El Vaivén De La Vida

Cuando ya estuvieron de regreso, faltaba poco para la hora de comer, así que katri fue a su cuarto por un momento, y la siguieron su prima con su esposo.

-¿y como la pasaste?- pregunto Romy muy intrigada.

-Bien, es gente muy amable, la mamá de Maxi es mucho más linda en persona, aunque haber dormido en la camioneta y el viaje me tiene un poco agotada.- les contó -¿Y por acá? ¿Alguna novedad?-

-Ayer se llevaron el auto...- informo Tadeo.

-Ahh…. Bueno, que bien.- dijo ella con un aire de tristeza en su tono.

-Pero tiene que mandar a buscar el repuesto a la ciudad.- continuo él.

-Así que aún pasaremos un tiempo acá...- tercio Romy en tono pícaro y ella se frunció para no reír.

Luego de comer, Katrina, acompaño a las niñas a su cama para que duerman siesta, cerro los ojos y el sueño se apoderó de ella también.

No habría pasado media hora cuando su prima la despertó.

-Llego alguien que te quiere saludar...- dijo.

-¿Quién?- pregunto ella confusa e intrigada.

Cuando salieron, allí estaba Acevedo, esperándola con una sonrisa.

-Hola ¿Cómo le va, bella dama?- pregunto el hombre estrechándole la mano.

-Hola... ¿Bella dama?- río katri -Muy caballero.-

-Del siglo 19.- continuo él riendo -Me han dicho que estuvo paseando por "La arboleda".-

-Oh, sí.- respondió ella sentándose -Conociendo un muy bonito lugar y muy buena gente.-

-No le quepa duda que muy buena... Casi toda, por lo menos.- respondió él y katri lo miro un poco incómoda.

-Bueno... Los vi un solo día.- respondió ella para salir del paso.

Miro hacia un costado y logro ver a Juanito con los caballos, no pudo evitar deparar que estos dos hombres eran hermanos... Y tan diferentes a la vez, que paradoja de la vida, uno crecer con todo, pero enojado y el otro ser feliz con tan poco.

-Espero no haberla despertado de su siesta...- continuo él hombre.

-No, no... Es decir, hice dormir a las niñas y me quedé dormida yo.- río katri.

-Se ha apegado mucho con la pequeña del doctor.- comento Alfredo.

-Debo de admitir que sí... Me trae loca.-

-Es una niña muy dulce, es muy triste lo del accidente de su mamá.- dijo él.

-¿Un accidente?- pregunto ella, de eso no sabía nada.

-De autos. Un camión con los frenos rotos...- le contó Acevedo.

-¡Ay, horrible!- exclamo ella tapándose la boca, le recordó su propio accidente.

-Dentro tanta desgracia hay que dar gracias que iba sola, había dejado a la pequeña...- dijo él.

Katrina esbozo una penosa sonrisa.

-O no venís nunca o apareces casi todos los días.- comento Maxi, viniendo del fondo.

Aparentemente, a ese hombre, le gustaba hacer ese tipo de entrada.

-Solo quise venir a visitar a personas que me caen bien. ¿Está mal?- pregunto.

-Es extraño que alguien te caiga bien... sin sacar provecho de eso.- respondió Maxi en un duro tono.

-Doctor, juro que no vengo a pelear...- continuo Alfredo y Maxi lo miro frunciendo el ceño como intrigado.

-De verdad le quiere caer bien a estas personas...- respondió sonriendo con cinismo.

-Bueno... Creo que ya estaría ¿No?- intercedió katri.

-No se preocupe Katrina, ya me retiro, pero volveré pronto.- la saludo dándole la mano y se marchó.

En cuanto quedaron solos katri lo miro.

-¿Que fue eso? El hombre se estaba comportando muy amable.- le dijo.

-¡Me doy cuenta de que no conoce la verdadera naturaleza de las personas!- exclamó Maxi.

-La que paso con sus padres es problema de ellos, él no tiene nada que ver...- digo Katri.

-¡NO VUELVA A HABLAR DE ESE TEMA!- elevo la voz él.

-¿Que... Pasa?- pregunto Tadeo quien se acercaba con Romy.

-¡No vuelva a levantarme la voz!- exclamó ella muy enojada.

-Bueno, basta...- tercio Romy -Ahí te explico.- continuo por lo bajo a su marido.

-Menos mal que falta poco para que arreglen el auto...- finalizo él y se marchó.

Ese comentario dolió más que 10 puñaladas. Katri sintió como sus ojos se llenaban de lágrimas ¿En verdad quería que se fuera?

-Bueno katri, está enojado...- la consoló su prima.

Por la tarde estaban sentadas junto a la mesa del patio. Estaban viendo cómo Maxi estaba entre los caballos.

-¿Hoy no montarán?- pregunto Romy y ella solo la miro, así que luego vio a su esposo.

-Ahh, no sé... quizás no... porque me dijo quería empezar el fuego temprano para hacerle el asado a Magui.- respondió Tadeo con algo de duda, luego se levantó y se fue hacia su nuevo amigo.

De repente llegaron las dos niñas corriendo y se pararon frente a ella.

-¡Mira el vestido que se va a poner esta noche Magui, madrina!- exclamó Lupe muy entusiasta.

-A ver.. Ay qué bonito.- respondió ella al sacarlo de la bolsa.

-Mami ¿Me puedo poner uno yo también?- pregunto Lupe.

-Si, trajimos muchos.- respondió Romy.

-Van a parecer dos princesas.- comento ella abrazando a ambas niñas.

-¿Y nos podemos maquillar?- pregunto Lupe otra vez a su madrina.

-Si tus papás y el de Magui las dejan...- respondió katri.

Y ahí salieron ambas niñas corriendo de la mano a preguntarle a Maxi, quien justamente iba de camino hacia ellas.

-Que bien se llevan...- comento Romy y katri Sonrió.

Observaron como las niñas pedían permiso para maquillarse, aparentemente, Maxi dijo que si, porque las dos niñas salieron de nuevo corriendo de la mano para jugar con agua.

Maxi llego hasta ellas y miro a Katrina.

-Quiero preguntarle algo...- le dijo.

-No creo que venga a disculparse.- continuo ella y su prima giro los ojos hacia arriba.

-¿Por qué me disculparía por algo que creo que estoy en lo correcto?- pregunto Maxi y ella lo miro incrédula -Venía a proponerle... Si quiere... Pasear conmigo... En.. En relámpago.- continuo con dificultad.

-¿Los dos... En el mismo... Caballo?- pregunto ella.

-Si... ¿Eso sería un problema?- pregunto Maxi.

-No, para nada.- respondió katri, tomo su andador y fue caminando hacia Relámpago.

Ahí la subieron como siempre, solo que está vez un poco más adelante y de costado, con las dos piernas hacia el mismo lado, ya que maxi se subió detrás. Rodeo su cuerpo con los brazos, para sostenerla y manejar las riendas del caballo. Katrina se paralizó, su corazón se aceleró, miro a su prima frunciendo una sonrisa nerviosa, la cual Romy no se esforzaba en disimular.