A PURO DOLOR

_ Y bien dime que es lo que quiero a cambio de esos documentos _ le dije a Francisco.

_ Te quiero a ti Fernanda _ me dijo y me reí de el.

_ Muy buen chiste _ le dije y puse seria.

_ No es ningún chiste Fernanda, quiero que vengas a vivir conmigo acá, y también que trabajes conmigo.

_ Estas completamente loco si piensas que voy a acceder a tu chantaje _ le escupí con rabia, como se atreve a pedirme eso.

_ Piénsalo Fernanda, por tu orgullo vas a dejar que Fátima enfrente su embarazo y crie a su hijo sola _ volvió a decirme, de verdad no puedo creer el descaro de este hombre.

_ Que es lo pretendes pidiendo eso, no te basto con todo lo que ya hiciste, quieres seguir arruinándome la vida _ le grite y el muy maldito se mantenía muy sereno.

_ No claro que no, de hecho mis intenciones son muy distintas, quiero recuperarte Fernanda, quiero volver a ganarme tu confianza _ me dijo y volví a reírme pero mas fuerte.

_ Estas perdiendo tu tiempo, si me voy a venir a vivir contigo y si quieres también voy a trabajar, pero prepárate, porque de la misma forma en la que tu hiciste que toda mi vida fuera solamente de puro dolor así también are con la tuya _ le dije levantándome de la silla.

_ Estoy dispuesto a soportar lo que sea con tal de tener otra vez tu confianza y porque no tu amor Fernanda.

_ Ya cállate, no quiero seguir escuchándote _ le dije y Salí de su oficina.

El vino detrás mi y cuando estuvimos en la sala, le entrego al abogado otro sobre que era los papeles originales.

_ Camilo acompaña a mi esposa, y ayúdala a traer sus cosas hoy mismo se mudara con nosotros _ le dijo al muchacho y todos los que estaban hay se sorprendieron bastante, el abogado me miro confundido, jamás se imagino que yo era la esposa de Francisco y ni que decir la cara de Carina, y la frívola rubia parecía que iba a explotar, otro dolor de cabeza que tengo que aguantarme estando en esta casa.

_ Si señor ahora mismo _ le respondió el tal Camilo y salió detrás de mi al igual que Carina y el abogado.

_ Señorita Fernanda _ me hablo el abogado y me detuve para hablar con el.

_ Dime abogado.

_ Mañana mismo voy a presentar estos documentos, y si todo esta en su lugar en tres días a mas tardar su hermano ya va a salir de prisión..

_ Esta bien abogado usted haga lo que tenga que hacer, lo único que importa es que mi hermano quede en libertad _ le dije y el solo asintió.

_ Señorita Fernanda, si tiene algún problema, no dude en decírmelo _ me dijo el abogado porque yo ya estoy al borde de las lagrimas.

_ si su preocupación es acerca de lo que dijo Francisco , estoy casada con el hace dos años _ le dije y solté un gran suspiro _ no se preocupe abogado, si bien no me llevo muy bien con mi esposo, en estos momentos necesito de el _ le dije y el volvió a sentir.

_ Entiendo señorita, pero ya sabe que puede contar conmigo para lo que sea _ me dijo y esta vez fui yo ña que asentí.

Luego de eso entre en el coche en el que estaba como chofer el tal Camilo, y Carina también se subió conmigo.

Cuando llegamos a casa entre rápidamente seguida de Carina.

_ Me vas a decir que paso _ me pregunto ella mientras yo estaba sacando la maleta para cargarla.

_ Francisco tiene los documentos que demuestran la inocencia de Claudio me las dio y a cambio de eso tengo que vivir con el.

_ Que ese tipo se volvió loco, ahora pretende ser un buen marido _ me dijo ella y yo solo negué.

_ No se cuales son sus verdaderas intenciones Cari, pero mi hermano necesita su libertad, y mucho mas ahora que Fátima esta embarazada.

_ Amiga y esta casa, es tu casa, tanto ya luchaste para tenerlo así como esta ahora _ volvió a decirme ella con tristeza.

_ Tu te vas a quedar, no tengo otra opción Cari, no me quiero ir, además es una ventaja para ti, puedes ir a visitarme cuando quieras y ver a tu príncipe _ le dije y ella sonrió un poco.

_ Te voy a extrañar muchísimo amiga _ me dijo abrazándome.

_ Esta casa no será igual sin ti.

_ Lo siento Cari _ le dije y después me ayudo a empacar toda mis cosas.

_ Creo que es todo, si después me hace falta algo, lo vendré a buscar nada mas _ le dije y ella solo asintió.

Cuando salimos de la habitación hay estaba Camilo me ayudo con mis maletas, me despedí de Carina y luego de algunos minutos ya estábamos en la casa que antes era luego mi casa.

Cuando entramos yo no traía nada Camilo me dijo que se encargaría.

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