El Dolor De Una Partida

Hundiéndose en un cálido beso, sus corazones marcaban un ritmo acelerado, sentimientos dentro de ellos crecían los cuales ninguno de los dos conocían, solo se dejaban llevar del momento, experimentando nuevas sensaciones. Alejandro a pesar de haber tenido muchas aventuras, nunca había sentido ni un poco de lo que le producía su esposa, por otro lado, Adhara, poco o nada sabia del tema por lo que era la más expuesta a desarrollar sentimientos.

Al terminar el beso, sus ojos seguían conectados, esta vez era diferente, sus ojos expresaban ternura, pasión y lujuria, como si pudieran comunicarse a través de ellos.

- Porque apartas tu mirada? Pregunta Alejandro

- Porque no se como interpretar esa mirada

- Es la misma que tú me estás ofreciendo

 ¿- Que está pasando? Desde ayer noto algo diferente y ya no me trata de usted.

- Somos esposos, y aunque sea por un contrato.

- Entiendo!... Es eso... Adhara un poco entristecida, le hubiera gustado que él le dijera otra cosa.

- Quiero que nos llevemos bien, no más señorita, ni señor Miller.

- Ok! Como tú quieras.

- Se que te dije que viajábamos el fin de semana pero lo vamos a tener que adelantar.

- Porqué?

- Debo asistir a una gala, donde estarán solo magnates, es una buena oportunidad para realizar buenos negocios ya que esa es la finalidad de dicha reunión, son muchas las empresas que crecen y se expanden gracias a los socios y nuevas inversiones que pactan allí.

  - Estupendo que se den esos espacios y cuando viajamos?

- Si son buenas oportunidades de negocios, pero debo advertirte que lo más probable es que Silvia y su padre también estén y viajamos mañana mismo por lo que debes organizar tu maleta.

- Esa mujer te debe preocupar a ti, no a mi - dijo Adhara cruzándose de brazos y mirando a un lado.

- No te pongas celosa, mi esposa eres tu - dijo Alejandro mientras le picaba un ojo y se burlaba.

- Celosa? Quien está celosa? Esa mujer está muy lejos de hacerme sentir celos, además no tengo por qué celarte, eres mi esposo solo en el papel, por lo tanto puedes estar con quien quieras al igual que yo.

- Eso puede cambiar ahora mismo si deseas y lo de estar con otra persona eso no pasará, no mientras en el papel yo sea tu esposo - dijo Alejandro un poco molesto

- Si yo no puedo estar con otro hombre entonces tú tampoco con otra mujer hasta que este contrato acabe, para mí no es difícil estar sin nadie, pero para ti no creo.

- Es difícil, eso es cierto pero cumpliré, es un trato - término diciendo Alejandro mientras le extendía la mano en señal de cerrar el trato, lo que Adhara acepto.

- hagamos esto más interesante!

- A que te refieres?

- yo estoy segura de cumplir, pero como podría estarlo de ti?

- Que propones?

- El que sea sorprendido con otra persona, deberá pagarle un millón de dolares al otro, que te parece?

- Un poco exagerado.

- Sabia que no aceptarías, es algo imposible de cumplir para un hombre - dijo Adhara al mismo instante que se levantaba de su cama para salir de la habitación

- No dije que no aceptaba - le dijo Alejandro a Adhara mientras la tomaba por la cintura y la acercaba a el.

- Ba, ba... bajemos almorzar he estado todo el día en esta habitación - dijo Adhara nerviosa.

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- Silvia, como te sientes?

- Estoy bien papá, ya me siento bien

- Estás segura hija?

- Si papá, no molestes! ¿Hiciste lo que te pedí?

- Si hija, me encargue de que Alejandro recibiera la invitación a la gala de una manera que no pudiera decir que no.

- Muy bien papá.

- Que es lo que piensas hacer Silvia?

- Eso es problema mío.

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- Buenas tardes - dijeron Cristina y Esteban alegremente, entrando hasta el comedor donde estaba Alejandro y Adhara

- Buenas tardes - respondieron al mismo tiempo

- Por favor tomen a cientos, acompañemos a almorzar

- Muchas gracias querida, pero ya almorzamos

- Si, mi cris deseaba ir a comer a un restaurante chino y la lleve como el buen esposo que soy - dijo Esteban alzando su barbilla en señal de orgullo.

- Claro que si, tengo al mejor esposo del mundo - respondió Cristina mientras le daba un beso a Esteban.

- Ya dejen su meloseria!

- Nunca amigo mio, el día que esta mujer deje de darme besos y demostrarme amor, me vuelvo loco.

- Más bien porque no se copian ustedes un poco de nosotros y empiezan hacer un matrimonio de verdad, son una pareja divina! - mencionó Cristina.

Adhara empezó a toser al sentir ahogarse con el sorbo de agua que había tomado.

- Te sientes bien? No le hagas caso a este par

- Si, estoy bien! Quieren conocer la mansión? - pregunto Adhara con un leve sonrojamiento en su rostro que todos notaron.

- Pueden ir ustedes, Esteban y yo iremos al estudio.

- Que aburridos! nunca dejan de hablar de trabajo.

ven cuñadita yo si quiero conocer esta hermosa casa.

- Que pasa hermano?

- Toma a ciento! Quieres tomar algo?

- Un whisky esta bien, te noto tenso, que pasa?

- Pasa que no se que hacer con Adhara, esa mujer me descontrola, me cuesta mucho trabajo estar cerca de ella y no hacerla mía, puedes creer que paso horas observándola dormir por las noches, entro a

 su habitación a escondidas, estoy enloqueciendo amigo.

- jajajajajajaja quien iba a imaginar que terminarías enamorado de tu esposa hasta el punto de volverte un acosador - dijo Esteban entre cortando las palabras a causa de la risa.

- No te burles

- Perdón hermano, es que tanto huirle a los compromisos y ahora eres tu quien asecha a una mujer.

- Es hermosa tu casa cuñada.

- Gracias cris, hace mucho que no vivía aquí, pero tengo muchos recuerdos con mi padre, sobre todo en el jardín donde muchas veces jugamos - dijo Adhara con los ojos llenos de lágrimas.

- Ven, ven, nada de lágrimas, hay que recordar a los que no están con alegría y atesorar esos recuerdos en el corazón - dijo cristiana mientras la abrazaba.

- Te gustaría ayudarme hacer mi maleta? mañana viajaremos Alejandro y yo.

- Que bien! Por supuesto que te ayudo! Dijo casi en un grito de la emoción Cristina.

- No imagines cosas que no son, es un viaje de negocios y también iremos a esparcir las cenizas de mi padre al lugar donde el quería.

- Si pero también la pueden pasar bien. Y a donde irán?

- Las cenizas de mi padre serán esparcidas en un lago que queda a en medio de la selva pero es un lugar muy visitado por turistas, es realmente hermoso. Y de la reunión de negocios solo se que sera en una isla.

Las chicas hablaban y miraban todas las prendas de vestir que habían en el armario, donde Cristina escogía las que fueran acorde a los lugares y eventos a donde irían, como también las más llamativas con las que Adhara no pasaría desapercibida.