Valentina, Miss Belleza, se cruza con un hombre cuyo tatuaje desata una obsesión oscura. Su vida de ensueño se convierte en una pesadilla real.
Michael "Mickey" Rossi, líder mafioso, encuentra en Valentina la única luz en su mundo de sombras. Su amor es una bomba a punto de estallar.
En un juego de poder y traición, su pasión desatará una guerra sangrienta. Pero, ¿quién sobrevivirá a este infierno? Y, ¿quién pagará el precio final?
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#15
Mientras tanto en una bodega de Roma, dentro estaban dos hombres sin decir nada, mirando papeles y sus tablets.
—Cuando debemos mandar el cargamento de Duran —decia Sebastián sin mirar a Michael
—Este fin de semana —respondio dándole un sorbo a su café
—De nuevo estás crudo Mich —le preguntaba Sebastián mirándolo, y Michael solo asentia.
—Pero eso no importa, veamos las rutas que dejó D'Angelo y el cargamento de Duran y el que debe llegarnos —decia cambiando el tema, Sebastián solo negaba, no le gustaba verlo a si, pero tampoco le diría nada de Valentina, se lo prometió y lo que ella necesitaba era paz y tranquilidad.
—Esta bien, deja veo que falta para mandar lo de Duran —le respondía Sebastián saliendo de la oficina, suspiro y se fue dejándolo solo en la oficina, Michael saco una foto de su cajón, que era de Valentina y la miraba con tristeza
—Te extraño como no tienes idea reina, solo espero que dónde sea que estés te encuentres bien y no estés sufriendo por mi cobardía, te juro que solo quería protegerte, no dañarte, pero no supe hacerlo bien, solo espero que algún día te vea de nuevo y pueda pedirte perdón, y me perdones Vale —pensaba para el mismo, aunque le dolía no tenerla, y moría por mandar a buscarla y traerla de vuelta, pero se aguantaba el dolor y su tristeza, creía que buscarla sería dañarla más, y eso es lo que el no queria, solo deseaba que estuviera bien y tranquila, lejos de la vida de un mafioso con muchos enemigos, guardo la foto nuevamente y se fue con Sebastián había decidió viajar a Venecia a entregar el mismo la mercancía a Duran.
—Que pasa —le decía Sebastián
—Prepara todo iremos nosotros, prepara unos hombres y salimos está noche por tierra —daba la orden y Sebastián solo asentía y se iba a preparar todo para salir, en eso sonaba el celular de Michael y respondia
«Llamada»
-¿Si?
-Cariño nos veremos este fin
-No Lidia, estaré fuera, si haces una estupidez ya sabes
-Tranquilo, me pórtare bien, no saldré, gracias por dejarme volver, y volver a tu vida.
-Si, cómo sea, si necesitas algo tienes hombres ahí, se los pides a ellos, ya que yo no estaré disponible y lo sabes
-Entiendo, aquí te espero para cuando regreses.
-Ok, nos vemos
«Fin llamada»
Suspiraba y guardaba su celular, en eso apareció Sebastián y lo miro serio
—De verdad, Lidia otra vez, no entiendes Michael
—Mira Sebastián sabes que te quiero como un hermano, pero no te metas está vez, déjame ya está aquí y es mi mujer
—¿Tu mujer?, habla enserio, dejaste de verla a si Rossi, desde que te engaño la primera vez, joder que mierda te pasa, tenías una buena mujer y la perdiste por idiota, ahora vuelves con la tipa que te engaña cada que tiene oportunidad, entiendo que seas mujeriego, pero mientras Vale estuvo en tu vida dejaste esa vida atrás.
—¡Basta!, no vuelvas a mencionarla, jamás quiero oir su nombre de nuevo, ella se fue y yo la cagué final del asunto, y lo que haga o no con Lidia es mi asunto
—Jodete Michael, Valentina tuvo razón en no decir nada, no merecías una mujer como ella, deseo que encuentre un hombre que valga la pena y la acepte con todo, y sea feliz y a ti te deje en el olvido, por qué eso es lo que mereces de ella, que no te perdone y que te olvide —le espetaba furioso Sebastián Michael, y el lo miraba serio.
—En tan poco le agarraste cariño
—Tu la amas, aunque lo niegues, por qué si no la amarás, jamás hubieras traído de vuelta a Lidia no te emborracharas como lo haces últimamente, si lo hiciste para protegerla, pero había otras maneras, dónde no la dañarás como lo hiciste, de verdad que cuando sepas la verdad no te arrepientas y no sea demasiado tarde Michael —le gritaba y se daba media vuelta para irse —y ya está todo para salir en una hora —agregaba antes de irse y dejarlo solo con mil dudas sobre Valentina, ahora creía que algo sabían y ella se fue con eso, pero ahora eso era lo de menos, debía salir a Venecia y esperar que no fuera una tortura viajar con Sebastián después de su discusión
Iban en la misma camioneta detrás del camión de mercancía, rumbo a Venecia, Sebastián sonreía a su celular ya que iba mensajeando con Adriana y está le contaba que Valentina conoció a alguien y ese día habían salido, Sebastián esperaba y ella pudiera ser feliz con alguien que la apreciará de verdad.
Mientras tanto Michael miraba por la ventanilla, debatiendo si había echo lo correcto con Valentina al alejarla de él, había algo más que el no vio, por su distancia con ella se le olvidó ver que ella estuviera bien, ahora solo le quedaba creer que ella estaba bien, y haya valido la pena perderla.