Una Rosa Sin Color

La terapia intensa es diferente para cada género, para los omegas consiste en un celo inducido mediante medicamentos, dejándolos en un cuarto sin algo con que llenarse, para los Alfas es ser sometido a la oscuridad total, no tienen contacto con nadie por durante treinta días, para los Deltas es ambas cosas con la excepción de que ellos no tienen algo que llenar, al ser su Rut demasiado agresivo el no tener pareja es una tortura.

"¿por qué infringes la ley cuando eres protegido?", esa es la respuesta que te da el gobierno cuando los Deltas como SeoHoon intentan apelar la sentencia de un juez que lo condenó a la terapia intensa, hasta ahora nadie logro revocar el castigo.

—si me presento ante un doctor con estás heridas de bala y le digo que trataste de matarme, el estará obligado a decir todo esto al gobierno y dado que ya tuviste un castigo antes, está vez no será solo una semana—sonrei barriendolo con la mirada.

Para asegurar una buena descendencia del género Delta, el gobierno realiza exámenes médicos a las parejas, esto es para prevenir defectos genéticos que puedan tener los hijos, también es para saber el número de hijos que podra resistir el cuerpo de la persona que dará a luz.

Estúpido gobierno.

—si lo haces, yo les diré lo que realmente ocurrió el día de la fiesta—dio una sonrisa como si hubiese conseguido la victoria.

—recuerda que tú mentiste a la policía—rei—fácilmente podría declarar que no tuve nada que ver y ellos me creerían, diría que tú intentas culparme de un crimen que no hize para librarte de tu sentencia.

Dado que SeoHoon declaró que vio con sus propios ojos como el asesino huyó a otra parte y yo solo trataba de ayudarlo, si trata de cambiar sus palabras no solo perdería credibilidad, también le darían otro castigo.

Solo se hundiria más.

—¿crees que me quedaré quieto?—se acercó bastante agresivo hacia mi—¿crees que te dejare vivo?

—es posible que no salga vivo—di unos pasos hacia el mostrando la confianza que me caracteriza—pero se que tu no saldrás ileso si matas a tu pareja oficial. Piensa en los beneficios.

—Explicalo antes de que te corte la lengua y diga que fue un accidente—su mano formó un puño.

¿quieres golpearme?

—se que no quieres perder tu libertad—dezlize mis manos hacia su cuello—¿no sería mejor tener un matrimonio en dónde ambos tengamos una vida separada en privado y en público seamos una pareja feliz?

Solo acepta, idiota.

—no—agarro mis manos—te lo diré desde ahora para que entiendas—apreto mis muñecas—no me gusta compartir lo que es mío.

—pero yo nunca fui tuyo—sonrei.

No tuve tiempo de reaccionar antes de que me lanzará al piso con demasiada fuerza, se subió encima mío agarrando mis brazos, los coloco detrás mío inmovilizandome.

—¿sabes lo que pensaba en ese cuarto?—se acercó a mi oido—pensaba en las posiciones en las que te humillaria mientras tenías mi polla en tu agujero.

—¿pensabas en violarme?—pregunte sabiendo la respuesta.

—asi es—presiono mi cabeza contra el suelo—despues de todo, este cuerpo me pertenecera, ¿no es así, cariño?

—maldito lunático—me estremecí.

—tu lo dijiste, somos pareja—se acercó a mi cuello peligrosamente—pensaré en lo que dijiste, después de todo, tengo que escuchar a mi futuro esposo, ¿no?.

—exacto, escucha a tu futuro dueño.