Una Nueva Oportunidad

Saray se encontraba tomando el té tranquilamente, mientras leía unos papeles relacionados con las contrataciones de las personas que estaban en la mansión, además estaba trabajando en conseguir buenos profesores para los niños, tendría que acondicionar una o dos habitaciones grandes para que los niños puedan comenzar a estudiar, también tendría que conseguir magos que estén dispuestos a enseñarle magia a los niños y talvez ella tome algunas clases, suspiro cansada, para luego tomar otro sorbo del té, se sentía un poco incómoda como si alguien la estuviera viendo fijamente, así que levanto la vista encontrándose con una mirada azul muy penetrante, decidió tomar otro sorbo del té, y dejo la tasa en la mesa para disponerse a preguntar que era lo que pasaba.

Saray: que es lo que se le perdió príncipe

Lucas:nada, pero sabías que de tanto suspirar te vas a arrugar

Saray: gracias por la data pero no me interesa, que es lo que en verdad necesita príncipe

Lucas: no me vas a ofrecer que tome asiento

Saray: bueno, desea tomar asiento su majestad

Lucas: viste cuando quieres puedes ser muy educada

Saray: no cambies el tema que es lo que necesitas

Lucas: siempre tan directa así nunca te vas a casar

Saray: por si se te olvido todavía no tengo la edad necesaria para un matrimonio, además que aquí no importa el amor sino los beneficios que obtengas por tu matrimonio

Lucas: cierto bueno a lo que venía, mi padre le mando una carta al tuyo

Saray: como, que es lo que decía esa carta

Lucas: tranquila, yo me encargué de explicarle todo a mi padre y con él tomamos la decisión de que me haría pasar junto con mi hermana como los hijos de un duque, que fue asesinado

Saray: y con eso ustedes pasarían de percibidos, además que se podrían quedar aquí sin ningún inconveniente

Lucas: exacto, pero hay una pequeña cosita que tendrías que firmar

Saray: que tendría que firmar príncipe

Lucas: los papeles de que aceptas ser mi prometida

Saray: tu prometida, a que se refiere príncipe

Lucas: a que si mi fachada se desmorona tendría la escusa de que tengo una prometida, además de que no confió del todo en ti así que ese sería mi seguro por si llegaras a intentar Acer algo

Saray: yo tampoco confió en ti, dime quien confiaría en un hombre que entro al cuarto de una mujer sin su permiso

Lucas: sigues enojado por eso

Saray: así es

Lucas: bueno, ten

Saray: que es esto

Lucas: son los papeles para lo del compromiso

Saray: sabes que esto no tiene valor

Lucas: porque lo dices

Saray: porque tendría que tener la firma de mi padre o del familiar que este a cargo de mi

Lucas: no te preocupes tiene la firma de tu padre y antes que comiences con tus preguntas, hace años nuestros padres hicieron un acuerdo matrimonial pero no pusieron el nombre de ninguno de sus hijos por lo que mi padre ahora decidió colocar nuestros nombres eso es todo querida, léelo y luego fírmalo

Saray: ten

Lucas: ya los firmaste sin leerlos

Saray: en realidad los leí mientras explicabas lo de las firmas

Lucas: sabes que a partir de ahora y en adelante eres mi prometida

Saray: si lo sé, pero también sé que si ambos decidimos romper el compromiso nadie podrá decir nada sobre nuestra decisión

Lucas salió de la habitación un poco confundido pero dispuesto a enviar los papeles a su padre, talvez había conseguido una prometida de una forma rara, pero sabía que no se arrepentiría.