Desde hace mil años, una guerra silenciosa consume los reinos: las Bestias, criaturas feroces que prosperan en la oscuridad, buscan venganza contra las Hadas, cuya diosa, Madre Naturaleza, se atrevió a castigar a su propio dios, Némesis.
Esta guerra oculta una verdad mucho más profunda que la simple rivalidad.
Arthur, un lobo alfa nómada, ha viajado por años, prefiriendo la soledad y los placeres sin compromiso a la idea de una pareja destinada.
En el Reino de las Hadas,Titania creció en una cuna de oro que se convirtió en una sofocante prisión.
Una guerra que se desató hace mil años ha sobrevivido porque la verdad sobre su origen fue silenciada.
Cuando la inocencia se encuentra con la oscuridad, la línea entre el deseo y la destrucción se desdibujo.
Arthur y Titania están en el centro de un torbellino de intriga, magia y una atracción tan intensa que podría ser su perdición.
Libro final del Mundo de Reina Luna 🌙
NovelToon tiene autorización de Valeria Romero para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
El depredador más lento
Oswaldo y Liam recibieron el informe de Arthur, el ataque de la bestias podría ser lo el inicio, así que debían prepararse para un ataque directo a la capital.
Liam empezó a dar sus órdenes movilizando a los guerreros del rey para asegurar el perímetro, además estaba el hecho que habían reconocido a Titania como un hada, pero su verdadero objetivo es Áine.
Oswaldo y Liam habían recibido el informe de Arthur. El ataque de las bestias en el bosque era una señal clara. D
— Debemos aumentas la seguridad de la Reina - Ordeno Oswaldo con seriedad
—Su caballero se ha negado rotundamente — Contesto Liam pesadamente.
Oswaldo asintió, entendía al caballero hada, pero simplemente no podía dejar a las hadas desprotegidas, ellas eran invitadas de su rey y eran prioridad en esos momentos
— Que Arthur, permanezca cerca de ellas, el caballero hada debe entender que la princesa y la Reina son las invitadas de nuestro rey y su seguridad es un asunto importante para nosotros - Varek entró interrumpiendo, ya había sido informado a detalle de lo que estaba sucediendo y su deber era resolver el problema.
—Como ordene —dijo Liam con sumo respeto.
****************
Xander caminaba de un lado a otro en la recamara de Áine, la manera en que encontró a Titania no le agrado para nada, pero lo que más le inquieto era ese lobo, esa descarada mirada que le dirigió, podía verlo a simple vista, era un desafío.
—¿Cómo ha permitido que Titania ande sola? —inquirió con cierta molestia, aunque tratando de contenerse.
Áine se encogió de hombros despreocupada.
—Majestad, si algo le pasa a Titania, la vida de usted estará en peligro —Xander se acercó a ella, tratando de hacerla entender
—Pero no le paso nada, el Alfa la protegió—respondió Áine con ligereza.
—Da igual, con mi llegada ahora me encargare de la protección — Dijo Xander con autoridad.
—Por supuesto, así será — Sonrió Áine en aceptación
La puerta se abrió y entro Titania ya cambiada, lleva una bandeja con los medicamentos de Áine
Xander la escaneó con la vista, había algo extraño en ella, que no podía comprender de que se trataba, sin importarle seguía devorándola con la mirada, admirando cada curva de ella que a pesar de aquel vestido lograban resaltar perfectamente, pero esa sensación de que algo había cambiado en ella seguía mortificándolo, quería saber lo que era y solo ella se lo podía decir.
—Está noche descansa bien, mañana continuaras con tu recorrido en la capital del Sur —dijo Áine, después de tomar sus medicamentos
—¿Qué? —preguntó Xander con seriedad y molestia a la vez
Titania mantenía su mirada en los frascos vacíos, ella no quería estar cerca de Arthur, sentía que flaquearía y terminaría cediendo a su sucio juego de dominación.
—Dado a mi cuerpo frágil y débil, Titania esta conociendo la ciudad por mí, con su informe, tomare la decisión sobre la alianza que ofrece el País del Sur. r —respondió Áine con su sonrisa cálida.
—Ya no más, después de lo sucedido el día de hoy, lo mejor es regresar al Reino de las hadas— Hablo Xander con autoridad, como si el fuera el Rey.
—Ya estás aquí ¿No? Con tu protección es suficiente, así que no regresaremos aún —dijo Áine ante las palabras de Xander, mostrando autoridad en su voz.
Xander a su pesar asintió ante la decisión de su reina, no podría ir contra de su decisión ya que simplemente sería una traición de su parte.
Titania, sin siquiera decir nada, salió de la recamara y se dirigió a la suya. Al llegar cerró la puerta con seguro, se giró y casi deja caer los frascos que llevaba en su manos, Arthur estaba recostado en la cama devorándola con aquellos ojos oscuros, para ser un perro asqueroso que solo quería dominarla y quebrarla, era jodidamente sexy, haciendo que su cuerpo la traicionara.
era que la intensidad de esa amenaza animal hacía que su propio cuerpo la traicionara: era jodidamente sexy.
—¿Qué hace aquí? —preguntó Titania forzando a mantenerse calmada ante la presencia de aquel sexy alfa.
—Solo vine a cobrar mi recompensa, por haberla salvado —respondió Arthur sin perder de vista a la princesa hada.
Titania suspiro con pesadez, le dirigió nuevamente la mirada, mostrándose fría y sin emoción alguna.
— Si lo que quiere es dinero, entonces vaya con la Reina Áine, haber si ella se lo entrega —respondió fríamente.
Arthur asintió con una leve sonrisa, el dinero era esencial, pero ya recibía una suma muy importante por parte del rey de Reyes del Sur, por encargarse de su protección. Además, él quería otra recompensa mucho más interesante y jugosa, quería a la princesa hada. Someterla bajo su dominio.
Arthur se levanto de la cama con tranquilidad,
— Mi recompensa es usted y no la princesa hada, sino esa hambre que desea sentirme dentro tantas veces sea posible — Dijo con una sonrisa depredadora.
— Mejor váyase —siseó ella, apretando levemente los frascos que tenía aun en sus manos.
Arthur soltó una carcajada, se acercó a ella más, acortando la distancia entre ellos. Titania tiró los frascos sin poder evitarlo.
— ¿Quién es el amo aquí, hada? — Preguntó en un bajo susurro.
Ya la tenia acorralada con la pared, ese alfa era posesivo y no dejaría que ella se negara ante sus deseos
Titania sentía el aliento caliente de Arthur sobre ella, le costaba respirar y sentía como su cuerpo se tensaba, ella estaba siendo sometida en contra de su voluntad.
Sentía como su cuerpo reaccionaba, el calor recorría cada parte de su ser, sobre todo en aquella zona que ansiaba por sentir las caricias de ese alfa sexy.
Arthur agrando su sonrisa descarada llena de orgullo al notar lo que provocaba en la princesa
— Descuide, hoy solo vine a decirle que es mi recompensa, mañana vendré a cobrarla, ¿Quedo claro? - Acerco su rostro más a el de ella.
Titania se sentía tan desesperada, se odiaba por caer así ante ese hombre, odiaba que su cuerpo reaccionara con su sola presencia, pero, si iba a caer en ese sucio juego, sería por decisión propia y no por órdenes del alfa nómada.
Arthur quería cazarla, pero Titania ya había tomado una decisión, ella también podía jugar a ese estúpido juego. El sexy alfa quería dominarla, así que ella se aseguraría de ser un depredador lento, el más lento que pudiera existir y entonces en lugar de ser cazada, ella terminaría cazando a Arthur.
Alzo sus manos colocándolas sobre el rostro de Arthur y lo atrajo a ella para unir sus labios en un ardiente y desesperado beso. El inicio de su juego.
Arthur se sorprendió ante el acto de la princesa, pero solo le llevó unos segundos en reaccionar y tomar el control en aquel beso, haciéndolo salvaje y posesivo.
Sus labios devoraban los de Titania con un hambre devastadora, no dejaba siquiera que ella tomara aire, su lengua se adentró en su boca recorriendo cada rincón de manera posesiva.
La sujeto con una mano de su nuca, mientras que la otra se aferro a su cintura, presionándola contra él, para que sintiera como crecía su excitación.
Titania aferraba sus manos en el sedoso cabello de él, haciendo el beso más posesivo y húmedo, no entendía por que ese alfa la hacía reacciona de tal manera, a pesar de que no podía sacar de su mente lo que había visto en la tienda con aquella mujer, eso le provocaba un profundo asco, sin embargo, sentía tantos deseos de sentir las caricias de Arthur, sus besos estaban volviéndola loca, hasta el punto de querer ser follada por él
Arthur la levanto de la cintura, sin romper aquel salvaje y hambriento beso, ella enrollo sus piernas alrededor de su cadera.
Y entonces, en ese posesivo encuentro, la alarma de ataque sonó
Arthur detuvo bruscamente el beso, aun con el cuerpo de Titania aferrado de él, se puso tensó, su rostro recobro la compostura, ante el ataque que estaba sufriendo la capital en esos momentos.
Titania agitada y aun sin poder reaccionar ante lo que pasaba, miraba a Arthur y su olor era embriagante.
Arthur sintió el aroma de la sangre en el aire y la presencia de las bestias atacando, aunque eso no era lo que lo inquietaba, había algo más, algo diferente a esas bestias, un ser totalmente diferente, poderoso.
—Mierda —siseó Arthur furioso, ante esa presencia, que sabía que podría llegar a ser un enemigo peligroso.
****************
Xander ya se encontraba en la recamará de Áien, su deber era protegerla de cualquier amenza, la reina hada era su prioridad, si, pero en su mente también estaba Titania, ella estaba en otra recamará, sola.
—Debemos ir por Titania —interrumpió Áine con autoridad en su voz
—Majestad, su seguridad es primordial —respondió Xander a su pesar.
Áine negó ante la respuesta de Xander, no permitiría que él siguiera deciendo.
— Ella es mi hermana y la princesa Hada —dijo Áine con firmeza, sabía que Xander no se negaría ante su petición.
Xander asintió, tenía obedecer las ordenes de la Reina, tomo la mano de Áine y salieron de la recamara dirigiéndose a la de Titania.
Pero en el camino se encontraron con ella, para su sorpresa no estaba sola, el Alfa nómada iba a su lado.
Arthur sostenía a Titania del brazo de manera posesiva, sus dedos se marcaban en su suave piel.
Titania tenía el cabello desordenado y sus labios estaban hinchados y rojos por el salvaje y posesivo beso que se había dado con el alfa en la recamara hace solo unos momentos
El ambiente se sentía pesado en aquel pasillo.
Xander hervía de furia, de odio, su visión se teñía de rojo, ese alfa, ese perro que aferraba a Titania a él, ¿Acaso se atrevió a tocarla? ¿A robar su pureza? ¿A Poseerla? Todo eso pasaba por la mente del caballero, mientras el odio lo cegaba.
Arthur le dedico una sonrisa descarada al Caballero hada ante su mirada llena de odio