¿Quieres Ser Mi Esposa?

Ezequiel

Esa sábado por la tarde, Laura y yo habíamos recorrido seis casas en total, todas eran hermosas, pero la tercera me pareció más apropiada. Contaba con un inmenso patio, rejas altas al frente por delante, tenía un perfecto jardín y detrás un sitio de juegos. Con suficiente espacio para jugar a cualquier deporte.

La recogí durante el mediodía del departamento que comparte con su hermano y ahora estaba llevándola otra vez

_ ¿cuál te gustó más? _ le pregunté, mientras conducía.

_ la segunda ¿y a ti?

_ la segunda

_ ¿en serio? Te vi más ilusionado con la tercera _ me reí, ella era muy detallista y perceptiva _ ¿por qué no me dices tu opinión?

_ Dicen que las mujeres siempre tienen la razón más si están embarazadas _ Me estaba observando con el ceño fruncido, lo sabía sin mirarla.

_ ¿estás insinuando que nunca más discutirás conmigo?

_ no, ¡no lo haré!

_ no te creo..

_ Pruébame..

_ inútil _ me reí

_ intenta algo mejor, ya me acostumbré a que esa palabra salga de tu boca

_ bastard@, papanatas, troglodita, insufrible.. Idiota, imbécil _ negué sin contestarle disfrutando de su frustración _ ¿En serio no me responderás? ¿Estás con fiebre? _ tocó mi frente acercándose _ no.. Tu temperatura es normal, pero tú no estás normal

_ para llevarnos bien por nuestros hijos, uno de los dos tiene que ceder y lo haré yo porque tú nunca lo harías..

_ ja.. ¿Me estás llamando terca? Ves ya me estás insultando indirectamente _ me reí

_ no.. Estoy aceptando que me merezco tu maltrato

_ si te dejas maltratar y no respondes es muy aburrido

_ ¿significa que te gusta pelear conmigo?

_ quizás.. Siempre fue así nuestra relación, es extraño no intentar matarte con mis palabras, ya que no puedo hacerlo con mis manos.. Ahora que tengo a tus hijos menos. ¡Ya en serio! ¿Cuál comprarás?

_ la segunda..

_ ¿eres idiota? Debemos hablar y acordar si me das la razón todo el tiempo esto será un desastre. Dime por qué te gustó la tercera

_ el patio era grande y las rejas altas si los niños juegan con una pelota no la perderán y tienen espacio suficiente para recorrer. El piso está al mismo nivel desde el patio hasta las habitaciones, no se tropezarán. No tiene escaleras, las cuales son muy peligrosas...

_ es mejor que compres esa, mientras yo pensé en el estilo y la belleza, tú pensaste en nuestros hijos. Tienes una buena razón comprar la tercera.

_ ¿tú me estás dando la razón?

_ tus argumentos eran más válidos. Esto no sucederá siempre disfrútalo _ suspiró _ Somos patéticos, dos arquitectos comprando una casa diseñada por otro…

 ¿Le digo que la diseñe yo? No, mejor no. Estacione frente a su departamento, y la observé caminar hasta el ascensor, ¡ese traje rojo le quedaba tan bien! No podía evitar admirar su cuerpo. No, Ezequiel, esa mujer nunca dejará que la toques y es mejor no hacerlo, no quiero problemas.

Si los quieres

Me contradijo mi conciencia.

El viernes de la semana siguiente la casa ya estaba amueblada fuimos a ver el resultado, ambos elegimos lis muebles por mensajes porque no teníamos tiempo.

Laura consideró que debíamos agregarle unos detalles, más "personales" a la habitación de los bebés así que acordamos ir a comprar juntos. El sábado al mediodía la esperé en el estacionamiento del lugar que ella sugirió. No llegaba y comencé a preocuparme.

Marque su número, al mismo tiempo una pequeña mujer caminó hacia mí. Estaba vestida con unos pantalones negros y un enorme saco negro, cabello largo y lacio del mismo color, una gorra que combinaba lentes transparentes y barbijo blanco. Se detuvo frente a mí y habló

_ ¿no me digas que iras así? _ apuntó mi ropa y reconocí su voz

_ ¿Laura?

_ no, ¡soy Santa Claus!

_ ¿por qué estás vestida así? _ termine la llamada guardando el celular en mi bolsillo

_ ¿eres idiota? Tenemos a toda la prensa detrás de nosotros y me sales con esa pregunta. ¿Por qué viniste así?

_ ¿qué tiene de malo? ¡Siempre visto de traje!

_ ¡Exacto! Quítate el saco

_ ¿eh?

_ quítate el saco, y abre tu camisa ahora _ terminé obedeciendo.

Me dio su enorme tapado negro, quedándose con una manga larga negra, también me dio su gorra y los anteojos falsos, solo me quedaron los pantalones azules de mi traje debajo y me dio otro barbijo _ ¡qué sexy! _ exclamó entre risas, mirándome

_ no es gracioso _ protesté. Parecía un adolescente, holgazán

_ para mi sí _ dijo tomando mi mano para arrastrarme al interior del centro comercial.

Me reí ante su forma de actuar, parecíamos una pareja, que iba a comprar ¿Era normal que incluso así vestida me parezca tan hermosa? Mi preciosa Piggy