Cassandra ha sufrido mucho a manos de su madre, que la maltrata desde la infancia, hasta que ya no puede más y decide escapar, perdiendo su trabajo y quedando en la calle.
Cass, el apodo por el que prefiere ser llamada, recibe una oportunidad para trabajar como limpiadora en un gran hospital de la ciudad. Este hospital pertenece a dos médicos ricos y exitosos que también han pasado por muchas dificultades en la vida y deciden ayudarla hasta que pueda estabilizarse.
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Capítulo 14
Liam
Subí las escaleras hacia la habitación de Cass. Toqué la puerta y nada, toqué de nuevo y aún nada, así que decidí abrir para ver si estaba todo bien. Pero tan pronto como abrí la puerta, me encontré con ella saliendo del baño solo con una lencería blanca cubriendo su cuerpo y la toalla en la cabeza. Fue imposible no mirar, esa piel clara, cabello largo y húmedo, ojos azules que se abrieron al instante al verme.
Tampoco dejé de notar algunas cicatrices en su vientre, piernas y un poco debajo de sus senos. Eran cicatrices grandes, no había forma de no notarlas.
Cass: ¿Qué haces aquí?
Dijo finalmente, tomando la otra toalla que estaba en la cama y cubriendo su cuerpo.
Liam: ¿Qué son esas cicatrices?
Dije entrando en su habitación y acercándome a ella.
Ella me miraba asustada pero no dijo nada.
Liam: ¿Quién te lastimó, Cass?
Cass: Eso no importa, por favor solo sal de aquí.
Asentí y me fui retirando, por más que haya sentido curiosidad y enojo al ver aquello, pero no iba a meterme de esa forma.
Liam: La cena está lista. Tan pronto como puedas baja.
Dije ya saliendo de la habitación.
Bajé a la cocina aún pensativo, y solo me di cuenta de que ya había llegado al piso de abajo cuando Theo me llamó.
Theo: ¿Liam?
Liam: Hola.
Theo: ¿Qué pasó?
- Pareces estar en otro planeta.
Liam: Ella tiene cicatrices en el cuerpo, Theo, alguien la lastimaba y la lastimaba muy seriamente.
Theo: ¿Cómo así? No vi ninguna cicatriz en ella.
Liam: Es en el vientre, en los muslos y debajo de los senos, con ropa no hay forma de verlas.
Yo todavía estaba perdido en pensamientos, solo el hecho de pensar en alguien lastimándola me dejó en shock e iracundo.
Theo: ¿Cómo es que viste esas partes del cuerpo de ella, Liam?
Parece que su pregunta me sacó de mi trance. Su tono acusatorio debe haberme ayudado a despertar.
Liam: Toqué varias veces la puerta de su habitación y ella no abrió, así que entré.
Theo: ¿Y la viste desnuda?
Él habló incrédulo conmigo e incluso un poco enojado.
Liam: Ella no estaba desnuda, estaba en lencería.
Theo: LIAM.
Liam: Vete al diablo, Theo.
Cassandra
Apenas tuve tiempo de asentir sobre la cena y él ya había salido de allí, dejándome sola nuevamente.
La mirada de él sobre mi cuerpo me dejó desconcertada, era como si sus ojos me quemaran. Nunca me sentí así antes, fue algo irreal. Pero debo ser horrible en realidad, así como mamá decía, ya que incluso viéndome casi desnuda, él reparó solo en mis cicatrices y por algún motivo eso me entristeció.
Mi madre siempre me dijo que yo era fea y que tendría suerte si algún día me casara porque difícilmente un hombre me querría, y ahora viendo la forma en que él me miró y habló de mis cicatrices pude notar que ella estaba en lo cierto.
Me vestí y bajé a cenar y al llegar abajo me encontré con los dos en la cocina conversando seriamente, pero tan pronto como me vieron cortaron el asunto.
Cass: ¿Está todo bien?
Theo: Todo.
- Siéntate, vamos a cenar.
Nuevamente Theo me sirvió, pero esta vez con menos cantidad lo que agradecí inmensamente porque no iba a aguantar comer la misma cantidad que comí en el almuerzo.
Cass: Estaba pensando allá arriba.
Dije después de algunos minutos de un silencio incómodo.
Los dos se detuvieron para prestar atención a lo que yo decía.
Cass: No sé qué hizo que ustedes me ayudaran. Al principio pensé que podría ser porque querían algo más, pero ahora que sé que no me miran así, lo agradezco, desde el fondo del corazón agradezco que me ayuden y cuiden de mí.
- Nadie nunca actuó de esta forma por mí.
Ambos me miraron confusos.
Theo: No necesitas agradecer pero...
- No entendí.
Cass: ¿No entendiste qué?
Theo: No sé cómo decir esto sin parecer extremadamente equivocado.
Liam: ¿Cómo así que no te miramos así y tampoco queremos algo más?
Me asusté en ese momento con la frase de Liam y Theo lo miró con semblante enojado.
Cass: ¿Us... ustedes me trajeron aquí pensando en ganar algo a cambio?
Theo: Claro que no Cass, nuestra ayuda fue de corazón. Pero es que tu frase fue extraña, solo eso.
Cass: Vi la forma en que Liam me miró y percibí que tal vez haya juzgado mal las intenciones de ustedes, por eso pido disculpas.
Liam: ¿De qué forma te miré?
Theo parecía curioso y Liam confuso.
Llené mi boca de comida y me quedé mirando el plato, me dio vergüenza responder.
Liam: No vas a huir de la respuesta solo porque estás comiendo.
Tomé valor, tragué la comida y me puse a hablar.
Cass: Mi madre siempre me dijo que yo era fea, rara, que tenía senos muy grandes y la cintura delgada, lo que no combinaba con mi cadera ancha tampoco. Que para ser bonita solo naciendo de nuevo.
Vi las manos de Liam cerrarse en puño mientras me encaraba.
Cass: Así que cuando Liam por accidente me vio en la habitación solo en lencería y reparó solo en mis cicatrices y no en mi cuerpo, me di cuenta de que necesito conformarme con la forma en que soy y también los juzgué mal en cuanto a sus intenciones.
Liam: Cassandra, calma.
- Primero, eres hermosa, hermosa para el carajo, y si no miré tu cuerpo así como dijiste, fue por respeto a ti, aunque sí me haya dado cuenta de lo hermosa y sabrosa que eres para el carajo.
Theo: Liam.
Liam: Estoy siendo sincero, ué.
Le dijo al hermano y en eso Theo se puso a hablar conmigo, y yo ya estaba atónita y roja de vergüenza. Pero no puedo negar que amé cada palabra.
Theo: Independientemente de lo que te hayan dicho, para mí eso no pasa de envidia de la mujer perfecta que eres.
- Cassandra, eres una mujer hermosa.
No pude contener la sonrisa. La verdad es que me hago la fuerte, pero ya sufrí demasiado y hay cosas que no quiero pero termino creyendo, mi madre siempre supo manipularme.
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