¿Aying estas dispuesta esperar tanto tiempo? ¡Una vida por miles de vidas! ¿Aying como podrás crear tu destinado? “vivirás en el mundo pasando peligros tu prometido te engaño te lanzo para que murieras has vivido ahora te vengarás” Seis hombres guapos están dispuesto a seguir a Aying pisotearás al cabron y a su amante, matará a todos los dioses que aniquilaron su clan. ¿Tío puedo seguirte? Un hombre de túnica púrpura está parado en la cima de un árbol mirando con indiferencia la figura de la joven—¡solo mátame Aying! Aying apuntó con un arco plateado al hombre sobre la cima de la copa del árbol—¡solo mímame tío!
NovelToon tiene autorización de Tania5 para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capítulo 13 vive
Emilia que había acabado con los pájaros dejó de sonreír al ver la pequeña figura corriendo precipitadamente al frente—¿quieres escaparte? Yo acaso te lo e permitido, si es así solo puedes irte si mueres—habló con arrogancia, sacó una flecha preparándose para disparar directamente hacia el frente.
Los pequeños pasos de Aying resonaron como castañas se debe a que usos pequeñas botas tiene cascabeles.
—¡pollo crea un escudo!—gritó en voz lechosa.
El pajarito agitó sus alas, un escudo blanco apareció protegiendo sus manos que se han cruzado.
—“Esta es la única salida, en este lugar horrible hay una ilusión este lugar puede llegar a fuera” no falta poco ¡casi llego!—murmuró corriendo a toda velocidad.
Aying que corría a gran paso no se dio cuenta ya de la flecha que se acercó a su cuerpo hasta que la flecha atravesó su hombro.
—¡ugh!—gimió de dolor mientras que su cuerpo cae al suelo.
La sonrisa siniestra se dibujó en el rostro de Emilia cantando una melodía alegre—¡vayan mis hermosos lobos! Maten a esa mujer—susurró estirando su mano con elegancia.
Los lobos que aullaban de dolor al ya no sentir nada se levantaron sus ojos se volvieron negros al escuchar las palabras de Emilia al segundo corrieron atacando a la niña que está tirada en el suelo.
—¡maestra!—gritó el pajarito volando a gran velocidad.
La garra del lobo que se acercaba notó el escudo extraño pero el lobo también es especial han sido entrenados por la propia emperatriz son algo tanto misteriosos, la garra atravesó directamente el escudo del pajarito.
En el bonito rostro de Aying la sangre gorgoteo solo pudo mirar con incredulidad al pajarito caer al suelo.
—¡perdone maestra! Soy inútil en estos momentos estoy muy débil si no me hubiera protegido de esa emperatriz habría muerto antes—resonó con dificultad en la mente de Aying.
Los codos de Aying se arrastraron al suelo casi sangrando al llegar hasta el pajarito sus manos se estiraron temblando levemente sostuvo al pajarito.
—¡no es tu culpa! ¡Es mía! Duerme de ahora en adelante me encargaré yo—susurró colocándose el pajarito en el pecho.
Una luz plateada absorbió al pajarito llevándolo directamente al cuerpo de Aying.
Los lobos no atacaron a Aying solo se detuvieron.
—¡imposible!—gritó una voz con locura.
Es Emilia quien observó todo lo que ha sucedido sus venas están casi visibles en su frente.
—¡Es un pájaro de contrato! Ese pájaro lo vi, la emperatriz lo tenía, se supone que eso era originalmente mío—reclamó, apretó sus puños sus ojos de intenciones asesinas miraron la figura en el suelo—¡bueno no importa! Ese pájaro morirá pequeña hermana, es tu muerte hoy ¡lobos ataquen!
El aullido se escuchó con furia, los lobos podían recordar vagamente que Aying fue la que mató a uno de su manada.
4 lobos saltaron mordiendo directamente cada brazo y pierna de Aying.
Aying no gritó solo soporto el dolor mordiéndose el labio con fuerza hasta sangrar.
—¡jajaja muere niña tonta!—se carcajeo.
La mente de Aying que se había vuelto borrosa recordó las palabras de su padre.
“Aying, aunque nuestro clan antiguo es especial tú eres única el líder de nuestro tu mente madura más rápido que la de nosotros cuando solo tenías 6 años fuiste capaz de cazar tigres sin temor ¿sabes que eso es casi imposible a esa edad? Mi pequeña Aying incluso si el mundo te quiere muerta nunca debes morir en el futuro a manos de tu enemigo, lucha, levántate, no tengas miedo papá te cuidará desde el cielo de la creación del universo es adonde regresamos cuando los del clan antiguo morimos sin reencarnación hasta extinguirnos solo vivimos una vez pero tú vivirás por la eternidad hasta que el universo reclama su creación más perfecta”
—¡yo viviré!—murmuró en su palma derecha una daga plateada apareció, sus ojos se volvieron fríos como un asesino con todas la fuerzas del mundo se liberó de la mordedura del lobo, sin piedad atravesó su ojo izquierdo.
El lobo aulló de dolor, esta fue la oportunidad perfecta para Aying, soltó la daga, la daga no cayó al suelo sino flotó hasta girar en espiral.
—¡ve!—susurró en una orden directa.
La daga salió volando atravesando a los lobos al segundo cayeron sin vida.
Una pequeña figura tambaleando se levantó con dificultad esos ojos que casi pierden el sentido de luchar se llenaron de luz infinita dispuestos a incluso sacrificarse para morir con el enemigo.
—¡si yo me lastimo, tú también—señaló al frente.
El cuerpo de Emilia retrocedió hacia atrás con un poco de nervios señaló—¿qué esperan? ¡maten a esa mocosa!
Los lobos corrieron rodeando a Aying para después saltar.
—¡uhm!—sonrió con maldad, la mano de Aying casi giró, esquivando al primer lobo que se acerba, el segundo lobo fue atravesado del cuello hasta morir.
Los lobos que se apresuraron usaron sus habilidades.
Aying corrió barriéndose sobre el suelo en rodillas los lobos que atacaron con su habilidad de velocidad chocaron entre ellos hasta salir disparados en rocas puntiagudas.
—¡uf!—exhaló de alivio al ver que han muerto.
—¿crees que esto es fácil?—le preguntó Emilia con una sonrisa siniestra.
Aying quien tocaba su pecho miró la sonrisa de la joven Emilia.
El cielo que se mantiene a un rojo se volvió a un más hasta caer lluvia de sangre, los rugidos hicieron que los sentidos de Aying se activaran.
—¡más pájaros del Apocalipsis!—se dijo a sí misma a haber aumentado su ojos con la habilidad de sentidos mejorados, su mirada terminó sobré la joven que viste de rosa—¡tu nunca tenías la intención de dejarme ir! Esperas que muera aquí, solo tengo 8 años ¿porque quieres matarme? ¿Que te hecho?—preguntó con ironía.
Aying al no escuchar hace sus palabras no hablo más, la figura rígida de Emilia cambió tan repentinamente en sus ojos se podían ver locura, celos e humillacion.
—¿porque?—susurró
—¿está demasiado loca?—se preguntó Aying mirando que Emilia continuaba susurrando.
La calma que se mantenía se volvió caótica, Emiliaia levantó la barbilla, las venas en su frente se marcaron.
sigue así, yo siempre estaré aquí para leer tus historias