Keres Jabbar Elrryan tiene su primer banquete de cumpleaños como hijo menor del Emperador del Imperio Kardext. En el banquete, su padre y hermano mayor le dan dos obsequios que todo el mundo sabe, no es mas que para dejar en claro que Keres es su leal mascota.
Keres es consciente de ello y a pesar de eso acepta los dos obsequios: el título de "Conde" junto a sus deterioradas tierras y un sangriento matrimonio con la Princesa que rechazó a su hermano mayor hace algunos años, ordenando a Keres destruir todo el Reino de Elentia y capturar a la familia Real.
Claramente sabe que el matrimonio es una clase de castigo para ambos y estaba preparado para recibir el desprecio de su esposa.
Pero, ella repetir hasta el cansancio que "lo ama", está intrigado del por qué su esposa se comporta de esa manera cuando se supone debe odiarlo. Y queda más intrigado cuando todo el mundo le dice: "Tú esposa es un demonio, una villana".
«¿...? ¿...?» [Pero si mí esposa es increíblemente adorable]
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EN TODA VIDA
Al día siguiente. La princesa heredera caminaba tranquilamente junto a Davor por un pasillo, al notar lo bien vestido que estaba le preguntó:
«¿Vas a ir en persona a entregar la invitación a la coronación?»
«Sí»
«¿Te vestiste así para ella?»
«¿Huh?»
Davor notó el elegante y caro traje que llevaba puesto. Sin detenerse de caminar, sonrió.
«... Supongo que lo hice sin darme cuenta» [Siempre trataba de ser presentable y caballeroso cuando se trataba de Oona. Así que, mi costumbre no desaparecerá de la noche a la mañana]
Su esposa se burló un poco.
«Jaja, ¿Sin darte cuenta?~. Quién lo diría, el maquiavélico príncipe Davor enamorado de una dama»
«¿Te importa?»
«Nah, te podría gustar un cerdo y no me importaría»
«Entonces deja de fastidiar»
«Es que no lo entiendes querido. Soy retorcida, lo admito, tú también lo eres, perfecto, pero además de eso eres muy inteligente y astuto. Sí realmente te gusta tanto esa princesa...»
Ella se paró frente a su esposo, obligándolo a detenerse. Levantó su delicada mano y le apuntó el pecho con el dedo anular para agregar...
«... Habían mejores formas de tenerla a tu lado de forma menos agresiva, mujeres tan dulces y delicadas cómo "ella", suelen caer mejor cuando se les corteja con cartas de amor, chocolates o flores»
«¿Te interesa tanto cómo haga las cosas con Oona?»
«Por supuesto, ~es simple curiosidad~. Porque como mencioné anteriormente, si estás tan enamorado ¿Por qué quebrarle la mente, hasta volverla una lunática cuando pudiste invitarla a una cita romántica?»
Davor sonrió con ironía y apartó a su esposa a un lado con un...
«Ya te dije la respuesta a tu curiosidad, ...ya lo intenté y no terminó como esperaba» [No importaba que método usara, el final siempre era el mismo. Oona, siempre prefería a Keres]
Ante su respuesta, la princesa heredera se notaba intrigado.
«¿?, ¿?» [¿En qué momento exacto es que intentaste ser un "caballero" con ella?, si lo único que hiciste durante 5 años fue torturarla]
Davor planeaba volver a caminar cuando de pronto una mujer vestida completamente de negro con una chalina roja en su cuello se arrodilló ante él, dándole una noticia que lo sorprendió.
«Su majestad, ha llegado un mensaje del Ducado Hormadia. El Duque Erevan súplica su perdón, pero no podrán entregarle al boticario Lucas»
«¿Por qué?»
«Tal parece, que el boticario intentó escapar de la prisión de Agenón y en la acción de volverlo a capturar, cayó del muro de la prisión en la zona de los picos de acero. Murió en el acto»
Davor afiló la mirada.
«Cambio de planes, primero voy a ir al Ducado Hormadia» [Ésto es extraño..., no importa como trataba el futuro, Lucas nunca se había muerto]
***
En el Ducado Hormadia, Oona revisaba el trabajo de Erevan. Un hombre similar a Lucas, con un hermoso cabello rubio y largo estaba atravesado por varios picos de acero por todo el cuerpo.
Erevan no sabía que pensar de la expresión que tenía ahora mismo la esposa de su amigo. Ella tenía los ojos animados y con una sonrisa, ciertamente escalofriante.
No pudo soportar el silencio que había.
«¿Está bien? Princesa»
Oona dio una última vuelta al cadáver para mirar los detalles. De hecho, parecía un experto en arte, observando si debía comprar la pintura o no.
[Cualquier señorita hubiera gritado de horror, lo estampé de tal manera que incluso algunos órganos están fuera. Cualquiera ya hubiera a un lado a vomitar]
Después de otro largo silencio Oona sonrió satisfecho.
«Sí, está muy bien. El ángulo coincide, la hora de muerte también, no se le puede distinguir bien por cómo fue atravesado, una escena muy bien hecha»
«Aunque, ¿Cómo sabía que el hijo menor del Duque Amant era parecido al boticario?»
«Tenía que llevarme a Lucas, así que no tuve otra opción que investigar para encontrar a alguien similar a él»
«Eres aterradora. Me hiciste usar al hijo menor de un Duque, ¿Qué se supone que vamos a hacer cuando el Duque Amant se de cuenta de la ausencia de su hijo? ¿Y cómo sabías que se había infiltrado en mi territorio?»
«Hace muchas preguntas Duque Erevan»
«Sí la voy a ayudar en esto, al menos merezco la versión completa de ésta hist-»
«¡¡¡Kyaa-waaa!!!»
El grito repentino de Oona lo asustó y lo sorprendió, sin embargo, esos sentimientos fueron opacados por el terror cuando sintió una presencia oscura tras su espalda.
Volteó hacia atrás y vio a Keres, tragó saliva y antes de poder decir algo, Oona pasó por su lado y terminó abrazando a Keres con fuerza y con su pequeño cuerpo temblando de "miedo".
«Sniff-hic, Keres»
Keres la abrazó con un sentimiento de protección antes de notar el cadáver atravesado por pocos de acero. Frunció el ceño y miró a Erevan exigiendo una explicación.
«U-un prisionero de Agenón intentó escapar y cayó en el lugar equivocado»
«¿Y que hacía mi esposa en un lugar así?»
Oona miró con sus ojos vidriosos a su esposo.
«Keres, yo no quiero estar aquí, ese cadáver me da miedo»
«Hum, sí, está bien»
Él la notó temblando, así que con gran facilidad la cargó entre sus brazos con suavidad.
«Me desperté y no estabas, así que me preguntaba a dónde te habías ido, ¿Qué hacías aquí?»
«Sniff, yo-o sniff, yo... Él me secuestró»
Dijo Oona señalando a Erevan, quién se quedó en blanco ante esa acusación.
«¿Eh? ¿Yo?» [¡¡Pero si tú eres la que me secuestró!!, ¡¡Estaba durmiendo bien feliz en mi cama después de armar éste teatro y tú de pronto me despertaste con tu cuchillo en mi cuello!! ¡¡¡Yo soy el que está asustado!!!]
«Erevan»
Cuando Keres pronunció su nombre, le dio escalofríos, Keres no había gritado, pero de alguna manera, su tono de voz era tan macabra que retrocedió un par de pasos tratando de explicarse.
«N-no es lo que crees, ella es la que-¡!»
Oona lo miró con una expresión tan aterradora que entendió el mensaje como si hubieran hablado por telepatía.
Erevan cerró los ojos, sumamente cansado de ésta situación.
[¿Cómo terminé metido en ésta mierda? Ella me cortará la garganta si la delato y Keres también me quebrará los huesos si no le contesto de forma correcta, ¿Cómo es que se terminaron casando? Todo es culpa del principe heredero]
Tomó aire, aspiró una gran bocanada y lo soltó con suavidad, como si tratara de ventilar su cerebro antes de responder.
«Me la encontré mientras daba un paseo por la mañana, dijo que quería recolectar flores para tí, así que le insistí para llevarla a un hermoso lugar lleno de muchas flores, un atajo para llegar más rápido era por aquí, lamentablemente, no sabía que ésto había ocurrido y la princesa terminó viendo algo desagradable» [Usé toda mi capacidad cerebral para ésto, iré a dormir luego de darles a Lucas]
Keres parecía dudar un poco de sus palabras, al final terminó preguntando a su esposa:
«¿Es eso cierto Oona?»
Oona asintió.
«S-sí. Me-e dijo que encontraría flores que podrían gustarle a mi esposo»
«No era necesario que hicieras eso»
«Yo quería hacerlo, porque me gusta mucho mi esposo, te amo tanto»
Oona no resistió al ver su cara tan preocupada y lo agarró de las mejillas para besarlo en los labios. Fue tan repentino que Keres se quedó en blanco, incluso después de que Oona se alejó y lo abrazó repiendo.
«Te amo tanto mi amor. No creo amar a nadie más que a tí, en ésta vida o en cualquier vida»