Amor O Dinero

Maryan despertó aquella mañana con miedo, había soñado mucha agua de color transparente, era tan clara que se podía ver al otro lado. Eran lágrimas iba a llorar muchísimo. Su madre le había enseñado que cuando eso se sonaba era Seguro lágrimas y siempre había salido todo verídico. Cuando fallecio su papá, su abuelita materna, abuela paterna, sus hermanos en fin siempre resultaba cierto. Lloro un río cuando murió su madre, y sabía que ese río continuaba corriendo sus aguas, porque ella lloraba diariamente aún por ese motivo.

Tenía miedo, un miedo terrible pero debía salir y continuar su vida. En el trabajo la esperaban los problemas de siempre, y ya eran las diez y aún nada malo sucedió. De pronto miro que su hermano la llamaba. Contesto.

Maryan: hola hermano dime.

Carlos: hola, necesito hablar con vos. Ahora te espero en la calle frente al restaurante de la Margoth. Adiós.

Maryan: bueno dijo y quedó con la incertidumbre de que sería lo que paso. Estába enojado eso se notaba por la forma hosca que le hablo.

Maryan llegó al lugar donde era el encuentro y miro a Carlos subido en su moto. Mientras saludaba a algunos conductores amigos suyos.

Se acercó y saludo a unos y otros amablemente.

Carlos con cara de enojo y rabia, volteo y le dijo de manera ruda: subi rápido. vamos.

Maryan le obedecio y subió. Salieron en la moto, como si estuvieran siendo perseguidos por la policia. En silencio total.

Ella no dudo en cogerse de el para no salir volando del asiento y así de mala gana el se dejó tomar por la cintura.

Llegaron a casa de él,.allí estaba esperandolos su sobrina y su cuñada. Junto a las sobrinas adoradas de esta última. Todas eran unas arpías. Algo iba muy mal. Pero pronto descubriria que tanto.

Bajaron de la moto y Carlos. Entro empujando a unas y otras. Que estaban estorbando el paso paradas en la puerta.

Maryan saludo y nadie le respondio. Simplemente su sobrina le contesto con un seco hola. Las arpías entraron a la casa y Carlos le gritó que entre. Maryan obedeció sabiendo lo que se avecinaba. Ya conocía la maldad de lo que eran capaces.

Carlos: ve, que vos estás diciendo que yo ando con una vieja del terminal y que yo le doy de todo a todo. Que además vos con ella si te tratas bien,.que porque es educada como vos que además es delgada y bien arreglada. Que a ella si la quieres y respetas.

En eso intervino su cuñada, una mujer gorda, mal encarada y vil. Tenía no más de treinta años pero parecía tener muchos más, siempre desarreglada, de cabello negro largo y grueso. Jamás había dejado su gusto por las largas trenzas y.menos aún por fumar. Se llamaba Lisa Saldarriaga Ibáñez. No era más que la hija menor, de una de las familias más asquerosas de san Juan, violadores, asesinos, secuestradores y así un dechado de maldades tenían en su aber. Pero tenían lo que todos deseaban y mi hermano eso lo enamoro, dinero mal ávido. De modo que se casó con ella, enfrentando a Dios y al diablo. Tuvieron una sola hija, Catalina una joven igual física y mentalmente a su madre, tenía 20 años, había crecido con el veneno y la amargura de está, de modo que la envidia, la pereza y la desidia la acompañan.como adorno personal y todos los sabían. Ya era madre de un bebe de solo unos meses,.siempre estuvo con un hombre y otro,.nunca le.funciono nada hasta que de pronto salió embarazada de un hombre treinta años mayor que ella. Que la dejo sola con el niño. Pero aún así seguía de fiesta en fiesta y de mano en mano. No trabajaba en nada y menos aun quizo estudiar. Fue la cruz de mi hermano. Porque también era irrespetuosa con el y con las mamá por igual.

Las sobrinas de mi cuñada eran dos mujeres,.con menos de veinte años, con hijos de diferentes hombres, amargadas a más no poder y llenas de maldad que ya no podían con ella. Una era Dayana y la otra Liliana. Siempre espiando y metiendo chismes por doquier. Nunca se perdían una fiesta o una pelea. Tomaban igual que hombres y peleaban así mismo. Muchas veces se escuchaba decir que ellas habían matado a sus maridos,.porque por cierto ellas eran viudas. Tenían dinero gracias a eso. Siempre vestían ropa cara pero vulgar, siempre mostraban demás y nunca dejaba sus joyas en oro, que presumian a todo el mundo. Esa era la carta de presentación de toda esa familia, el dinero, mostrarlo a diestra y siniestra. Por eso todas y todos eran enchapados en oro. Lisa era la que menos tenía, debido al odio y desprecio que le tenían el resto de familia, por ser la hija ilegítima de su padre. Por eso había recibido menos herencia y estaba relegada a ser la sirvienta de todos sus medios hermanos y hermanas mayores. Su padre la había llevado a vivir con el después que mataron a su madre y a ella la violaron, dejando la casi muerta unos ladrones.

Lisa: si, vos que estás contenta con la amante de tu hermano asqueroso. Todavía que es tu amiga,.seguro una prostituta como vos, que se hace la mosca muerta. Sabiendo que tú hermano es casado por la iglesia conmigo estas de ayudante con la amante. Maldita nunca voy a perdonarte que vinieras a dañar mi hogar. Pero si crees que vos y la vieja desgraciada esa van a salirse contentas, te equivocas primero las mato a las dos. Para eso tengo dinero y puedo mandar a alguno a hacerlas pedazos o que les de un tiro y las mandé al río.

Maryan que ya había conocido todas estas bajezas, porque en más de una ocasión sus padres fueron objeto de humillaciones, maltratos fisicos y verbales. Aparte de amenazas por parte de los consuegros y demás familiares de esa mujer. Simplemente trataba de dominar su ira.

De pronto sintió un calor y el ardor de su mejilla. Era un golpe. Esa mujer le había dado un golpe. Mientras continúaba diciendole toda clase de improperios. Maryan no pudo soportar más y respondió ferozmente.

Maryan: Jamás en tu vida vuelvas a tocarme. Ya no soy la niña que se dejana maltratar de ti, voy a responder de la misma manera y peor desgraciada. Si he sido hipócrita tratando de disimular el profundo odio y desprecio que siento por ti y toda la recua de familia que tienes a Sido por mi hermano. Pero eso se acabó. Carlos la interrumpió y dijo enojado:

Carlos: cállate mejor, siempre haz sido una idiota. Envidia siempre haz tenido por eso Lisa ella inventa estás mierdas de mi. Mirala no es más que una tonta. Me arrepiento de haberla traído aqui. Ahora mismo voy a ir a hablar con el húmedo y le digo que deje de ser el codeudor de ella. Y así la hechan como a perro y se larga a San Juan. Luego se acercó a su esposa y le dijo arrodillandose frente a ella : yo jamás te engañaria, menos con una amiga de esta idiota. Perdóname por favor.

Lisa: hablo con desprecio y enojo : Carlos tu siempre dices lo mismo, pero está vez es diferente porque esa vieja me envió fotos y chats contigo. Mira todo lo que tengo aquí. Le mostró su celular.

Catalina: si papá. Ahora estás jodido porque esa vieja te descubrió delante de todos y además dice que está embarazada. Eso jamás te lo vamos a perdonar. Y agrego con tono de burla: Tener de amante a una mesera, una simple manteca que asco.

Carlos: tu cállate. Esto es entre tu mamá y yo. Esa vieja miente y lo voy a demostrar. Además todo esto simplemente es un truco organizado por esta idiota de mi hermana que no puede soportar que estemos bien. Seguro lo invento ella. Camino donde estaba su hermana, secandose unas lágrimas y le dijo con fiereza: diles maldita tonta que todo lo organízaste tu, que yo no tengo a ninguna vieja embarazada. Y la comenzó a rempujar contra la pared, luego apretó sus brazos, la agarro de uno de ellos y la llevo arrastrando donde estába su esposa, diciendole a gritos: dile idiota. Que fuiste tu. Maldita tonta habla. Así como lo hiciste hace un rato. Mírala. Cogió su rostro con su mano derecha y volvió a repetir - mírala estúpida.

Maryan no soporto más la ira y el dolor y exploto contra el y dijo: no sos más que un cobarde, marica desgraciado, jamás pudiste lograr nada por ti,.siempre tuviste que manipular, engañar y robar, lo hiciste hasta con tu sangre,.no te importo dejar morir de hambre a tus papas quienes te dieron todo, hicieron lo que quisiste y luego los votaste como basura. Las lágrimas caian por su rostro, cada vez más pero aún así continuo, eran tantos años guardando su dolor, su rabia y sobre todo el desprecio que hoy se acrecentaba más. Maryan continuo: a mi me importa cero tu vida, estes con quien estés. Aprende a afrontar las consecuencias de tus actos. Se hombre por primera vez y para la próxima, monton de basura estaré preparada mejor. Y se colocó frente a Lisa. Y en cuanto a vos desgraciada. Recuerda que nunca olvidare todas y cada una de las cosas que le hiciste a mi familia. Y que un día me las pagarás tu y los tuyos. No te devuelvo el golpe porque no quiero ensuciarme las manos, yo no solo te golpearía sino que te mato aquí mismo. Camino luego donde estaban el resto de arpias y mirandolas con desprecio,.las escupió y salió de ahí. Su hermano quiso detenerla pero ella lo empujó con todas sus fuerzas y le lanzó una llave que había en un carro parqueado afuera. Les escucho gritarle más asquerosidades pero ya no le importaba nada.

Puso la mano a un taxi que pasaba milagrosamente en ese momento y subió. Se sentó y logro decirle a dónde iba antes de coger su rostro entre sus manos y llorar desconsoladamente. Cómo había podido ser capaz ese que creía su sangre, capaz de acorrarla traicionarla con tal de quedar el limpio de culpa, utilizarla de chivo expiatorio. Ser tan maldito se dijo. Ella pensaba que después de los años que habían pasado lejos el había cambiado, volveria a ser el hermano dulce y bueno de la infancia. Pero no. De ese niño ya no quedaba nada. Recordó la promesa a su mamá, el que había hecho cuando ella estaba en su féretro. Que sería más fuerte que ella y que nadie la destruiría. Saco fuerzas y seco sus lágrimas. Tenía que continuar. Pago y se bajo del taxi, entro al baño del terminal, lavo su cara, se maquillo con los pocos cosméticos que tenía a mano y paso a la bodega debía atender una fila enorme de gente que tenía esperando.

Así paso ese día, fue una larga tarde y para su mala suerte o buena dependía como se viera. Tuvo mucha clientela. Había querido contarle a alguien su dolor pero Ximena no estaba de turno y a los demás les tenía poca confianza. Así que guardo su dolor hasta la noche. Rodolfo siempre la escuchaba y consolaba. Apenas llegué a su casa hablaría con él.

Llegó a su habitación y cogió su teléfono. Marco a Rodolfo y no contestaba debía estar aún en el trabajo penso. Llamaría después de un momento. Paso a la pequeña cocina hecha de tablas viejas y desgastadas e hizo un café. Eso necesitaba para seguir.

Volvió a marcar a Rodolfo y al fin le contesto.

Maryan: hola amor necesito que me escuches, necesito contarte muchas cosas y comenzó a llorar.

Rodolfo: hola y que paso dime. Que te hicieron. Holaaaaa... Hablame por favor dijo en tono preocupado.

Maryan le contó todo con detalle esperaba su apoyo y comprensión.

Rodolfo: ya entiendo, pues eso ya era visto el nunca a sido bueno contigo y menos esa gente familia de él. Deja ese trabajo y regresa, acá te necesito más que antes. Mi mamá está enferma y pues a mi me salió un trabajo fuera del país de modo que en unos días me voy. Mis hermanos y hermanas no pueden cuidar de mi mamá y pues mi papá ya sabes es un viejo también enfermo. Aquí nada te faltará. Que me dices.

Maryan: debo pensarlo. Mañana te dare una respuesta. Gracias por escuchar. Bye me voy a descansar.

Rodolfo: bueno al menos estás más tranquila. Te cuidas. Que descanses. Besos. Colgó

Maryan no sabía que sentir y pensar. Regresar a san Juan. Debía hacerlo. Tenía demasiado dolor de cabeza en ese momento para pensar. Cogió la pastilla que tenía previamente lista en la mesita de noche y se la llevó a la boca junto con un vaso de agua. Necesitaba descansar. Se recostó en su cama y cayó rendida en un reconfortante y largo sueño.