Prisionera De Mis Elecciones

Mientras tanto en el quirófano, Luana intenta mantenerse despierta, un sueño desmesurado intenta tomar el control de la situación, Noah le acarició el rostro y le dijo:

—Oye, necesitas mantenerte despierto, pronto nacerá nuestro hijo y creo que estará llorando como yo y entonces solo tú podrás hacer que nuestro pequeño deje de llorar, dijo Noah, haciendo que Luana mostrara una pequeña sonrisa. pero ella no dijo nada, tal vez le faltaron fuerzas para hacerlo.

Debido a que su presión arterial estaba tan alta, Luana necesitaba muchos cuidados, una enfermera la mantenía controlándola todo el tiempo y siempre suspiraba cuando veía que todavía estaba alta, al darse cuenta de esto casi hizo que el corazón de Noah se detuviera, se sentía culpable.

Pensando en esto, Noah besó la frente de Luana y como si fuera un niño indefenso, colocó su cabeza contra la de ella y comenzó a cantar una canción tranquila, Oceans, de Hilsong United, además de llevar un mensaje positivo de fe y esperanza. Oceans tiene una melodía agradable que calma el alma.

Muy conmovida por la actitud de aquel hombre, incluso la enfermera no pudo evitar llorar, de hecho, todos los que presenciaron esa escena pensaron que había un gran amor entre esa pareja, capaz de aliviar ese extraño sentimiento, ¿será la cercanía de la muerte? Se preguntó Luana mientras intentaba mantenerse despierta.

Mientras Luana disfrutaba de la música e incluso cantaba suavemente, Noah continuó, en ese momento sus voces bajas fueron abrumadas por el fuerte llanto de un bebé y en ese momento Luana lloró, nació su hijo.

—Bienvenido hijo mío, te amaré por siempre-dijo casi en un susurro, antes de que Noah pudiera decir lo feliz que estaba con el nacimiento de Yago, algunos dispositivos comenzaron a pitar exageradamente, en ese momento había un ajetreo en el quirófano, que casi Hizo que el corazón de Noah dejara de latir, ni siquiera tuvo tiempo de mirar el rostro de su hijo.

—Sáquenlo de aquí ya- gritó en agonía el médico mientras agarraba un desfibrilador cardíaco, Luana acababa de sufrir un paro cardiorrespiratorio, por lo que aquel quirófano estaba en un caos, además de ser una vida, para todos los efectos, estaba el futura nuera del matrimonio Salvatore, son ricos y poderosos, por lo que el médico tenía mucho miedo de fracasar.

Como si hubiera sido atropellado por un camión a toda velocidad, Noah se alejó lentamente, incluso trató de contener las lágrimas, pero fracasó estrepitosamente.

—Eso no estaba en mis planes, todo porque quería casarme con Sofía, Sofía Albuquerque, vete a la mierda con ese maldito amor-murmuró para sí mismo mientras mostraba una sonrisa amarga, se equivocó, se equivocó al irse. Luana sola, a merced de la propia suerte.

Después de todo, Yago era un sueño hecho realidad, por otro lado Noah tendrá que cargar con él la culpa de la muerte de Luana, esta desafortunada joven que solo encontró sufrimiento, esto es tan triste, Noah se sentía culpable, pensó todo. Podría haber sido diferente si hubiera cuidado a Luana durante su embarazo.

Un tanto desconcertado, Noah caminó hasta la sala de espera y se sentó en silencio, Bryan fue el primero en notar la presencia de su hermano, se acercó y le dijo:

—Entonces, ¿cómo están?-Preguntó Bryan sonriendo, pero esta sonrisa se fue desvaneciendo poco a poco cuando Noah empezó a llorar.

—Yago está bien, pero Luana no…-no pudo decir nada más sobre el asunto y solo pudo romper a llorar, dando a entender que Luana realmente se había ido.

Al darse cuenta de esto, a Bryan le dolió mucho el corazón, sintió que acababa de perder a su gran amor, un amor prohibido, lloró mucho y se golpeó el pecho pidiéndole a Dios que le diera la fuerza para soportar ese dolor.

Emily y Jackson se abrazaron y tampoco pudieron ocultar su tristeza, por lo que las lágrimas corrieron por sus rostros.

Anny, por su parte, parpadeó instintivamente tratando de mantener la calma, le dolía mucho el corazón, pero en su cabeza, Luana había muerto por culpa de Noah y necesitaba conseguir justicia para su amiga, pensando de esa manera, Anny tomó le quitó una de sus sandalias y comenzó a golpear a Noah mientras le gritaba al mundo todo lo que tenía atascado en la garganta:

—Deja de llorar, fuiste tú quien planeó todo esto, ¿por qué no estás feliz? Sonríe Noah, tu mercancía nació sana, que maravilloso, ahora puedes seguir con tu vida, solo vete, pero no olvides no volver a buscarnos nunca más, eres una vergüenza para la familia Salvatore - dijo sin dejar de golpear Noah, por supuesto, ni siquiera le dolía, pero Noah pensó que merecía un castigo, así que permaneció en silencio y dejó que su hermana hiciera lo que ella creía que era correcto.

—Quédate tranquila hija mía, no hay culpables en esta historia, este era su destino, lo único que podemos hacer es conservar los buenos recuerdos y cuidar bien de Yago, lo siento mucho – dijo Emily mientras intentaba abrazar a Anny.

—Es un monstruo mami, Noah es un monstruo-dijo gimiendo y luego abrazó a Emily.

Jackson intentó aliviar la situación, pidiéndoles a sus hijos que mantuvieran la calma, pero Anny se separó del abrazo con su madre, tomó el celular de Luana, que estaba en su custodia, ingresó a la APP de mensajería y luego les mostró a todos el mensaje enviado por Noah.

“Estoy cansado de tus dramas, ya arreglé todo con el doctor, Yago viene hoy al mundo, finge que tiene dolores y se va al hospital central, le vamos a hacer una cesárea, compré. él, así que lo quiero en mis brazos hoy”.

Leer esas palabras y darse cuenta que el remitente era el Sr. Noah, causó un gran revuelo entre ellos, Jackson estaba muy triste por el comportamiento de su hijo, Emily estaba muy decepcionada, Bryan estaba tan enojado que no pudo contener su indignación y se fue a la violencia. .

Mientras Noah estaba sentado, Bryan lo agarró por la corbata, obligándolo a levantarse, luego le dio un puñetazo en la cara, atrayendo la atención de todos los que pasaban.

Noah se tambaleó y casi cayó, pero no se defendió, Emily lo miró con tanta tristeza que su corazón de repente se hundió en la amargura, seguramente Noah se arrepiente de haber hecho las cosas de una manera tan loca.