Kari Hunt.
Recuperar el poder que alguna vez tuvo su familia que cayo en desgracia, pero cuando se dio cuenta, ya estaba envuelta entre tres príncipes.
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Registros
Después del almuerzo, el príncipe me acompaño hasta la biblioteca imperial.
Me despedí del príncipe Draven.
Como siempre tomo mi mano.
"No olvide que mi carta llegara pronto".
"Además, tenemos que verificar el plan que se llevó a revisar".
Asentí.
"Sobre eso".
"Le enviare tambien una carta para hablar sobre eso".
El príncipe Draven me interrumpió.
"Es tema de nosotros tres, asi que debemos tratarlo entre todos".
"¿No crees?".
El príncipe sonrió.
"Si, eso mismo creo".
Respondí.
Los tres príncipes fueron los que me ofrecieron ese contrato, asi que tiene razón de que tenga que tratarlos con ellos.
Me dio el beso en mi mano.
"Nos vemos después".
"Hasta luego, alteza".
Camine hacia la biblioteca para ver de que se trataba la hoja que se refirió el príncipe.
Al entrar parecía que hoy estaba cerrada para el publico.
"Señorita Hunt".
"Por aquí por favor".
Uno de los encargados de la biblioteca se acerco para guiarme a la recepcion.
"Bueno, como apenas abrimos la biblioteca a la nobleza, hemos ido mejorando las restricciones de pedido de libros".
El asistente comento.
"No es algo urgente, de hecho pronto iba a venir a renovar el prestamo del libro".
¿No era urgente?.
Mire al asistente con un rostro extraño.
De todas formas llene el documento.
"Tambien, el príncipe Draven ha dicho que le demos acceso a los antiguos registros".
El asistente comento.
"Si, porfavor".
Dije entregando el formulario, la puerta de la biblioteca imperial se abrió.
El príncipe Ozul entro para acercarse.
"Le enseñare los registros".
El príncipe dijo tranquilamente.
El asistente se levanto volando y caminó rápidamente para abrir la sala que estaba hasta la parte mas escondida de la biblioteca.
El príncipe Ozul camino conmigo hasta la sala.
Cuando note, vi demasiados libros en los alrededores.
"¿Aquí se guarda cada historia de cada familia?".
"Si".
Me sorprendi, los libros apesar de ser viejos estaban en un hechizo de conservación.
"Aquí".
El príncipe Ozul me extendió el libro de la familia Hunt y luego el libro de la familia Van.
"Es más fácil si un miembro de la familia imperial te lo entrega".
Asentí tomando los libros.
"¿Puedo preguntar algo?".
El asistente se alejo para darnos espacio.
"Pregunta".
Dijo acercándose a la mesa y señalando el lugar a un lado.
"¿Preguntarás el porque hacemos esto?".
El mismo sabia que iba a preguntar.
Asentí con la cabeza.
Eso era.
El suspiro levemente.
"Por que queremos".
"No hay otra respuesta".
El príncipe Ozul respondió.
Me quede sin palabras al escucharlo.
"Ven".
Al final me senté a un lado de él.
Quería preguntar varias cosas mas, pero era mejor dejarlo asi.
Por ahora aceptaré eso.
"De acuerdo".
Dije, tome el libro de mi familia para leerlo.
Empecé a leer el tipo de personas que eran.
Tipos realmente poderosos.
Entonces hace tres generaciones atrás.
Empezaron a gastar dinero en apuestas.
Apuestas grandes como las minas, las tierras.
"Vaya".
Dije.
"Estos idiotas".
Lo que miraba no tiene sentido.
Entonces, el príncipe tomo el libro de Van y señalo el mismo tiempo.
"..."
Los bienes de Van crecian mientras los de Hunt desaparecieron.
El marquesado de Van, junto con otro ducado que ya no existe.
Me quede sorprendida.
Empecé a comparar y solo tome nota mental de lo que estaba leyendo.
El asistente regreso con una bandeja de té y de bocadillos.
"Alteza".
Voltee a ver al príncipe Ozul que se había quedado en silencio.
"¿Si?".
"Estafaron a mi familia".
"Y bien bonito".
Me desanime.
"Por eso debes de cuidarte".
El príncipe comento, el asistente que seguía acomodando las tazas de té en la mesa se quedo como piedra y miro al príncipe con extrañeza.
Luego se alejo como si no hubiera querido escuchar nada.
Seguí leyendo los documentos tomando notas mental.
"Según aquí, ¿Por que le ganaron cada una de las apuestas?".
Dije entrando en pánico.
"No, mas bien".
"¿Como es que los registros dicen eso?".
Todo estaba bien explicado como si estuviera viéndolo frente a mi.
El príncipe Ozul hizo una expresión divertida.
"Por que, para nosotros que somos familia imperial, tenemos que registrar como cae una de las familias que se consideraban mas cercanas a nosotros".
Asentí estando de acuerdo.
Seguí mirando los documentos de cómo caía la familia en la que nací.
Termine suspirando pesadamente.
Y al final hace 18 años las deudas fueron pagadas como remuneración de matrimonio.
Cuando mis padres se divorciaron, la familia de mi madre pago la mayoría de las deudas como compensacion.
'Al menos hizo algo bueno'.
Comente mirando el libro.
"¿Tienes alguna duda?".
El príncipe Ozul pregunto y negué con la cabeza.
"Ahora se que mi padre se decepcionara, mas porque el actual marqués era joven cuando eso paso".
"¿Que le habrán hecho a mi familia para que se perdiera tanto?".
Pregunte.
No era normal que eso pasara, es para que se hubieran detenido en cualquier momento, incluso alguien mas tomando el control para que la familia no cayera.
Todo es tan extraño.
Suspire.
Fue cuando me di cuenta por una ventana que ya se había hecho de noche.
"¿Que hora es?".
Pregunte incrédula.
"Tarde".
Dijo.
"Lo siento por tardarme, distraje a su alteza con mis cosas".
El príncipe Ozul nego.
"Le estan preparando una habitación para pasar la noche".
El príncipe dijo de repente.
"¿Que?".
"Creo que si me apuro, podría regresar a casa".
Dije, no creo que sea tan tarde.
Caminamos hacia la salida de la biblioteca.
El príncipe Dusk estaba apunto de entrar.
"Vengo por ustedes, padre dice que cenaremos juntos ahora que tenemos una vista".
"Y tambien se le ha enviado una carta al padre de la señorita Kari, avisando que tendrá una cena con nosotros".
Dijo con una sonrisa divertida y sus ojos de medias lunas.
Abrí los ojos en par al escucharlo.
¿Una cena con todos los miembros de la familia imperial?.
"Vamos".
El príncipe Dusk se acerco frente a mi para saludarme.
"¿Ha sido buena su lectura?".
Pregunto con curiosidad.
"Si, gracias".
Respondí.
"Me alegro".
"Vamos".
Los dos me llevaron a una sala de estar.
deben de contarle, porque ella fue feliz pero ellos siempre la esperaron, y es justo que a pesar de todo logré ser felices con ellos también
y que bueno, ella lo prometió también