Ella necesita un esposo para poder obtener la herencia que le dejó su abuelo, a él le quieren imponer un matrimonio. Un momento de confusión los hará conocerse y él aprovechará esa oportunidad para escapar del matrimonio que no desea, sin saber que gracias a ella también obtendrá la libertad que tanto ansiaba.
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Una nueva realidad
De vuelta en casa, Kyle y Annia se sumergieron en su rutina diaria, pero la experiencia del fin de semana seguía resonando en sus mentes y corazones. La relación entre ellos había evolucionado, y aunque ninguno de los dos había hablado explícitamente de lo que les estaba pasando, ambos sabían que las cosas nunca volverían a ser igual que antes.
Una mañana, Kyle estaba preparando el desayuno cuando Annia entró en la cocina, todavía en pijama, con el cabello despeinado y los ojos somnolientos. A pesar de su aspecto desaliñado, a Kyle le pareció una visión vencantadora.
-Buenos días, Annia- le dijo con una sonrisa, sirviendo café en una taza y ofreciéndosela.
-Buenos días, Kyle. Mmmm... Huele delicioso- respondió ella, aceptando la taza con gratitud, mientras alzaba la cabeza y cerraba los ojos para sentir el aroma del café recién hecho.
Él sonrio...
Mientras Kyle preparaba unos huevos revueltos, Annia se apoyó en la encimera, observándolo.
-He estado pensando en lo que me dijiste sobre las fundaciones benéficas que tu abuela solía ayudar. Me parece una causa muy noble- dijo Kyle, rompiendo el silencio.
Annia sonrió, recordando a su abuela con cariño.
-Sí, ella siempre se preocupaba por los demás. Quiero seguir su ejemplo y ayudar a esas fundaciones cuando reciba mi herencia. Es una manera de honrar su memoria- explicó Annia, su voz llena de determinación.
Kyle la miró con admiración.
-Estoy seguro de que harás un gran trabajo. Y si necesitas ayuda, cuenta conmigo- dijo sinceramente.
Annia se sintió conmovida por su apoyo.
-Gracias, Kyle. Eso significa mucho para mí -respondió, con voz suave.
El silencio se apoderó de la habitación, ninguno de los dos sabía cómo seguir la charla, y fue Annia quien lo rompió.
-¿Tienes planes para hoy? - le preguntó
-Sí- respondió él- hoy toca encontrarme con James por el tema de unas fotografías.
-¡Genial! Me alegra que estés teniendo trabajo- replicó ella con alegría genuina al saber que él ya no estaba siendo un modelo desempleado.
-¿Y tú, tienes planes? - indagó él.
-Voy a visitar a Cloe, parece que me consiguió un empleo- afirmó ella.
-Eso es bueno- le dijo él- ¿Sabes? Me gustaría que habláramos sobre ese asunto de la herencia de tu abuelo y... sobre tu prima.
-Ok- le dijo ella con consternación, ya que ese asunto no era de su agrado.
Luego cada uno se dirigió a su habitación para cambiarse y salir.
Mientras Annia se dirigía al departamento de Cloe, su mente iba revuelta con pensamientos y sentimientos encontrados sobre Kyle. El viaje en metro fue rápido, pero le dio suficiente tiempo para reflexionar sobre lo que había estado ocurriendo en las últimas semanas. Kyle se había comportado de manera tan atenta y considerada que no podía evitar sentirse atraída por él, pero sabía que debía hablar con alguien antes de tomar cualquier decisión.
Al llegar al edificio de Cloe, Annia subió las escaleras y tocó la puerta. Cloe abrió con una sonrisa amplia, abrazándola antes de invitarla a pasar.
-¡Annia! Qué alegría verte. Pasa, pasa- dijo Cloe, cerrando la puerta detrás de su amiga.
-Gracias, Cloe. Necesitaba hablar contigo- respondió Annia, quitándose la chaqueta y dejándola sobre una silla.
Cloe la guió hasta el sofá, donde se sentaron cómodamente.
-Cuéntame, ¿qué es lo que te preocupa?-preguntó la muchacha, estudiando el rostro de su amiga con curiosidad.
Annia suspiró profundamente antes de empezar a hablar.
-Es sobre Kyle- dijo ella, Cloe la observó intrigada- Sé que dijiste que él no era un hombre de compromisos, pero las cosas han estado... cambiando un poco entre nosotros- la muchacha frente a ella alzó una ceja- No puedo dejar de pensar en él y en cómo se ha comportado últimamente. Es tan atento, tan... diferente de lo que me habías advertido- dijo Annia con su voz llena de confusión y esperanza.
Cloe hizo una mueca, interesada por los nuevos detalles.
-¿Diferente, dices? ¿En qué sentido?- preguntó, queriendo entender mejor la situación.
-Bueno, hemos pasado mucho tiempo juntos. Me llevó a una escapada de fin de semana y fue maravilloso. Nos reímos, hablamos, incluso me salvó de una caída muy torpe - explicó Annia, sonrojándose al recordar esos momentos.
Cloe sonrió, notando el brillo en los ojos de su amiga.
-Parece que Kyle realmente te importa, Annia. Y por lo que dices, él también está mostrando interés. ¿Qué más ha pasado?- preguntó, alentando a su amiga a continuar.
Annia tomó un sorbo de su té antes de seguir hablando.
-En esa escapada, nos besamos. No fue algo planeado, simplemente pasó. Y desde entonces, no puedo dejar de pensar en él. Pero también tengo miedo de lo que pueda pasar. No quiero hacerme ilusiones si al final todo esto del matrimonio es solo una fachada- confesó, con su voz temblando ligeramente.
Cloe la miró con ternura, comprendiendo la encrucijada en la que se encontraba su amiga.
-Mirá, Annia, creo que Kyle está demostrando algo más que una fachada. Si realmente está siendo tan atento y considerado, puede que sus sentimientos sean genuinos. Tal vez lo que dijimos sobre él en el pasado ya no se aplique ahora- dijo, tratando de darle ánimos.
Annia suspiró, sintiéndose un poco más aliviada por las palabras de Cloe.
-¿De verdad crees eso? ¿Crees que podría intentar hacer esta relación real?- preguntó, buscando la aprobación de su amiga.
Cloe asintió con firmeza.
-Sí, Annia. Creo que vale la pena intentarlo. Tienes que seguir tu corazón y ver a dónde te lleva. Y si Kyle te hace sentir bien y te trata con respeto, entonces deberías darle una oportunidad. No todos los hombres son iguales, y la gente puede cambiar -dijo, sonriendo cálidamente.
Annia se sintió más segura al escuchar el consejo de Cloe.
-Gracias, Cloe. Necesitaba oír eso. Voy a intentarlo. Quiero ver si esto puede ser algo real- dijo, determinación brillando en sus ojos.
Cloe la abrazó con fuerza, feliz de ver a su amiga tomar una decisión valiente.
-Siempre estaré aquí para apoyarte, Annia. Haz lo que creas que es correcto para ti - dijo, soltándola suavemente.
Las dos muchachas pasaron el resto de la tarde hablando de cosas más ligeras, riendo y disfrutando de la compañía mutua. Cuando llegó el momento de irse, Annia se despidió de Cloe sintiéndose más fuerte y decidida.
Al llegar a casa, Annia encontró a Kyle en la sala, revisando algunos papeles. Al verla, él sonrió y dejó a un lado lo que estaba haciendo.
-Hola, Annia. ¿Cómo te fue con Cloe?- preguntó, genuinamente interesado.
Annia sonrió, sintiéndose más confiada.
-Fue genial. Hablamos de muchas cosas y me ayudó a aclarar algunos pensamientos- respondió, acercándose a él.
Kyle notó el cambio en su actitud y levantó una ceja, intrigado.
-¿Ah sí? ¿Y qué pensamientos son esos?- preguntó, sonriendo.
Annia se sentó junto a él, tomando su mano.
-Kyle, quiero ser sincera contigo. He estado pensando mucho en nosotros y... No puedo ignorar lo que está pasandome, y quiero intentarlo de verdad. Quiero ver si esta relación puede ser algo más- dijo, su voz sonó firme pero suave.
Kyle la miró, sorprendido y conmovido por sus palabras. Apretó su mano con suavidad.
-Annia, yo también he estado pensando en eso. No quiero seguir fingiendo. Quiero intentarlo de verdad contigo. Mereces saber la verdad, y creo que deberíamos darnos una oportunidad real- respondió, su voz llena de sinceridad.
Annia sintió una ola de alivio y alegría al escuchar sus palabras.
-Gracias, Kyle. Eso significa mucho para mí. Vamos a intentarlo, entonces. Vamos a ver a dónde nos lleva esto- le dijo, sonriendo.
Kyle la abrazó, sintiendo que finalmente estaban en el mismo camino.
-Vamos a hacerlo, Annia. Juntos- respondió él, susurrando en su oído, el cuerpo de la muchacha se estremeció.
Esa noche, se quedaron abrazados en el sofá, hablando de sus sueños y esperanzas para el futuro. Habían decidido enfrentar la realidad juntos como una pareja real, y con esa decisión, ambos sabían que estaban comenzando un nuevo capítulo en sus vidas.