LA MESERA DEL BAR.

SOLEDAD

Subo a mi recámara casi a punto de desfallecer, mi cuerpo tiembla de deseo por Ariel.

Pero me entristece no saber que pasa por su mente, ya que no me ha querido decir nada dice que no lo entendería, solo sé que me confunde cada día más por momentos cuando veo sus ojos y ver como me mira siento que realmente me ama y me desea, pero después sin motivo alguno me rechaza.

No logro entender que sucede, que tengo para que él no pueda fijarse en mí. No sé cuánto tiempo más soporte esta situación, ya que ahora no hay nada que nos una no sé si es buena idea que yo siga viviendo aquí en la villa.

Aunque Ariel me dijo que siguiéramos con la farsa de nuestro matrimonio, yo sé que entre él y yo ya no hay nada, y el estar aquí solamente me confunde y aunque, la villa Smith es muy hermosa llena de lujos y comodidades no es lo que realmente yo deseo yo muchas veces o casi siempre me siento tan sola, más sola aun, que cuando vivía en mi pequeño departamento, aquí es como si fuera un mueble más.

No se a donde es que sale, Ariel cada noche, pero casi siempre vuelve ya muy noche y oliendo a alcohol, yo supongo que sale a satisfacer sus necesidades con su amante.

Cosa que me hace sentir triste, yo sé que no tengo derecho a estar así, pero no lo puedo evitar, no sé cómo no sé cuando, pero se metió en mi corazón y es un sentimiento que es más fuerte que yo.

Los días han pasado y aunque soy la presidenta de la empresa Duarte y asociados, Ariel no me ha permitido que este completamente allá, entre David y yo llevamos la administración para no tener que ir a diario voy únicamente unas dos veces por semana los demás días estoy en mi escritorio en la oficina de Ariel, y desde allí me hago cargo de todo.

No sé por qué Ariel está empecinado en tenerme allí, yo preferiría irme de lleno a las oficinas de la empresa que dirijo así me evitaría el mal rato de tolerar a la odiosa de Brenda que se la quiere pasar metida aquí con el pretexto de trabajar aunque a leguas se ve que no tiene idea de que hacer en este lugar lo único que hace es coquetear y tratar de metérsele a Ariel a como de lugar.

Casualmente, el día que Ariel no está, ella también desaparece no le importa el trabajo para nada, y Aunque Ariel únicamente la ve como a una amiga yo sé que ella busca de alguna forma hacer que se fije en ella.

Siempre le está recordando lo bien que la pasaban cuando eran niños y que él le decía que estaba enamorado de ella y que cuando crecieran se casarían.

Es tan hipócrita, fingiendo que es la amiga que lo comprende y siempre está allí para él.

No sé cómo es que Ariel no se da cuenta de que es una hipócrita y algunas veces me parece que asta disfruta el coqueteo de Brenda asía él.

Yo trato de disimular, pero la verdad es que muero de celos, y no soporto verlo aunque muchas veces intento salir de la oficina para no tener que estar allí. Ariel casi siempre me lo impide alegando que ay trabajo urgente.

Nunca a pasado nada entre ellos más que simple coquetería, pero aun así para mí es muy incómodo.

Lo bueno es que David, siempre está allí para mí nos hemos vuelto muy cercanos él es como un hermano para mí, lo quiero mucho y no niego que muchas veces lo he utilizado para tratar de darle celos a Ariel, aunque no me lo ha dicho sé que se da cuenta perfectamente de lo que hago y él me sigue la corriente.

No sé si realmente lo logro,pero es evidente como se molesta Ariel y trata de alejar A David de mí, pero ambos siempre encontramos alguna escusa para estar juntos.

A Andrés y a Camila muy poco los veo, ya que David se encarga más de llevar los tratos con ellos. Aunque no me confío yo sé que no se van a quedar con los brazos cruzados así nomas.

Con el señor Alejandro no he vuelto a tener trato, creo que casi siempre está viajando aparte de que él vive en su propia casa y supongo que con Ariel no se frecuentan mucho o de lo contrario lo vería más seguido.

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Ariel

Entro ami oficina y me sorprende bastante ver que mi padre se encuentra allí, me da la impresión de que lleva bastante rato esperando.

- Ariel hijo, me alegra que por fin ayas llegadas.

- Hola papá has estado esperando mucho rato.

Un poco me dice, - A que se debe tu visita le pregunto tranquilo mientras tomo mi lugar y hablo a la secretaria para que me traiga dos cafés le pregunto ami padre si desea algo más, solo me dice que así está bien.

-A que debo el honor de tu visita. Le digo mirándolo a los ojos tratando de descifrar en su rostro el hecho de tenerlo aquí; sin embargo, se mantiene tranquilo sin mostrar ni una señal de nada.

Toma la taza de café y le da un pequeño sorbo, mientras me dice que ha hablado con el abogado Montes y le notificó lo de mi divorcio con Camila o en su caso con Soledad.

Padre yo no podía seguir casado con alguien que realmente no es quien creíamos, y si vienes para hacer que cumpla con tu palabra y me case con la verdadera Camila, desde una vez te digo que eso no pasará.

Así que pierdes tu tiempo si es eso lo que pretendes.

El señor Alejandro baja su rostro y aunque odiaba reconocer que se había equivocado en esa ocasión lo hizo y le pidió disculpas a Ariel por obligarlo a casarse con alguien a quien ni siquiera conocía.

- No es eso a lo que vengo, y nunca aceptaría que volvieras a unir tu vida a la hija de Andrés, yo pensaba que era lo mejor para ti, pero ahora que sé cómo es nunca lo permitiría.

Hijo lo que realmente me tiene aquí es Soledad, ella es solo una víctima más de todo esto por favor no lo tomes contra ella no la culpes por haberte mentido.

Ella es una buena chica y si hizo eso es únicamente porque no tubo opción espero y la entiendas.

Ariel nunca se imaginó que su padre estaría allí para interceder por Soledad, pero en el fondo le agrado que su padre la viera con buenos ojos, ya que él también la apreciaba y tal vez poco apoco se estaba enamorando de ella aunque le costaba aceptar sus sentimientos hacia ella.

Ariel le dijo que no se preocupara por Soledad que él no la culpaba de nada al contrario, ahora que sabía todo él estaba ayudando a recuperar lo que un día fíe de su padre.

Andrés y Camila devén tener su merecido por todo lo que le han hecho a soledad. Y me encargaré de que no le vuelvan a hacer daño.

Dijo Ariel muy seguro de sí mismo.

Alejandro sonrió levemente pues en las palabras de Ariel él había descubierto que Ariel se había enamorado de Soledad, cosa que le dio mucho gusto, ya que lo que más deseaba era verlo casado con una buena mujer.

Sin embargo, ya había aprendido la lección y ya no se entrometería más en las decisiones de su hijo.

Al saber que Ariel no estaba molesto con Soledad, Alejandro se sintió más tranquilo, y le dijo a Ariel que por Andrés y camila no se preocupara que él ya se había encargado de ponerlos en su lugar por atreverse burlarse de él, mandando una novia sustituta.

Ariel río de medio lado y le dijo a su padre.

- me alegra que haya sido así, o de lo contrario me hubiera casado con la pesada de Camila.

- Tienes razón hijo, Andrés y Camila por su egoísmo terminaron haciéndote un favor.

El semblante le cambio a Alejandro tornándose un tanto pensativo, y le dijo a Ariel.

- Que va a pasar con Soledad ahora que ya se divorciaron.

- Ante la sociedad seguimos siendo esposos, me divorcié para evitar que Andrés pudiera proceder legalmente contra ella ahora que Soledad tiene las acciones de su empresa.

No te preocupes ella estará bien yo la ayudaré creo que es lo menos que puedo hacer por ella.

No permitiré que le vuelvan a hacer daño.

Ariel adoptó un tono serio y firme en cuanto a su decisión de cuidar de Soledad.

- ¡Es solo eso!, ¿o acaso hay algo más, acaso tú te enamoraste de Soledad ahora que han estado juntos?.

- ¡Por su puesto que no!, es más yo nunca he tocado a Soledad, nuestra boda solo ha sido una farsa para darte gusto padre.

Y si he decidido ayudarla es porque nadie merece pasar por lo que ella ha pasado.

Ariel se molestó un poco con las insinuaciones de su padre, que aunque le acababa de decir que no se metería más en su vida, no dejaba de husmear en sus asuntos.

Alejandro se disculpó y aprovecho para despedirse de Ariel, ya que al día siguiente saldría de viaje.