En La Oscuridad

Un año. Eso era el tiempo qué había pasado desde la última vez que adara había visto a desmon, durante ese tiempo su trabajo de angel de la muerte se había convertido en una rutina aprendida. Los estantes de su depósito ahora estaban llenos de pequeñas almas.

Durante sus primeras recolecciones Adara demoraba en el traslado, pero con práctica ahora lo lograba rápidamente, trabajar junto a nous era muy tranquilo, la chica hablaba poco y solo se dedicaba a lo que debia ( trabajar) Adara aún caminaba por los grandes pasillos cuando no había nada que la mantuviera ocupada.

Su padre no había aparecido en ningún momento y aunque no quisiera admitirlo, lo extrañaba.

En ocasiones mientras se tumbaba en su cama y se perdia en sus pensamientos añoraba su hogar, y Aunque con un solo chasquido de sus dedos podría volver, recordaba qué su padre la había echado.

- hola asli - se recostó frente a la estantería donde estába su primera alma - ¿estas descansando? Yo lo he hecho, pero me aburro en ocasiones - suspiró y miró el brillo del recipiente pasó sus dedos por el cristal y con su dedo siguió las líneas del nombre de la niña - tu mamá está bien , no debés preocuparte por ella , yo perdi a mi madre cuando nací, al menos tú la disfrutaste, poco tiempo, pero lo hiciste. - retiró su mano del cristal y le sonrió como si la pequeña pudiera verla - fuiste fuerte - dicho eso camino hacía donde se encontraba nous. Al llegar la chica levantó el rostro del libro que leia. - ¿de nuevo perdiendo tu tiempo en esa porquería humana? - nous rodo los ojos.

- déjame, tengo derecho a creer en el amor - se quejó mientras cerraba el libro - además este libro me lo regalaste tú.-

- pero no crei que lo leerias un millon de veces mujer -

- podrias prohibirmelo - dijo con tristeza

- claro que no, ahss por qué haría éso -

- la parca le prohibió a sus recicladoras hablar de tí, tu podrias hacer lo mismo conmigo -

- ¿que hizo qué?- le pregunto mientras se detiene frente a ella.

- ah eso, si pues, - se aclara la garganta - el príncipe desmon, le ordenó que no debian mencionar su nombre frente a el, y mucho menos desviar almas aquí -

- espera - la interrumpió - ¿ como que desviar almas? -

- bueno, princesa el príncipe desmo como parca principal siente todos los llamados y pues si usted no llega a sentirlos el hace la recolección y las lleva a su depósito, pero esas almas deberian estar aquí, no con ellos - concluye.

- me esta robando almas ese desgraciado -

- no, no , el solo - nous se callo cuando adara la fulmino con la mirada.

- ¿sabes llegar a su depósito? - nous nego. - ¿entonces como sabes esa información?-

-- en mis tres minutos de descanso me suelo reunir con algunas de sus recicladoras, ellas me lo dijeron - se pone en pie y camina hacia donde estan sus cosas - pero usted si puede saber dónde está su depósito o puede ir a él. - adara le alza una ceja - usa tu poder y encuéntralo, te esta robando princesa- adara la miro con cara de no te estoy creyendo - de verdad ¿dejara qué el se quedé con lo qué le pertenece?-

- no, ya lo robé una vez y el casi me mata ahora resulta que él me ha robado más de una vez, que hipócrita - nous le sonrió y saco de su pequeño bolso un collar qué sostenía un reloj. - ¿ que es ?-

- es tu reloj de tiempo, llego hoy - se lo entregó.

-¿ como se usa ?- lo miró y le gusto su forma. Las agujas se movian como si estuvieran flotando sobre el agua y los número me movian de un lugar a otro sin tener un lugar fijo.

- a cada minuto un humano muere - le conto con tristeza - tú llamado te lleva a tus almas pero a desmon lo lleva a todas las almas. Este reloj te lleva a cada humano qué va a morir, puedes recolectar el alma que desees solo si eres más rápida que la parca, no vas a competir con él, solo harás tú trabajo - tomo el reloj y le señaló las manecillas - desmon recolecta una alma cada tres minutos - adara abrió los ojos con sorpresa- pero tiene un tiempo de dies minutos donde lleva sus almas al depósito, ese tiempo debes aprovecharlo, son tres almas las que puedes quitarle -

- ¿como sabes eso?

- sus recicladoras suelen regodearse del poder de su amo - adara soltó una carcajada.

- eres terrible nous - la chica le sonrió

- solo reciclo información pará mi jefa - adara negó con la cabeza.

- gracias, sin tí esté año hubiera sido de fracasos - nous hizo ademan con su mano para restarle importancia al trabajo que había estado haciendo.

- solo hago mi trabajo, la mejor parte la haces tú, ahora ve por esas almas que nos robaron-

Adara le sonrió y giró el reloj dejandose llevar por la sensación de qué la esperaban.

A.C