La Legión De La Sombra Y El Reesplandor Del Chi

El duque antes de dormirse, reviso por última vez el cristal de la habitación de Bianca y se dio cuenta que ella no estaba.

[Sabia que no tenía que confiarme, seguramente ahora esta haciendo alguna fechoría, nadie puede ser tan bueno]

Ezra Wilkinson salió cabalgando a toda velocidad, en mitad de la noche...

Cuando llego a la casa en el bosque se dio cuenta que ella no estaba…

[no puede andar lejos, su pie estaba herido]

Camino un poco más y cerca del riachuelo estaba Bianca sumergida en el agua, solo usando un camison que la luz de la luna permitía traslucir toda su perfecta figura…

No era primera vez, que el duque la espiaba escasa de ropa o que la veía desnuda, pero siempre habia sido a través de su magia de sombras, ahora estando tan cerca, su cuerpo inevitablemente comenzó a reaccionar.

[maldita mujer provocadora]

Bianca en cambio, ajena completamente a los oscuros pensamientos de Ezra, disfrutaba del agua fría que mojaba su cuerpo.

[esto me ayudará a relajar mi cuerpo y a mejorar mi pie]

Después de varios minutos, con dificultad, Bianca salió del agua, se envolvió en una toalla y volvió lentamente a la casa. Cada movimiento, cada paso era registrado por el duque, quien no la perdía de vista.

Al día siguiente, Bianca no salió de la casa, se dedico a hacer ejercicios de respiración y a limpiar con cuidado el lugar.

[Ciertamente, en estos días, he recordado mucho mas mi primera vida, la soledad, el aire puro y el contacto con la naturaleza son todo lo que necesito]

El duque ya se iba de la casa, cuando escuchó que alguien se acercaba.

[será algún socio de esta muchacha]

Minutos después, el joven toco la puerta de Bianca.

- Buenas tardes señorita, perdone que la moleste.

Bianca: buenas tardes…

- averigüe en el pueblo su ubicación, le traía fruta fresca.

Bianca: muchas gracias, pero disculpe ¿nos conocemos?

- Mi gallina fue la que ayer, provoco su accidente

Bianca: no se preocupe, esta todo bien.

- por favor, digame, necesita algo, atención medica, comida, compañía.

[¿compañía? maldito imbécil ofrecido, le voy a desplumar todas sus p*tas gallinas]

Bianca: no es necesario, muchas gracias.

- bueno no la molesto mas, soy Richard por cierto…

Bianca: gracias por la fruta señor Richard.

Bianca cerró la puerta dejando al hombre con un rostro ilusionado…

Richard desde afuera, gritó:

Richard: le traeré fruta fresca todos los días mi lady…

Pero, cuando iba de regreso al mercado, se dio cuenta que todas sus gallinas habían huido y ahora debía decenas de monedas en arreglos.

[haber si con eso, te queda tiempo de andar molestando]

Tres días después, llegó la primera respuesta de las cartas que Bianca había enviado, sin embargo, fue interceptada antes por Ezra…

La carta mostraba la preocupación de su tía Beatriz por ella y le pedía que no se quedara mucho tiempo sola, le hablaba de sus primas y de su familia.

[Asi que Felipe ya tiene cuatro hijas, sorprendente]

- señor, ha recibido una carta...

El duque se sorprendió al ver el remitente de la carta.

“Felipe Lennox”

[¿querrá que cuide a su sobrina?]

El duque sorprendido abrió la carta, que mas bien, eran dos o tres frases.

...“NO TE ACERQUES A MI SOBRINA, SÉ QUE LEES SUS CARTAS” ...

Ezra quedó sin palabras y después se puso a reír…

[Creí haber cerrado bien la carta que leí, pero nada se le pasa al General, jajaja… aprovechare de visitar a esa chiquilla]

El duque volvió a cerrar la carta que era para Bianca y cabalgó hasta el bosque.

Cuando estaba cerca, se encontró a Bianca acarreando agua desde el riachuelo para llevarla a la casa.

Bianca: buenas tardes señor.

duque: ¿Qué hace?

Bianca: sacaba agua del río

Duque: le llegó esta carta.

Bianca: Gracias señor, pero, disculpe ¿Por qué la tiene usted?

Duque: llegó a la mansión por error

Bianca: entiendo… muchas gracias

Duque: deje eso, yo lo llevare.

Bianca: no es necesario señor.

Duque: ¿no quiere mi ayuda?

Bianca: no señor.

Duque: ¿por qué?

Bianca: usted dijo que, no quería que yo le diera problemas y hoy tuvo que venir hasta aquí…

Duque: mmmm

Bianca: permiso…

Duque: Dije que dejará eso ahí, ¿no me escucho?

Bianca: lo hice señor… pero no quiero su ayuda, muchas gracias.

[esta mujer recibe frutas de otras personas y a mi ni siquiera me deja cargarle el agua]

El duque tomo los baldes con agua y sin problema camino hacia la casa.

Bianca camino delante de él…

Duque: ¿Qué haces?

Bianca: le muestro el camino señor.

El Duque miró hacia otro lado, agradeciendo ir encapuchado para ocultar su vergüenza.

Bianca: señor, ¿sabe de otro bosque similar a este?

Duque: no

Bianca: es una lastima…

Duque: ¿Por qué?

Bianca: me gusta este lugar, se siente la paz…

Duque: mmmm

Bianca iba llegando a la casa, cuando se encontró con el mismo joven que el día anterior le habia llevado frutas.

Richard: señorita hoy le traje unas verduras, están ideales para que se prepare una buena sopa.

Bianca le sonrió al joven y le recibió las bolsas.

Bianca: muchas gracias, enseguida traigo el dinero.

Richard: no, no, es un regalo… es…

El joven iba a continuar hablando cuando vio al duque aparecer.

Duque: ¿Qué?

Richard: Duque Wilkinson, saludos, bueno, me retiro…

Bianca: espere el dinero por favor…

Richard: eh… no se preocupe… cuando me llegue fruta fresca le traeré…

Bianca: no se preocupe, probablemente me vaya mañana a la capital.

El duque apretó con fuerza los baldes de agua, que incluso crujieron…

Richard: entiendo… bueno, que tenga un buen viaje…

Bianca: muchas gracias, pero aun no le he pagado…

Bianca no termino de hablar, cuando el joven del mercado salió casi corriendo al ver la mirada amenazante del duque.

Duque: ¿asi que se va?

Bianca: si señor.

Duque: ¿Por qué?

Bianca: usted me dijo que, no quería que me quedara mucho tiempo.

Duque: mmmm

Bianca: gracias por ayudarme con el agua, que tenga un buen día.

Sin embargo, el duque no se fue, sino que entró con ella a la cabaña.