Oh No ! Un Beta En Apuros

Xilun

Caminé por el callejón que daba a casa; a lo lejos se podía apreciar un grupo de hombres que rodeaban el lugar… No eran caras desconocidas, a menudo mi padre apuesta cualquier cosa de valor que se encuentran a su alcance, en su defecto las roba.

Mi progenitor es hombre con muchos vicios, entre ellos el alcohol. Los hombres estaban por irse, corrí rápidamente, sabiendo que no podía evitar lo inevitable, asustado y ansioso como si fuera la primera vez. Uno de los hombres golpeó su hombro con el mío —Oye niño, dile a tu padre que la próxima vez busque algo de dinero con que pagar, estamos cansados de la zorra de tu madre.

Sin emitir respuesta entre a la casa mientras agachaba la cabeza, noté de inmediato los vidrios rotos en el suelo al igual que los muebles y la mesa esparcidos por todo el lugar, mi padre permanecía en el suelo rodeado de botellas vacías, con la ropa rasgada y algunos moratones, mientras se empinaba otra botella de alcohol.

~¡Dónde está mamá! __ El olor era tan fuerte que podía embriagarme incluso sin beberlo.

El hombre frente a mí solo balbuceaba sin poder decir algo coherente o abrir sus ojos por completo. Lo empujé con algo de desprecio y repulsión, pero no lo suficiente fuerte para hacerle daño.

Busqué en las habitaciones, un rastro de sangre que me llevo hasta el baño principal, en donde se encuentra tendida con el cuerpo magullado, hay algunas hebras de cabello en el piso, sangre escurre de su boca y una marca alrededor de su cuello lo adorna, mete algo de droga por su nariz, aquella imagen familiar siempre me quebranta.

Anteriormente, cuando era tan solo un niño recuerdo que mi madre era un hombre con defectos como todos, pero saludable, hermoso y servicial, mi padre al mes de convertirse en un desempleado comenzó apostar prendas de valor, desde cadenas hasta implementos de Cocina, enviciándose por completo apostó sumas grandes de dinero, pero al peder, sumido en la desesperación, permitió que abusaran de mi madre en todas las maneras posibles hasta que no quedará rastro de lo que era. Mi madre, con vergüenza, trató de esconderse para que no lo notara, pero con el tiempo estos actos fueron accionados ante mi presencia.

En su dolor y decepción, comenzó a consumir toda clase de drogas que lo mantenían alejado de la realidad, deteriorándose poco a poco sin tener una mano amiga que la salvase.

En algunas ocasiones podía sentir su mirada sobre mí con lástima, otros días con odio, como si se lamentara profundamente de mi nacimiento. Lejos de culparlo, entiendo su dolor, debe ser asfixiante, llevar el peso en tu espalda de culpas ajenas ..., la incertidumbre en mi piel me mantenían ansioso, Cada vez que lo veo en este estado, tengo miedo, miedo de no poder escapar y convertirme en él.

—¡Déjame ayudarte! — acerqué un trapo de agua tibia en sus heridas.

— No— apartó mi mano

—Ni tú ni nadie puede ayudarme ... El bastardo de tu padre acabó conmigo, pronunció con rabia mientras mordía sus uñas.

—Lo siento ... —Los pensamientos en mi interior fueron expulsados sin darme cuenta

—No necesito tus disculpas, … No sirven de nada —posteriormente a eso, soltó una carcajada mientras cubría su rostro; algunas lágrimas se deslizaron por sus mejillas. —Es gracioso, ¿no? —Desplomó su cuerpo, mientras miraba el techo.

—Pensaba que mis padres me lo advirtieron, pero yo era muy tonto en ese entonces. … Me dejé cegar por amor, ¿cuál amor?!,… Un beta con complejo de inferioridad que vi con tristeza y remordimiento… enamorándome de esa apariencia débil, siendo su carácter lo único débil, en realidad, dejé atrás todo, e incluso la posibilidad de una pareja destinada —metió nuevamente el polvo en su nariz mientras lo inhalaba a toda prisa.

—Y no contento con eso, me embaracé de él, todo un futuro brillante tirado a la basura por nada—, ja, ja, ja ahora ni siquiera puedo llamar a mis padres…, ni siquiera sé si están vivos… Da igual de todas formas, yo estoy muerto para ellos. Di a luz un hijo defectuoso igual a él, pero no es tu culpa… Es mía —golpeó su pecho con fuerza— pudiste ser un omega o incluso… un alfa … Pero te di una vida de mierda …

—¿Sabes? Tu rostro es igual al de él cuándo era joven… eso me enoja, seguiré enojado hasta que muera, con todo, con todos y conmigo mismo — colocó su brazo en su cara cubriendo solo ojos.

Su voz se agudiza cada vez más como si su garganta estuviera obstruida, recogí su cabello y busque el botiquín para curar sus heridas, por su parte permanecía con la cabeza agachada, al parecer la droga había hecho efecto, sus ojos están perdidos, su cuerpo se encuentra débil, quería mencionar algo más, pero lo detuve.

—shh, no digas más y déjame encargarme del ti —mencioné rodando su cuerpo a un lugar cómodo y seguro. Miré la hora en el reloj, nuevamente llegaré tarde al trabajo de medio tiempo

—¿Qué debo hacer? — …