Amor Contratado Para Ganar Una Elección

Tomás García es el director de Comunicación Política del equipo de campaña de Gabriel Larrea, aunque es joven sabe muy bien que es lo que se necesita hacer en cada caso, para asegurarse ganar una elección. Se ha pasado construyendo perfectamente la imagen del candidato presidencial; agradeció la salida de Augusto, porque entorpecía constantemente su trabajo; sin embargo, se le ha presentado una situación muy difícil.

...Tomás García...

El director de Comunicación Política camina por la oficina, llama a Gabriel y Lorena a su oficina urgente, enciende la televisión; y lo deja en una televisora, después de todo, la mayoría de los canales, hablaba de lo mismo, ahí está el presentador de noticias, señalando:

..."¿Quién es la misteriosa mujer con quien el candidato presidencial, Gabriel Larrea, aparentemente sostiene una relación romántica?...

...¿Es una relación formal o una aventura?...

...Esta misteriosa mujer visitó la casa de Gabriel Larrea y se retiró a altas horas de la noche, ¿vistiendo la ropa del candidato?....

...Será acaso que el respetable viudo ha decidido abandonar la soledad, y se ha involucrado con una hermosa mujer, o ¿es una simple aventura que lleva a la casa donde viven sus hijas?. ¿Será este el comportamiento que debe tener el próximo presidente del país?, hemos preguntado a su agencia de prensa, pero aún no tenemos una respuesta oficial"....

Se muestran imágenes cortadas de Lorena ingresando a la residencia Larrea, a las 6 de la tarde, vistiendo de una manera, y luego saliendo a la medianoche usando la chaqueta del candidato, además de transmitir el momento que ocurre esa cercanía que casi provoca un beso entre ambos.

- "(Dirigiéndose a Gabriel y Lorena) Quiero la verdad y solo la verdad, si están saliendo o no, y lo pregunto porque nos está estallando en la cara, será algo que pronto estará direccionado a la campaña electoral si no hacemos algo contundente para responder y salir airosos", expresó Tomás, necesita muchas respuestas.

Lorena miró a Gabriel, quien odia ponerla en esa posición, después de lo amable que ha sido, y esa horrible experiencia con su exesposo, debió suponer que algo así podría suceder.

- "Ella solo llevó los papeles que necesitaba, las niñas estaban muy insistentes, ella se quedó hasta que las niñas se durmieron...", explicó Gabriel cuando Patricia interrumpió ingresando repentinamente.

- "¿Desde cuándo están saliendo?", preguntó Patricia sorprendida.

- "No estamos saliendo, yo respeto mucho al señor Larrea", respondió Lorena.

- "Y yo respeto a la señorita Castillo, realmente lamento que esté en estás circunstancias por mi culpa", agregó Gabriel, le había dicho que la protegería y ahora la había puesto en boca de todo el mundo.

- "Si no salen cómo está vestida con tu ropa cuando salen, y luego parece que se iban a besar, no puedes tener la imagen de un descarado que tiene una aventura en la casa donde viven tus hijas, esto es grave para la campaña", dijo Tomás.

- "Todo tiene una explicación", dijo Lorena nerviosa.

- "Cuenten toda la historia, con todos los detalles, debe haber algo que podamos hacer y obtener una salida al problema", afirmó Patricia.

Gabriel y Lorena les contaron lo que había sucedido a detalle, Tomás García escuchaba con atención no solo las palabras, sino los gestos de los involucrados, y sospecha lo que la pareja no se ha dado cuenta.

Mientras Lorena y Gabriel están preocupados en cada extremo, Tomás se acerca a Patricia.

- "¿Ves lo que yo veo?", preguntó Tomás.

- "Hace rato", respondió Patricia.

Tomás sacó su laptop, necesita revisar algunas estadísticas, tal vez podían convertir lo ocurrido en una posibilidad.

- "Tengo una solución", dijo Tomás.

- "¿Cuál?", preguntó Gabriel.

- "Deben casarse", respondió Tomás con una seguridad absoluta.

Gabriel y Lorena los miraron incrédulos, que clase de broma cruel era esa, ellos no tenían ningún tipo de relación romántica, y se iban a casar, eso era una tontería se dijeron.

- "Exactamente, no es que se vayan a casar, pero darán la idea de casarse, mediante un compromiso formal. Mejorará la imagen de ambos, ella no será vista como una aventura y tú eres un hombre comprometido; una relación que dure hasta ganar las elecciones; luego alegaremos diferencias irreconciliables y quedarían como amigos. La opinión pública aceptará aquello con el tiempo. No hay mejor cuento en el ideario, que el de la Cenicienta y el príncipe; y no pretendo ofender, les conviene a ambos, ella tendrá un mejor círculo y podrá obtener mejores puestos de trabajo", explicó Tomás.

- "¿Una Cenicienta divorciada?", inquirió Lorena de forma sarcástica.

- "Mejor, Gabriel es un hombre sin prejuicios, es real y es su imagen, una mujer divorciada a quien es capaz de amar por su real valor, es el mensaje perfecto de volver a empezar, no deberías menospreciarte tu misma. Acaso, Gabriel, ¿no piensas que ella es una mujer maravillosa?", preguntó Tomás.

- "Absolutamente maravillosa", respondió Gabriel en automático y sin pensar.

Lorena lo queda mirando, cómo aceptar algo como eso, tiene miedo de creer que esa relación es verdad y terminar enamorándose de Gabriel Larrea, no quería volver a sentir su corazón romperse.

Por otro lado, Alberto está en el trabajo cuando sale la noticia del candidato presidencial Gabriel Larrea y la misteriosa mujer con quien parece sostener un romance, se queda absorto en la noticia, definitivamente es Lorena Castillo, su exesposa, quien está en los brazos del hombre del momento, uno de los hombres más cotizados del país.

Ver las manos de Gabriel en la cintura y espalda de Lorena le molesta grandemente, imaginar que aquel hombre pudiera acariciar, besar y hacer algo más con la mujer que por diez años estuvo con él enciende su rabia; va a su oficina y le da un puñetazo al escritorio.

Saca su móvil y timbra al número de Lorena, pero se encuentra fuera de servicio, "maldita sea" dice Alberto, era obvio que Lorena había cambiado de número; usa su equipo telefónico para comprar un pasaje de avión, esa misma noche viajaría a la capital, cree estúpidamente tener derecho a una explicación, y piensa tontamente en recuperarla; "nadie más que él tiene derecho a esa mujer", se dice a si mismo.