Entre Tazas De Café .
El hábito que tengo desde muy niña, es beber agua en la madrugada y bueno hoy no es la excepción.
Busco a ciegas mis pantuflas y bajo torpemente la escalera, logro llegar a mi objetivo y cuando estoy a punto de volver a subir, veo que la puerta principal se abre, ¡hay un tipo!
Me causa miedo, me escondo tras la mesa de la cocina y él sube lentamente, atrás de él hay otro hombre y viene armado, yo estoy inmóvil y no reaccionó, mi padre está dormido, entra en mí la angustia y lo que temía se da.
(disparos)
Mi madrastra baja y me llama. Dudo en salir y me quedo fría cuando la escucho hablar con el primer hombre. Me escabullo por la cocina y así logro salir al jardín corro lo más que puedo no miro atrás para nada. Veo que unas luces al parecer de linternas logran dar conmigo, los disparos vuelven, me agacho y pasos más allá me tropiezo como sea me levanto.
Logro escuchar las olas, estoy cerca del mar. Cuando un disparo me da y caigo, siento como otro disparo certero cae sobre mi hombro y me patean hacia el barranco.
... Estoy en un sueño donde mi cuerpo es como una tela frágil que se deja guiar por el viento, y este al soplar es ta frío que me encojo para abrazar la nada.
(Días después)
El sonido de mar se oye como una suave melodía dulce en su inicio y amarga en su final ese golpeteo cuando revienta una ola me da escalofríos, abro mis ojos lentamente y el olor a café tostado llenan mis fosas nasales.
Al abrir mis ojos, la luz me incomoda un poco, trato de sentarme, pero me duele el brazo y mis piernas.
(Jovina) ¡Hay niña! No te asustes y quédate quieta estas en buenas manos. Tranquila mi niña.
(Beatriz) Yo... Dígame en donde estoy y mi padre está bien, quiero verlo ahora mismo por favor ayúdeme me quieren matar unos hombres, quiero ver a mi padre.
(Viejo Marcial) No te asustes niña, hace tres días te encontré en la orilla del norte, pensé que estabas muerta y al acercarme a ti, vi que aún tenías pulso, débil, pero aún estabas con vida, te subí a mi lancha y te traje con mi mujer, ella se encargó de suturar tus heridas y te cuido hasta que hoy has despertado.
Quédate tranquila que aquí nadie te hará daño.
... Escuchar lo que dicen estas dos personas ya ancianas, hacen que mi corazón se encoja. Por lo que recuerdo sé que quisiera matarme y mi padre... mi padre está muerto.
Una lágrima se va deslizando sobre mi rostro maltratado por los golpes del mar. Me siento despacio y puedo notar el parche que hay en mi pecho casi cerca a mi hombro. Tengo mis rodillas con raspaduras y moretones. La anciana me trae un plato con sopa y me ayuda a tomarla.
(Beatriz) Gracias... Gracias por salvarme, no quiero causar más problemas y es mejor que me vaya.
(Viejo Marcial) A dónde iras... Aquí en el pueblo hace un día vinieron personas desconocidas a preguntar por una joven cita de cabello castaño y ojos celestes, llamada Beatriz Cárter.
Me imagino que eres tú... Yo no pude ver la foto, solo logré escuchar el nombre y bueno regresé a mi cabaña inmediatamente, la gente del pueblo al dar negativas, los hombres se marcharon en unas camionetas muy lujosas.
(Jovina) Cuéntanos mi niña que es lo que sucedió.
(Beatriz) Esos hombres entraron a mi casa y asesinaron a mi padre y mi madrastra está relacionada con todos esto. También quisieron acabar conmigo y sería bueno que crean que estoy muerta. Mi padre es la única familia que tenía. Mi madre murió hace cinco años.
Mi padre se casó con la arquitecta de la empresa colaboradora de mi padre. Se conocieron en un proyecto y luego se casaron. Mi padre jamás quiso tener hijos con ella así que se hizo una vasectomía. Sé que Milena Zarate, mi madrastra siempre añoro ser madre. Pero mi padre ya no quería un hijo más.
Todo iba tan bien hasta la noche en que paso todos esto y yo quiero que ellos piensen que me morí hasta poder saber que está pasando. Les pido por favor que no digan a nadie quien soy en realidad. Prefiero que crean que estoy muerta.
(Jovina)Cuénta con nosotros, ya está vieja con el tiempo aprendió a vivir con la muerte cada día. Y Marcial es un hueso duro de roer así que se quedará callado también, no es así Viejo.
(Marcial) Yo no vi ni se nada.
... Aquí viviendo en el pueblo, han pasado tres semanas, ya estoy recuperada y bueno he estado ayudando con la cosecha de café, que es a lo que se dedica Jovina en otro pueblo. Y el abuelo Marcial, como le digo yo, está en la pesca.
Hoy iré a presentarme a una cafetería de la ciudad Marfil, la dueña es conocida de Jovina, trabaja para ella desde hace años, si logro el trabajo podré ayudar a mis abuelos adoptivos, esas personas se han optado muy bien conmigo, me quieren y yo les he tomado bastante cariño.
Salgo temprano y la abuela Jovina me da la bendición, le doy un beso en su mejilla cálida y me marchó por el bus que me llevará a la ciudad, tengo poco dinero, me alcanza para el pasaje de vuelta y una que otro bocadillo. Aunque Jovina me envolvió algunos panes con jamón, siempre pendiente de mí.
Llevo puesto un vestido de flores azules y lilas, que la misma abuela me lo arreglo unos zapatos sencillos, pero para mi están bien.
Esta ciudad es muy bella. Busco la dirección y después de caminar algunas cuadras logro dar con la cafetería y está ubicada en un edificio lujoso y es bastante amplia. El olor del café mezclado con leche se puede percibir a distancia. Me paro en frente y las puertas se abren automáticamente. Entro y voy en busca de la señora Rebeca Valle.
Una señorita muy amable me recibe con una sonrisa ☺️.
(Cristina) Buen día, señorita, que desea para desayunar.
(Beatriz) No... Yo. Yo tengo una reunión con la señora Rebeca Valle. Aunque llegué un poco temprano, pero la puedo esperar.
(Cristina) La jefa llegará dentro de algunos minutos, pero la puede esperar aquí en una mesa. Mientras tanto le traerá un café para que la espera séa un poco amena.
... Le agradezco por su amabilidad y me siento a esperar para poder hablar con la señora Rebeca.
Miro como las personas viven tan ocupadas, entran piden su café otros se sientan sin despegar sus miradas de sus teléfonos. Y pensar que yo hace un mes también vivía así.
Aunque recordar me pone un poco triste. Mi padre siempre me llevaba a casa después de salir de su trabajo un vaso con café capuchino de vainilla y eso me fascinaba.
Soy Beatriz Cárter Molina, tengo 19 años, única hija del matrimonio entre Pablo Cárter y Maria Molina, ambos estudiaron en la universidad la misma carrera. Se enamoraron y tiempo después me tuvieron a mí.
Mi padre maneja una de las constructoras más reconocidas de la ciudad Perla. Y también se extienden sus proyectos a otras ciudades del país. Yo estaba estudiando para chef, pero con lo que he pasado tengo miedo y sé que aunque me han dado por muerta por lo que escuché en las noticias, pregunto que así sé siga creyendo y cuando ya no corra peligro y logré conseguir algo de dinero, poder regresar a mi ciudad y hacerme cargo de Milena Zárate, la mujer con la cual mi padre se casó.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 40 Episodes
Comments
Joaquina Garcia
excelente comienzo pienso que será una historia interesante
2024-08-23
5
Tita Reynoso
Buen comienzo de la novela en curso 😀
2024-08-15
5
Elizabeth Moreno
buen comienzo muy interesante
2024-07-20
4