De Extra A Villana

CAPÍTULO 15

Kristen se despierta en su habitación, sintiendo una confusión abrumadora. La luz del sol entra por la ventana, y se da cuenta de que ha pasado la noche en su cama. Sin embargo, la sensación de que algo extraño ha ocurrido la persigue. Se levanta rápidamente, buscando respuestas sobre el misterioso encuentro de la noche anterior.

—Kristen: ¿Qué fue lo que pasó?

Mientras se prepara para el día, su mente repasa los eventos. La figura en el balcón, el intento de descubrir su identidad, y luego… la oscuridad. Se siente frustrada por no haber podido ver el rostro del desconocido, pero una parte de ella sabe que no puede dejar que esto la consuma.

Baja a la sala común donde se reúnen sus amigos. Al entrar, nota que todos parecen preocupados.

—Adara: ¡Kristen! ¡Estábamos buscando!

—Kristen: ¿Qué pasa?

—Kyan: Te vimos anoche en el balcón. Parece estar hablando con alguien.

—Kristen: No era exactamente una conversación. Intenté acercarme a una figura, pero…

—Luz: ¿Pero qué?

—Kristen: Me durmió antes de que pudiera descubrir quién era.

El grupo se queda en silencio, procesando la información.

—Kyran: Eso suena peligroso. Tal vez deberías tener más cuidado.

—Kristen: Lo sé, pero tengo la sensación de que está relacionado con mi investigación. No puedo dejarlo pasar.

—Liz: ¿Y si te vigilamos? Podríamos girarnos para asegurarnos de que estés a salvo.

Kristen asiente, agradecida por el apoyo de sus amigos.

—Kristen: Eso podría funcionar. Pero también necesito seguir investigando. No puedo quedarme de brazos cruzados.

Después de un desayuno rápido, se dirigirán a sus clases. La mente de Kristen sigue ocupada con el misterioso desconocido y su advertencia. ¿Quién era? ¿Qué quería de ella?

Las clases avanzan, pero Kristen apenas puede concentrarse. La historia, los idiomas, todo se siente distante. Al final del día, se reúne con Adara y Luz en el jardín.

—Adara: ¿Has pensado en lo que haremos?

—Kristen: Sí, creo que deberíamos investigar más sobre la figura. Tal vez haya alguna pista en la academia.

—Luz: ¿Y si preguntamos a los profesores? Ellos podrían saber algo.

—Kristen: Buena idea. Vamos a hacerlo.

Se dirige a la oficina del director, un hombre mayor con una reputación de ser sabio y perspicaz. Al llegar, tocan la puerta y son recibidos.

—Director: ¿Qué puedo hacer por ustedes, chicas?

—Kristen: Señor, hemos notado algo extraño en la academia. Creemos que hay alguien que nos está vigilando.

El director frunce el ceño, mostrando preocupación.

—Director: Vigilancia, dice. Eso no es algo que se debía tomar a la ligera. ¿Tienen alguna descripción?

—Adara: No, solo tenemos sentido que hay alguien observándonos.

—Director: Entiendo. Mantengan los ojos abiertos y, si ven algo sospechoso, avísenme de inmediato.

Las chicas asienten, sintiendo que han hecho lo correcto al compartir sus inquietudes.

Al salir de la oficina, Kristen siente que la presión aumenta. La sensación de que algo grande se avecina la persigue.

—Kristen: Necesitamos ser más astutas. No podemos dejar que nos atrapen desprevenidas.

—Luz: ¿Y si hacemos un plan de vigilancia? Podríamos dividirnos en grupos y cubrir más terreno.

—Adara: Me gusta la idea. Así podremos estar más seguros.

Con el plan en marcha, las chicas se dispersan, cada una tomando un rol en la vigilancia. Kristen se siente más segura al tener a sus amigas a su lado, pero la inquietud sobre el desconocido no desaparece.

Esa noche, mientras se prepara para dormir, escucha un susurro en el aire. Se asoma por la ventana, pero no ve nada. Sin embargo, la sensación de ser observada regresa, más intensa que nunca.

—Kristen: No puedo dejar que esto me asuste. Debo enfrentar lo que sea que esté sucediendo.

Con determinación, se acurruca en su cama, lista para afrontar el nuevo día. Pero en su mente, la advertencia del desconocido resuena: "No puedes verme, al menos no todavía".

La noche avanza, y Kristen se sumerge en un sueño inquieto, sin saber que el peligro se cierra más cerca de lo que imagina.