El Destino De Aria

Aria

La casa de papá es muy bonita, se encuentra en medio del bosque, es de dos plantas, por dentro sus colores son cálidos y tiene una chimenea, muy distinta a la casa de los Black, me quedo observando el lugar.

Albert - (sonriendo) ¿Te gusta?

Aria- (sonriendo) Siii, es hermosa.

Albert - Me alegra saberlo, tu madre fue quien decoró y eligió cada detalle para nuestro hogar.

Albert tomo un cuadro que estaba en la repisa que había sobre la chimenea y se lo mostró a Aria.

Albert - (Nostálgico) Está es la última foto que nos tomamos todos juntos, fue en tu cumpleaños número 3.

Aria tomo la foto y en ella se podía ver a su Padre quien tenía una enorme sonrisa, su madre se veía tan feliz, sus ojos verdes como las esmeraldas lo reflejaban, también estaba Aarón quien apenas era un niño 9 años, tenía manchas de pastel en el rostro y ahí estaba ella en el regazo de su madre, con su manitas manchadas de pastel se podía sentir la felicidad y el amor que transmitía esa foto.

Aarón - (nostálgico) recuerdo que ese día mientras nos preparamos para tomar la foto, pediste que yo te cargue, incliné para subirte, en ese momento aprovechaste para poner tus manitas sobre mi rostro y luego te echaste a reír por haber cometido tu travesura.

Albert - (melancólico) Te juro que te busqué por todos lados, pero jamás pude dar contigo ¿Dónde estabas mi niña?

Aria dejando la Foto en el mismo lugar de donde la tomo su padre y se apoyó sobre la chimenea - Estuve en Sunshine, hasta hace tres meses esa era mi prisión.

Albert - (exaltado) Ese fue el primer sitio a donde fui y hasta hablé con Markus para que me permita buscar en sus alrededores, pero jamás encontré nada sobre ti, incluso regrese en algunas ocasiones, pero siempre me dijo que no sabía nada.

Aria- Desconozco los motivos del porqué me escondieron, pero lo que si estoy segura es que no fueron por nada bueno, sobre todo por la forma en que viví ahí.

Aarón- ¿Qué quieres decir? ¿Qué te hicieron esos miserables?

Aria suspiró, tenía que decirle a su padre y su hermano, la verdad sobre el infierno que vivió estos 15 años, pero temía como reaccionarían al saberlo.

Albert - Mi niña por favor contesta la pregunta que te hizo tu hermano.

Aria comenzó con su relató mientras su mirada estaba perdida en el vacío, les contó todo el sufrimiento, maltrato que recibió en Sunshine el cual fue impartido por la Luna de esta manada, como le dijeron que era huérfana de madre, que su padre jamás la había querido e inclusive la había abandonado.

Aunque no derramó ninguna, lágrima está vez, aún se podía reflejar el dolor en su mirada.

Luego, les contó como llego dónde sus tíos, el ataque que sufrió que la dejo al borde de la muerte y como ellos la habían recibido y ayudado todo este tiempo.

También les habló sobre las sospechas de su tío Armand, sobre el atentado donde murió su madre y el ataque de los rogues hacia ella, estaban conectados y planeados por la misma persona.

Cuando terminó su relató, Aarón lanzo un golpe a la pared, dejando un gran hoyo donde había caído su puño para luego gritar.

Aarón (furioso) - ¡Voy a matar a esa maldita mujer y a ese Perro de Kiran! Te juro que los haré sufrir de tal manera, que me suplicaran morir.

Cómo se atrevieron a ponerte un dedo encima.

Aarón estaba a punto de salir, cuando la voz de Albert lo detuvo.

Albert - (Serio) Detente Aarón, no irás a ningún lado y menos a matar a nadie, por ahora.

Aarón - (ofuscado) ¿Qué? Te estás oyendo Padre, esos malditos se atrevieron a lastimar a mi hermana durante 15 años y me estás diciendo que no haga nada.

Albert - (Serio) Jamás he dicho que no pagarán por lo que le han hecho a mi niña, pero para poder saber toda la verdad los necesitamos vivos y además esa mujer, es la única que puede decirnos quien es la responsable de la muerte de tu Madre.

Créeme Hijo soy el primero que quiero ir a matarlos con mis propias manos por todo lo que le han hecho a Aria, pero tenemos que ser más inteligentes y actuar con astucia.

Aria- Aarón, papá tiene razón, debemos saber que sucedió realmente ese día y hoy después de la ceremonia esa mujer nos tendrá que dar las respuestas por las buenas o por las malas.

Aarón- (abrazando a su hermana) Lamento no haber estado para ti todos estos años y que hayas pasado, por tanto, pero juro que jamás permitiré que nadie te vuelva a poner un dedo encima, así me cueste la vida.

Aria- No digas eso, no fue tu culpa, la única responsable pronto pagará por todo lo que hemos sufrido.

Albert- Así será hijos míos.

Ahora debemos prepararnos para asistir a la ceremonia de la antorcha. Aria cariño, puedes subir a darte una ducha y cambiarte.

Aarón- Vamos pequeña, yo te llevó a tu habitación.

Ambos hermanos subieron a la segunda planta, dónde se podía ver cuatro habitaciones, Aarón le fue diciendo - está es la habitación de papá, está que vez aquí es la mía, está es la tuya pequeña y Aria preguntó curiosa a quien pertenecía la última habitación, a lo que su hermano respondió.

Aarón - Esa habitación es para Clarisa, cuando viene a visitarnos, papá le tomo mucho cariño, es una buena chica, muy dulce, gentil, pero es tímida y algo insegura.

Aunque Alexander es un excelente hermano, no ha podido suplir la ausencia de sus padres y eso, afecto mucho en la personalidad de Clarisa, ya tendrás tiempo para conocerla.

Al mencionar a Alexander una extraña sensación invadió a Aria, quería saber cómo era.

Aria- (nerviosa) ¿Y como es Alexander? Digo si es un buen Alfa y cosas como esas.

Aarón - Bueno ... Cómo te dije es un excelente hermano y como Alfa es el mejor, en los años que lleva ha logrado el apogeo de confederación, además siempre se preocupa por qué las razas estén en armonía y déjame decirte que la ha tenido difícil, cuando asumió como Rey Alfa apenas tenía 10 años y nadie confiaba en él, pero ha encargado de callarle la boca a todos.

Aria se encontraba impresionada con todo lo que Aarón le había contado sobre Alexander.

Aarón al verla interesada en su Amigo, le pregunto - ¿Por qué de pronto quieres saber sobre Alexander?

Aria - (Nerviosa) por nada en particular, solo quería saber cómo era el Rey Alfa al cual debo proteger eso es todo.

Luego para que su hermano no siguiera preguntando dijo - Será mejor que nos demos prisa o no llegaremos a tiempo a la ceremonia.

Al entrar a la habitación pudo ver qué estaba decorada para una chica de su edad y no solamente eso en el armario había ropa de su talla, por lo que volteo a mirar a su hermano.

Aarón -(nostálgico) Papá nunca perdió la esperanza de encontrarte y con el pasar de los años siempre cambiaba la decoración y la ropa para que cuando regresarás, pequeña.

Aria no pudo contener las lágrimas y sintió como su hermano tomo con delicadeza su mentón y con otra mano limpiaba sus lágrimas.

Aarón- (tono suave) Quiero que me prometas que no volverás a llorar, no soporto ver tristeza en tu mirada.

Aria - (sonriendo) Te lo prometo grandote.

Aarón - Grandote?

Aria- (sonriendo) Si, yo soy tu pequeña y tú serás mi grandote.

Aarón- (riendo) Me gusta! Pequeña.

Ahora date prisa que papá es un maniático de la puntualidad y da miedo cuando se enoja, después salió de la habitación de Aria.

Aria por su parte se quitó el vestido que traía y se metió a la ducha, después de un rato salió envuelta en la toalla, fue al armario había todo tipo de ropa y calzados, escogió un vestido azul noche de mangas abullonadas pegado a su figura y en la espalda tenía una transparencia que dejaba al descubierto su tatuaje de una loba con flores, el cual se había grabado como símbolo de borrar las marcas de su pasado, las cuales tenía reflejadas en su espalda.

Se recogió el cabello en un moño, dejando unos mechones sueltos y ahora venía la parte difícil, el maquillaje... no sabía cómo hacerlo.

Aria- Y ahora que hago?

Serena - Tranquila! Solo recuerda como lo hacía Azula y por cierto no creí nada de eso que solo preguntabas por Alexander por saber a quién protegerías.

Aria- Está bien, únicamente espero no quedar ridícula y para ti información esa fue la razón.

Tomo las brochas, el maquillaje al cabo de un rato terminó, se quedó sorprendida, había podido recrear a la perfección el maquillaje que le había hecho Azula, luego se pintó los labios de rojo vino, se colocó el collar que le había dado su tío, está vez no cambiaría su apariencia solo ocultaría su aroma, se calzó los zapatos a juego con el vestido, salió de su habitación y se dirigió a la primera planta.

Serena - (molesta) ¿Cuánto tiempo más ocultarás tu aroma a Alexander?, sabes que él tarde o temprano se dará cuenta de que era su Mate, Ahora que Aarón te ha dicho que él es un buen hombre, .Sigues pensando en rechazarlo?

Aria no respondió a Serena, porque en ese momento ni ella misma sabia si aún quería rechazarlo, lo único que tenía certeza es que no quería sufrir más.

Al verla su padre y su hermano, ambos se pararon inmediatamente cuando bajo, por las escaleras.

Albert - Mi niña, estás ...

Aarón -... Bellísima.

Aria- (ruborizada) Gracias.

Albert - Aarón, ve por el auto, para que nos lleves a la ceremonia.

Aarón - ¿Qué? ¿Por qué debo ser yo el chófer?! Quiero escoltar a mi pequeña en la ceremonia!

Albert - Ve ahora mismo por el auto o me aseguré que desde mañana y durante un mes hagas guardia y no puedas ver a tu hermana.

Aarón - No es justo, siempre te aprovechas de tu posición e influencia con Alexander.

Sin más que decir Aarón salió refunfuñando para traer el auto y Albert sonrió triunfante.

Aria también sonrió al ver la tan bonita relación que tenían su papá y hermano.

Al cabo de unos minutos, Aarón ya se encontraba en la puerta con el auto y se pusieron en Marcha al anfiteatro.