Entre Tazas De Café .

... Al salir al patio veo como la abuela Jovina y el abuelo Marcial disfrutan del jardín, se ven felices aquí. Están sentados riendo.

Camino despacio hacia ellos y al verme la abuela Jovina empieza a llorar...

(Beatriz) No sabes cuanto añoro este momento... Los extrañé mucho.

(Abuelo Marcial) Nosotros a ti niña.

(Abuela Jovina) Cuéntanos como te trata la ciudad. Espera mi niña un momento, Marcial dame mi pañuelo de mi bolso. Hay mi niña estoy feliz de volver a verte.

(Beatriz) Abuela, estoy feliz muy feliz, pero díganme que se van a quedar aquí por un tiempo.

(Abuela Jovina) Mi niña Rebeca nos invitó a pasar unos días aquí, mientras arreglan nuestra casa.

(Beatriz) Me parece maravilloso. Yo estoy bien muy bien abuelos, y saben esa tranquilidad y bienestar se lo debo a ustedes dos por guiarme hasta aquí. La señora Rebeca, es un ángel al igual que ustedes, son mis ángeles que guían de mí siempre.

... Los vuelvo abrazar. Gracias a ellos estoy viva, gracias a ellos puedo sonreír.

(Rebeca) Bueno, pero porque no pasan, Jovina, Marcial su habitación están listas. Ya tendrán más tiempo de ver el jardín.

... Entramos y me cuentas que se quedarán algunas semanas, el abuelo Marcial, necesita descanso por el dolor de espalda que se va haciendo más fuerte y la abuela Jovina, ella me dice que tiene sus ahorritos y que los disfruta gastando en verme aquí a su lado.

Pero ni crea que voy a permitir que se gaste su dinero, no y no. Ahora que tengo un sueldo, soy yo la que los va a mantener quieran o no.

Me despido de ellos y junto a Rebeca nos vamos a la cafetería. El día está oscuro, parece que una lluvia nos espera.

(Marcial) Vamos vieja y deja de llorar, ya vez que la niña está bien aquí.

... Yo los abrazo y acompaño a instalarse en su habitación, sé que Rebeca les tiene mucho cariño, siempre quiso que vinieran a vivir aquí, pero los abuelos aman su tierra y vivir cerca al mar es su vida.

Los dejamos tranquilos y nosotros al trabajo, los chicos ya abrieron el local y Rebeca fue directo a la oficina a revisar el balance y hacer pedidos.

Mientras yo voy sacando porciones para trabajar con las galletas de vainilla y avena que haré hoy. Cristina limpia el local, mientras Sergio y Tenor ordenan la cocina para iniciar con el día de trabajo.

A pocos minutos de colocar el letrero que está abierto, los clientes van entrando y los pedidos empiezan a salir. Nosotros encantados de atender.

(Cristina) Amiga la misma tipa del otro día está en la mesa 14 y tiene una cara de enojada.

(Beatriz)... ¿La que vino con Santiago?

(Cristina) Ella misma. Dijo que quiere que la atiendas tú específicamente.

(Beatriz) Hay no sé que se trae ella y porque me tiene que llamar a mí. Crees que me deba ir.

(Cristina) Sabes que iré yo a ver su pedido y si lo rechaza, pues la jefa tendrá que bajar.

No podemos permitir que se atribuya su derecho de cliente para venir a molestarte.

Ahora vuelvo y tú sigue en la preparación de esa masa que ya huele a delicia.

... Cristina marcha a la mesa donde se encuentra la tipa... No entiendo que es lo que quiere de mí, Santiago le dejo en claro que jamás tuvo una relación con ella, pero bueno parece que no será fácil. Hay Dios no puedo creer que el amor tenga tantos conflictos...

Sigo con mi masa y de repente entra Cristina y me dice que la tal Alicia no quiere que la atiendas ella y se puso furiosa.

Cristina sube a buscar a Rebeca, pero yo no puedo permitir que esa mujer traiga sus problemas aquí.

Si quiere hablar conmigo que lo deje para otro lugar.

... Salgo y llego a su mesa, ya no voy a soportar más.

(Beatriz) Dime que pedido quieres...

(Alicia) No. No es ningún pedido es una advertencia, quiero que te alejes de mi hombre...

(Beatriz) Sí no vas a pedir nada del menú, da mejor que te retires ya.

(Alicia) Mira niñata tonta, no eres competencia para mí. Deja a Santiago te lo advierto.

(Beatriz) Bueno niña si, ya que a comparación de edad entre tú y yo, pues debes estar cerca a los 30 o 35 talvez, lo de tonta no lo soy. Y si Santiago jamás entabló una relación junto a ti a pesar de que tuvieron sexo, pues no es problema mío. No quiero que vuelvas aquí para hablar sobre cosas que no sean de un desayuno.

Y mira la puerta es tan ancha y está disponible.

... Me giro y la dejo roja por el coraje que acaba de hacer. Se para de la mesa con su rabia encima.

Rebeca me da una leve sonrisa y yo sigo con las galletas.

Bueno después del inconveniente de la mañana aquí todo marcha bien, quedan los últimos minutos para salir, vamos revisando las puertas y ventanas y que todo quede apagado a excepción de las máquinas de frío.

Estamos saliendo ... Cuando veo que hay un chico con un enorme ramo de rosas. Se va acercando ami... Santiago.

(Santiago) No quise molestar en el día, por eso vine cuando ya terminas tu trabajo. Señora Rebeca buenas noches, puedo llevarme a cenar a Isabella.

(Rebeca) Sí. Tuvo un día muy agotador y una cena la relajaría.

Bueno, chicos yo me voy, tengo los ojos pesados, cariño me avisas cualquier cosa por favor y tú me la cuidas mucho.

... Rebeca conduce su auto y con Santiago caminamos hasta un restaurante que está como a cuatro cuadras de aquí.

(Santiago) ¿Pensaste en mí?

(Beatriz) Sí. Creí que vendrías a la cafetería, hice galletas, pero como no llegaste las vendí todas...

(Santiago) No. Pero harás más para mi mañana verdad?

(Beatriz) No. Pero como si pensé en ti, te traje algunas galletas. Están aquí en mi bolso.

(Santiago) ¡LO SABÍA!

... Santiago me besa y yo estoy embobada con este hombre, su mirada tan hermosa y sexy a la vez, estoy tan enamorada...

(Santiago) Bueno amor gracias. Entramos aquí es.

... Y no puede ser ... Alicia está aquí, justo aquí. Pienso que me espero todo el rato, o quizás siguió a Santiago.

(Beatriz) Santiago es mejor que... Bueno mejor cenamos otro día...

(Santiago) Isabella no. Dime que pasa. Mm ya veo, si mejor vámonos de aquí... Te parece si vamos a comer a otro lado.

(Beatriz) Mejor pidamos pizza, Y así puedo descansar en tu departamento.

... En serio yo dije eso... Beatriz que estás haciendo.

(Santiago) Yo feliz de tenerte en mi casa. Que es lo que llevamos para la cena... Puede ser pasta, sushi 🍣 o quizás pollo frito, me encanta el pollo frito.

(Beatriz) Sí. Que sea pollo frito, también con guarniciones de arroz, papas y salsas.

... Vamos a comprar la cena y luego el taxi nos lleva hasta su departamento.

Santiago, deja yo lo hago, recuerda que aun tu brazo está fatal...

(Santiago) Que sí puedo... Recuerda que aún tengo el otro y está sano.

(Beatriz) Voy a lavarme las manos, ahora vuelvo.

... Entro al baño y me hago un moño alto, refresco mi rostro y salgo, Santiago tiene la mesa puesta nos sentamos a cenar entre risas y ocurrencias. Esto decirle queAlicia fue a la cafetería, no quiero recordar nada, fue un día lleno de trabajo, así que quiero cenar junto a él tranquilamente.