MENTIROSO AMOR

#Liana

Llegamos todos a casa de mis padres, los chicos corrieron a saludar a la abuela.

-Hola mamá. La salude.

-Hola hija... Carlos... Karo... ¿Qué hacen todos aqui?. Pregunto y note que miro de una manera particular a Paolo.

-Ma... Él es Paolo. Lo presente.

-Asi que eres Paolo. Lo saludo de una manera fria.

-Tratalo bien abuela él es bueno. Le dice Teo dandole un beso.

-Si abuela, él siempre te ayuda en todo. Agrega Max.

-No entiendo. Respondio mi madre confundida.

-No te preocupes abuela, ya te explicamos. Le dice Lucio.

-Tienes galletas. Consulta Franco.

-Y papá. Le pregunto en medio del barullo.

-En su despacho. Me respondio ella siendo arrastrada por sus nietos al interior de la casa.

Junto a mis hermanos, Carlos y Karo, nos sentamos en el despacho de nuestro padre, el señor Corleone, con expresiones serias en nuestros rostros.

Observe a ese hombre que siempre impuso su voluntad y por el que nunca use mi apellido de casada.

Nuestro padre, un hombre mayor con una mirada cansada, se sentó detrás de su escritorio, con una sensación de inquietud en sus ojos por vernos ahi a los tres.

-¿Qué pasa, hijos?. Preguntó, con una voz suave.

Mire a mis hermanos, suspire y me incline hacia adelante, con una mirada intensa. Tenia una extraña sensación en el estomago, despues de mucho enfrentaba a mi padre de este modo, no por trabajo, no por mi relación con Francisco, sino porque él tenia una hija ilegitima, eso me molestaba, eso no podia digerirlo y culpa de eso estaba en esta situación y nos afectaba a todos.

-Papá, queremos hablar contigo sobre Silvia. La hija que tuviste con... con otra mujer. Solte la bomba.

Nuestro padre se puso pálido, y por un momento, pareció que iba a negar todo. Pero luego, suspiró y se recostó en su silla.

-Sí, es verdad. Dijo, con una voz baja.

- No voy a negar que en un momento fui debil... Aunque me sorprende que digan que tuve una hija con una mujer.

-Quieres decir que no lo sabias. Agrego Karo nerviosa.

-Nunca lo supe... Y como solo tuve una sola amante... Creo saber de quien se trata... Una mujer que se llamaba... se llamaba Sofía... Si no mal recuerdo.

Carlos se cruzó de brazos, con una mirada de desdén.

-¿Y por qué nunca nos dijiste nada, papá? ¿Por qué nos ocultaste la existencia de otra mujer?. Le pregunto Carlos con un tono de desaprobación en la voz.

Nuestro padre se frotó la frente, con una expresión de dolor.

-Lo sé, hijos. Lo sé. Me equivoqué. Suspiro pesado.

-No basta con que digas que te equivocaste... Silvia nos odia porque no la reconociste como hija y ahora busca venganza. Le dice Carlos.

-Me equivoqué al no reconocerla como mi hija. Pero en ese momento, no estaba preparado... no estaba preparado para asumir la responsabilidad. Lo escuche decir.

-Acabas de decir que no sabias de su existencia. Le dice Karo.

-No, no lo sabia... Aunque tuve mis dudas en su momento... Pero como Sofia jamas apareció... Lo descarte. Le respondio mi padre.

Karo se inclinó hacia adelante, con una mirada de ira.

-¿Y qué hay de Silvia? ¿Qué hay de su odio hacia nosotros? ¿Qué hay de su empeño en destruirnos?. Pregunto molesta.

Nuestro padre se puso de pie, con una expresión de sorpresa.

-¿Destruirnos? Indago.

-Silvia... Silvia es una mujer amarga y resentida. Le digo.

-Ella es la amante de Francisco.

-¿Y dices que es mi culpa?. ¿Es mi culpa por no haberla reconocido como mi hija cuando era tiempo? Pregunto ofendido.

Me puse de pie, con una mirada de determinación, me acerque a él.

-Papá, tenemos que hacer algo. Tenemos que detener a Silvia antes de que nos destruya a todos.

Me miro confundido, como si aun no lograra entender todo el asunto.

Luego asintió, con una expresión de resolución.

- Sí, hijos. Lo haré. Haré lo que sea necesario para protegerlos. Para proteger nuestra familia.

-Con que digas eso no soluciona las cosas. Le dice Carlos.

-Se ve que no entiendes lo grave de todo. Le dijo Karo.

Me sente de nuevo, con una expresión de ira en mi rostro. Mi padre cuando dice que lo va a arreglar es porque solo quiere apaciguar las cosas, pero esta vez le haremos entender como son en verdad.

-Papá, Silvia no es solo una mujer resentida. Es una persona peligrosa. Hace más de 12 años, ideó una venganza contra nuestra familia. Le cuento.

Él se inclinó hacia adelante, con una mirada de sorpresa.

-¿Qué estás diciendo, Liana? ¿Cómo lo sabes?. Me pregunta mi padre

Respiró profundamente.

-Porque Carlos ha estado investigando, papá.

-¿Es cierto? Le pregunta a Carlos.

-He estado hablando con gente que conoce a Silvia, y he descubierto que ella siempre ha estado obsesionada con nuestra familia. Quería vengarse de ti por no reconocerla como hija, y se aprovechó de la posición de Francisco para hacerlo. Le cuenta Carlos.

-En principio Francisco me lo dijo, no quise creerle por pensar que solo mentia como siempre. Por eso Carlos investigo. Le aclaro.

Nuestro padre se puso pálido, con una expresión de horror.

-¿Qué hizo, Liana? ¿Qué hizo Silvia? Me pregunta.

Me detuve un momento, antes de continuar.

-Desvió fondos de la empresa, papá. Millones de dólares. Y lo hizo de manera tan astuta que nadie se dio cuenta. Francisco estaba tan ciego por ella que no se dio cuenta de lo que estaba pasando. Le conte.

-¿Él es inocente?

-No padre, no digo eso... Él es culpable, tanto como Silvia o más... Solo te explico como se dieron los hechos. Le digo.

Él se volvio a levantar de su silla, donde se habia caido de la sorpresa por lo que le contaba, con una mirada de ira en su rostro.

-¿Cómo pudo hacer eso, Silvia? ¿Cómo pudo ser tan cruel?... Cuando enfrentamos a Francisco crei que solo hizo todo y crei que Silvia era solo un juguete con el que se divertía, Francisco. Ahora me dicen que fue la mente maestra. Expreso nuestro padre.

Me encogi de hombros.

-Silvia es una persona sin escrúpulos, papá. Está dispuesta a hacer lo que sea para vengarse de nuestra familia. Y ahora, está embarazada de Francisco, y está usando eso para chantajearnos. Le digo.

-De Francisco no debe ser, acuerdate que él es esteril. Me dice Carlos.

-¿De qué hablan? Pregunto mi padre.

-Es que hay otro tema, donde Silvia se metio... Al parecer ella investigando sobre todos nosotros, como destruirnos... Averiguo sobre Francisco y supo que era Esteril... Cambio los resultados usando espermas de Paolo... Que resulto ser un hijo ilegitimo del padre de Francisco... Paolo no estaba enterado de ello... Ella solo se aprovecho de que el estaba necesitado de dinero en ese tiempo y lo empujo a que done esperma por una suma de dinero... Él ajeno a lo que planeaba Silvia lo hizo. Le cuento aún incredula por todo.

-Quieren decir que mis nietos no son de Francisco... Sino de un tal Paolo. Dijo mi padre tratando de entender lo que le contaba.

-Paolo es el asistente de Francisco que uso como doble para que lo reemplace mientras se escapaba con su amante. Le cuenta Carlos.

-Silvia al conocer a Paolo... Fue la que hizo que Francisco lo conociera... Haciendo que de este modo Francisco lo contrate para luego hacer todo ese embrollo que hizo con Paolo.

Mi padre se sentó de nuevo, se sirvio un vaso de whisky, con una expresión de derrota.

-¿Qué podemos hacer, Liana? ¿Cómo podemos detenerla? Me pregunta.

Le sonrió, con una mirada de determinación y le toco las manos como para que se relaje.

-Ya he empezado a trabajar en eso, papá. Le dijo Carlos.

- He estado reuniendo pruebas, y pronto tendremos todo lo que necesitamos para detener a Silvia de una vez por todas... Además recupere los fondos que se robaron.

Mi padre con una expresión de alivio en su rostro.

- ¿Qué estás diciendo, Carlos? ¿Recuperaste los fondos?

Carlos asintió, con una sonrisa en su rostro.

-Sí, papá. Gracias a la ayuda de Paolo, pudimos recuperar las cuentas que Francisco y Silvia habían robado. Todo está en orden, y la empresa está a salvo. Le cuenta.

Nuestro padre, con lágrimas en los ojos.

-Gracias, hijo. Gracias por salvar nuestra familia. No sé qué haría sin ti.

Carlos se acercó a nuestro padre y lo abrazó.

-No hay de qué, papá. Estoy aquí para ayudarte. Y Paolo también. Él fue quien nos ayudó a descubrir lo que estaba pasando y a recuperar los fondos.

Nuestro padre se separó de Carlos y lo miró a los ojos.

-¿Y qué hay de Francisco? ¿Qué va a pasar con él? ¿Y con Silvia? Pregunto.

Carlos se encogió de hombros.

-Bueno, papá, Francisco va a tener que enfrentar las consecuencias de sus acciones. Asi como podra pagar alguna suma bastante jugosa, también puede ir a la cárcel, y va a estar allí por un buen tiempo, al igual que Silvia, todo depende de como se de en el juicio. Pero lo importante es que la empresa está a salvo, y nuestra familia está protegida. Le informa Carlos.

Nuestro padre asintió, con una expresión de satisfacción.

-Sí, hijo. Eso es lo que importa. La familia es lo más importante. Suspiro pesado, mi padre.

En ese momento, Paolo entró en el despacho, con una sonrisa en su rostro.

-¿Cómo está, señor Corleone? Me alegra ver que todo se ha resuelto.

Lo mire extrañada, se ve que se siente parte de la familia, no toco para entrar ni nada. Aunque pensandolo, si él reemplazo a Francisco siempre, no me extrañaria que se sienta asi.

Mi padre se levantó de su silla y estrechó la mano de Paolo.

-Gracias, Paolo. Gracias por todo. Eres un verdadero amigo de la familia.

Paolo sonrió, con una mirada de orgullo.

-No hay de qué, señor Corleone. Estoy aquí para ayudar. Le dijo.

-Bien, si ya está todo dicho salgamos. Nos señaló nuestro padre.

-Le dijiste. Me susurra Paolo haciendo gesto hacia mi vientre.

-No, aún no... Quiero ver a mi ginecóloga primero. Le digo.

-A Liana... ¿Qué te dijo Sergio sobre los estudios de tus ojos? Se dio vuelta mi padre a preguntar.

-Puede quedar ciega si no se opera. Respondio Carlos antes que pueda responder a mi padre.

-¿Cómo es eso posible? Pregunto mi padre preocupado.

-Es culpa de Silvia y Francisco... Al no querer que ella note la diferencia entre él y Paolo a propósito le cambio las gotas. Le dice Carlos con un tono de enojo por lo que me hicieron.

-Entonces ¿Cuándo te operas? Me pregunta mi padre.

-Pues... Eso va a tener que esperar. Le digo.

-¿Cómo?... Me acaba de decir Carlos que puedes quedar ciega... No debes pensarlo mucho. Me presiona.

Suspiro nerviosa y miro a Paolo. Él me sostiene la mano y con la mirada me empuja a que le cuente a mi padre.

-Pa... Lo que sucede...

-Hay no... Ya conozco esa cara tuya. Me dice.

-Escucha... Antes de suponer cualquier cosa.

-Mientras no tenga que ver con Francisco...

-Pues no... No tiene que ver con él...

-Entonces... Dilo de una vez... Que te detiene que te operes ahora...

-Sabes que Francisco usaba a Paolo para que lo reemplace y no lo sabia hasta hace poco...

-Entonces tiene que ver con Francisco...

-No... Como decirte...

Suspiro pesado mirando a Paolo que me ayude.

-Señor Corleone... Lo que trata de decirle Liana... Es que esta embarazada de mi. Le dice Paolo.

-¡¿CÓMO?!

-Asi es padre... Estoy embarazada y debo hacerme unos estudios para saber que es lo mejor en este momento...

-¿CÓMO QUE ESTAS EMBARAZADA? Aparece mi madre.

-Si... Es asi. Le respondo colorada.

-Asi que el padre es Paolo... ¿Estás segura de eso? Me pregunta mi padre.

-Si padre... No he estado con nadie más... Bueno... Crei que solo estaba con Francisco... Pero como descubrimos... No fue así, porque Francisco uso a Paolo como su reemplazo en todo, incluso en el lecho matrimonial.

-QUE LOCURA. Mi madre expresa con un gesto a punto de desmayarse.

Si esa era su reacción por mi condición no quiero imaginar cuando se entere de la hija ilegitima de mi padre.