Sus dientes se hundieron en mi cuello y grité, mordiendo de vuelta tal como él dijo, pero no dolió como pensé que era, fue eufórico en cierto modo, peligrosamente bueno mientras gemía. No había atravesado mi piel, pero podía decir que la mordida era diferente, que algo había quedado y sabía que el débil anillo de marcas de dientes no se desvanecería pronto. Ahora los otros dos hermanos estaban esperando para hacer lo mismo. Mi cuerpo temblaba, ya en éxtasis, ¿cómo iba a tomarlos a los tres? Ellie era rica, pero su padre nunca le dio una sola muestra de afecto. Hasta que su camino se cruzó con los hermanos Sined. Los hombres lobo y los vampiros eran parte de historias oscuras en la mente de Ellie, hasta que conoce no a uno, ni a dos, sino a tres hombres lobo, y a un vampiro muy poderoso. ¿Qué hace que las cosas sean más complicadas? Todos la quieren para si mismos.
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Capítulo 2
Tendría que llamarlo más tarde y agradecerle, y asegurarme de que él también estaba bien. Evitar la influencia de mi padre no fue fácil y la influencia de Thomas no fue tan grande como a ninguno de los dos nos gustaría por su propia seguridad. Lo mejor es asegurarse de que no haya ningún problema.
Mi teléfono vibró y lo saqué, viendo que el correo electrónico de mi escuela funcionaba correctamente mientras todos los estudiantes de primer año estaban siendo convocados para comenzar su orientación en el gimnasio.
Deslicé mis llaves en mi bolsillo y le di una última mirada a mi habitación antes de salir. Parecía que no era el único que había recibido el recordatorio cuando un grupo de personas salían de los edificios de dormitorios y se dirigían hacia allí.
La caminata fue corta y mantuve la cabeza baja durante la mayor parte del camino. Sin contacto visual, sin llamar la atención, simplemente manteniendo un perfil bajo. Siguiendo las indicaciones al pie de la letra.
"Muy bien, creo que tenemos a casi todos, ¡bienvenidos estudiantes de primer año a la Universidad de Oakwood! Ahora eche un vistazo a su alrededor, algunas de estas personas que verá serán sus mejores amigos por el resto de su vida, o
¡Seguirán siendo extraños en diferentes departamentos durante la mitad de eso!", dijo alegremente el locutor anfitrión. Parecían un estudiante de último año vestido con una camiseta verde y dorada.
"¡Ahora gira a tu izquierda! Fantástico, ahora la mitad de ti gira
bien y podemos empezar todo esto
¡presentándonos! Yo iré primero y lo haré un poco más fácil para todos ustedes. Soy Alice y me especializo en bioquímica. ¡Tu turno!" "Guau, bioquímica, qué flexión." La persona a mi lado
Silbó en voz baja y me giré para ver a una chica de cabello negro azabache con mechones rojos y ojos azules brillantes. Llevaba una chaqueta vaquera y botas militares, pero ofrecía una sonrisa tranquila.
"Soy Charlotte Black, pero puedes llamarme Charlie. Seré una estudiante de química normal y corriente".
"Eleonore Everwood, pero la gente me llama Ellie. Me estoy especializando en arquitectura y diseño".
"Bueno, supongo que no seremos extraños en diferentes departamentos".
"¡Jaja! Supongo que no."
"Mira eso, Thomas, en realidad estoy haciendo amigos", pensé mientras nos guiaban a través de juegos y reuniones para conocerte. Fue agradable. No pasaría mi tiempo aquí completamente solo.
Después de la orientación, me dirigí de regreso a mi dormitorio. Tendría que levantarme temprano para los recorridos de mañana y quería saber todo lo que el campus tenía para ofrecer.
Estaba doblando la esquina hacia otro edificio, mirando hacia el techo metálico del gimnasio a lo lejos cuando me estrellé contra una pared.
No, una pared no, las paredes no tienen brazos.
Mi corazón latía con fuerza cuando una mano aterrizó en la parte baja de mi espalda, evitando que cayera.
"Lo siento." El bajo rugido de su voz me hizo mirar hacia arriba. El cálido calor de su proximidad hizo que mi corazón diera un vuelco y mi cara se sintiera caliente... y luego mi respiración se entrecortó.
Era guapo, con cabello castaño oscuro y ojos castaños profundos, y no fue una sorpresa que lograra llamar a la puerta.
Me respondió con tanta facilidad cuando él era una cabeza más alto y constituía como si estuviera hecho para los deportes. Tenía rasgos encantadores, pero esos ojos brillaban dorados, y la atracción que sentí me hizo retroceder lo más rápido que pude.
"¡Lo siento! Lo siento mucho. Soy torpe, lo siento... realmente debería irme". Me alejé lo más rápido que pude, y no es que estuviera huyendo, pero estaba huyendo y no lo hice tan elegantemente como esperaba o probablemente debería haberlo hecho.
"Hey, espera-!"
No había absolutamente ninguna manera de que estuviera esperando, y me alejé rápidamente antes de que pudiera detenerme o, peor aún, interactuar con él.
Lo ÚNICO que se suponía que no debía hacer, y lo había hecho, ¡correr hacia lo sobrenatural y apenas era el primer día!
Esos ojos dorados, obviamente era un hombre lobo, pero normalmente no se revelaban así.
Oh Dios. Debí haberlo molestado al encontrarme con él y estaba lo suficientemente enojado como para darme una advertencia.
Tuve que calmarme y controlarme. Fue sólo un accidente, un pequeño error, seguramente él no me perseguiría y le daría mucha importancia, ¿verdad? Yo era solo un pequeño humano y solo el rector de la universidad sabía quién era mi padre.
Estaba bien, yo estaba bien, me recordé.
Aun así, miré detrás de mí, pero no había nadie. Sólo otros estudiantes, ningún hombre lobo de pelo castaño, y suspiré aliviado.
Bien. Eso estuvo... eso estuvo bueno.
No hay problema, me había advertido mi padre, e incluso sin la segunda advertencia, involucrarse con lo sobrenatural no sería más que un problema.
No se anunciaron ante la población y
Sólo algunas personas lo sabían. Por lo general, los ricos y
rico como mi padre, pero incluso entonces sólo había visto un
vampiro o hombre lobo una o dos veces, y fue entonces cuando
mi padre estaba haciendo un trato.
Ese tipo era probablemente sólo el tercer o cuarto hombre lobo que había visto en mi vida y, con suerte, seguiría así.
Después de todo lo que había pasado, no necesitaba problemas. Finalmente estaba en la Universidad de Oakwood. Realmente estaba aquí y nada iba a arruinarlo. Ni mi padre y ciertamente ningún hombre lobo.
