien sin él que era el único sustento, pero esto me parece demasiado. La abro ansiosa y con los ojos algo cristalizado al ver su letra.

*Mi amada esposa tal vez ahora mismo estés muy confundía y también demasiado dolida, que más quisiera yo que poder vivir hasta viejo a tu lado mi bella Julieta, pero la vida es así y nadie sabe cuando va a partir. Agradezco estos años a tu lado y todo el amor que me diste, por favor no desampares a mamá, ella estará sola como tú si yo me voy así que apóyense mutuamente aunque no lo parezca las dos se parecen demasiado. No te pido mucho únicamente que mantengas la cantidad de su mensualidad y que la veas como a la madre que perdiste. Te amo.

¿Qué estupidez es está? Ni loca la voy a ver como a mi madre. Esta mujer desagradable no le llega ni a los talones a mi madre y nosotras jamás vamos a poder llevarnos bien.

- Abogado me niego rotundamente a cumplir está petición, por lo que entiendo no estoy obligada a realizarla así que no la voy a cumplir. Cuando salga de aquí no quiero tener más contacto con estas dos así que bien pueden venderme las acciones y disfrutar del dinero como se les dé la gana o lo que sea, pero yo no voy a ceder.

- Ni creas que te daré las acciones.

- Bueno entonces buena suerte trabajando por primera vez es tu vida, porque sigue y seguirá siendo mi empresa y tú solo ocupadas el lugar de una empleada cualquiera bajo mis órdenes.

La veo sorprenderse por la información ¿De verdad es tan estúpida que creía que sería la dueña de algo que es mío?

- Esa empresa se mantuvo en pie gracias al sacrificio de mi hijo.

- No fue un sacrificio en lo más mínimo, Mariano disfruto de un sueldo y vacaciones como todo el mundo y más beneficios por ser el esposo de la dueña de esta. Yo no permitiré que ustedes dos pongas sus sucias manos en mi patrimonio.

Me levanto para salir del lugar, ya no soporto está conversación ni a esas dos víboras venenosas. No se en que diablos estaba pensando Mariano al hacer ese absurdo testamento, pero yo no soy mi brazo a torcer tan fácilmente.