NovelToon NovelToon
La Extra Sobrevivirá

La Extra Sobrevivirá

Status: Terminada
Genre:Viaje a un mundo de fantasía / Reencarnación / Mundo mágico / Completas
Popularitas:240.2k
Nilai: 4.9
nombre de autor: Hadassa Paz

Katerina murió por salvar a una joven. No esperaba despertar en una historia que no era suya... con un destino aún más cruel.

Cuando abre los ojos, ya no está en su mundo. Ha reencarnado como Avery, una noble ignorada por su padre, despreciada por su hermana y condenada a morir junto a su madre en una historia que no escribió. Pero Katerina conoce ese final: lo leyó. Sabe quién mata, quién sobrevive… y quién sufre en silencio.

Solo que esta vez, ella no va a permitirlo.

NovelToon tiene autorización de Hadassa Paz para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.

Capítulo 12

El letrero colgante de la posada chirría con el viento, y un farol titilante apenas ilumina la entrada. La fachada es de madera vieja, pero parece limpia, lo suficiente como para que nadie coja pulgas… creo.

—Aquí está —anuncia Fania mientras golpea la puerta con fuerza.

La anciana que nos abre tiene el ceño fruncido, pero cuando ve al chico desmayado y ensangrentado que cargamos entre las tres, su expresión se transforma en una mezcla de horror y deber.

—¿Qué le ha pasado, criatura del Altísimo?

—Unos idiotas borrachos —respondo con mi sonrisa más dulce. De esas que uso cuando quiero parecer inofensiva pero escondo un cuchillo en la manga. Literalmente.

—Pasen, pasen rápido. Habitación número tres, piso de arriba. Es pequeña, pero estará cliente.

Subimos como podemos. Entre Fania, madre y yo arrastramos al muchacho hasta la cama. El colchón rechina cuando lo dejamos caer, y suelta un quejido ronco.

—Avery —murmura Fania—, ¿de verdad crees que está bien?

—No, pero estará. No pienso cargar con la culpa de dejarlo morir como un perro en la calle.

Mamá se sienta a su lado, le moja la frente con una toalla húmeda y lo observa con esa ternura que solo ella sabe tener. Como si fuera su propio hijo.

—Descansemos. Le haré una infusión para el dolor —dice con voz suave, saliendo de la habitación junto con Fania.

Quedo sola con el desconocido… aunque ya no estoy tan segura de que lo sea.

Me acerco, me siento en el borde de la cama y lo observo.

Lo contemplo mientras duerme.

Noto que probablemente tiene un par de años más que yo. Es muy atractivo, fácilmente podría haber sido una celebridad en otro mundo, de dónde vengo.

Su respiración es irregular, sus labios están resecos, pero sus rasgos... son nobles. No nobles de sangre, sino nobles de esencia.

Sus ojos me miran fijamente, de un gris tan profundo como el océano bajo el cielo estrellado y tan sombrío como un día nublado, uno triste que promete una gran tormenta y muchos desastres.

—Agradezco todo lo que has hecho por mí.

—No te preocupes, a cambio, asegúrate de mantenerte con vida, o todo esto fue en vano.

Asiente a mis palabras en silencio esquivando por un segundo mi mirada. Miente, sin embargo no puedo juzgarlo, no sé lo que ha pasado y vivido. No soy quien para decidir por él, cuando yo misma quise morir al fallecer mi abuelo.

—La habitación está pagada para una semana...descansa y recupérate.

—No era necesario, pero gracias.

Esbozando una sonrisa me levanto de la silla, y camino hacia mi madre y Fania.

—Si alguna vez necesitas ayuda, búscame... me llamo Avery Richmond.

Sus ojos brillan. Como si lo hubiera oído antes. Como si no le fuera ajeno.

—Avery… —repite en voz baja, como si lo saboreara.

Le sonrío por última vez y nos marchamos.

El atardecer nos encuentra, nos hemos demorado más de lo previsto. Rápidamente busco un carruaje, y decido que nos subiremos al del chófer que no parece importarle llevar a tres mujeres aparentemente indefensas.

La llegada a la mansión es en completo silencio. A nadie le ha importado nuestra ausencia.

—Fania por favor lleva la cena a la habitación, comeremos ahí, y avisame si alguna de la cocina se sobrepasa contigo.

—Lo dudo, serían muy tontas si así lo hicieran.

La miro con orgullo, es hora de que forme su propio carácter y no se deje pisotear por nadie.

—Madre, ve al cuarto, yo ire enseguida.

Busco al chófer que nos ha llevado al mercado, le doy la dirección de Nora y le pido que mañana vaya en busca de nuestros vestidos a cambio de un par de monedas.

De vuelta me cruzo con quién no deseo. Maldita Ágata, que ganas de darle un puñete y dejarla sin aire.

—Hermana querida, ¿Dónde estuviste todo el día?

—¿Estoy obligada a decírtelo?

Su sonrisa fingida se termina al instante, y un atisbo de rabia cruza por su endemoniado rstro.

—Tengo curiosidad, ¿Te sentiste observada? ¿O que hablaban a tu espalda?, he escuchado rumores acerca de ti, cosas lamentables.

—No me digas, me pregunto quién habrá sido él o la imbécil que inventó semejantes mentiras de la prometida del segundo príncipe. Me has dado una muy buena idea, lo averiguaré y me encargaré de que mi futuro esposo lo condene a la horca ¿Qué te parece?

Su tez se vuelve tan blanca como el papel —Yo tengo que irme, me busca mi madre.

—Si claro, vete, vete —le contesto para luego caminar y pasar por su lado empujando su hombro. Por poco se cae.

—Cuidado hermanita, las caídas pueden ser dolorosas.

Sin siquiera mirarla vuelvo a mi habitación.

...Narrador...

El ambiente en la mansión Richmond ya no era el mismo.

Donde antes reinaban las miradas altivas y los murmullos de desprecio, ahora flotaba un silencio expectante, casi reverente. Las sirvientas que solían pasar por alto a Avery, o peor aún, que abusaban de su poder sobre ella y su madre, se mostraban ahora prudentes, sumisas. La noticia de que la hija mayor del Archiduque había dejado atrás su timidez para convertirse en una figura osada e imponente se propagó como fuego en rastrojo, desde la ayudante de cocina hasta el mozo de cuadra.

Algunos lo celebraban en secreto. Aquellos que nunca alzaron la voz en su contra, que soportaron en silencio las injusticias, veían ahora una posibilidad de redención y justicia en los ojos de la joven heredera.

El cochero, Jacob, también había notado el cambio. Enviado por Avery con la misión de recoger unos vestidos, dudó cuando el carruaje lo llevó hasta uno de los barrios más humildes de la ciudad. Por un instante pensó que había entendido mal, y repasó mentalmente tres veces la conversación con la joven. Pero finalmente, decidido, golpeó la desvencijada puerta de madera con pintura descascarada.

Lo que encontró al otro lado le revolvió el alma.

Una muchacha menuda, con ojeras marcadas y una sonrisa sincera, le entregó cuidadosamente los vestidos envueltos en una sábana limpia. Pero no solo eso: con voz temblorosa pero agradecida, le habló de la generosidad de Avery, de cómo le ofreció ayuda sin esperar nada a cambio, de cómo había salvado su dignidad y dado esperanza a su hijo.

Jacob se quedó helado. Toda su vida había creído en los rumores que se tejían sobre la primera hija del Archiduque: que era altiva, inútil, desprovista de carácter. ¿Cuántas veces la había juzgado desde su asiento al frente del carruaje? ¿Cuántas veces repitió sin pensar lo que decían otros?

Con el corazón pesado y una punzada de vergüenza, regresó a la mansión. Al entregar los vestidos, se inclinó ligeramente y dijo con voz baja pero firme:

—Señorita... si alguna vez necesita un carruaje, o cualquier favor, cuente conmigo. Será un honor para mí servirla.

Avery, sorprendida por la sinceridad en sus ojos, asintió. Y cumplió su palabra.

Días después, marchó junto a Eliana y Fania en busca de un local en el centro de la ciudad. Querían encontrar una tienda con un segundo piso donde Nora y su hijo pudieran vivir cómodamente, lejos de la miseria, cerca de la esperanza.

El destino —o quizás algo más— quiso que encontraran el lugar ideal: un pequeño local con grandes ventanales, recién desocupado esa misma mañana. El segundo piso tenía luz natural y una distribución perfecta para un nuevo comienzo. Rieron, soñaron, planearon.

Cuando salieron, el sol empezaba a caer, tiñendo los tejados de dorado. Estaban a punto de buscar un nuevo carruaje, cuando lo vieron: Jacob las esperaba, firme, paciente, como si supiera que lo necesitarían.

—Señorita —dijo al verla—, permítame llevarlas. No necesitan buscar a nadie más. Será un honor para mí acompañarlas siempre que lo deseen.

Las tres mujeres se miraron entre sí, sorprendidas.

—De acuerdo... se lo agradezco, Jacob —dijo Avery, con una sonrisa sincera.

—Les abriré la puerta.

Y lo hizo. Como un auténtico caballero, abrió la portezuela y ofreció su mano, ayudándolas a subir con delicadeza y respeto.

Avery sintió un nudo en la garganta. Ese gesto, tan sencillo y al mismo tiempo tan significativo, la conmovió profundamente.

Si incluso Jacob, un personaje secundario en la historia de su antigua vida, podía cambiar la forma en que la veía, entonces existía una posibilidad real. Si podía ganarse el respeto de un cochero, tal vez también podría conquistar los corazones de los personajes principales de esta historia: el príncipe heredero... e incluso el emperador.

Quizás, solo quizás, aún había esperanza de cambiar el destino escrito con sangre.

1
sotlas
allí si se muere Kaenia ...ella se va a rehacer su vida con el emperador
Tina Ixchiel Puthod
Gracias a ti,muy hermosa novela,bien llevada y redactada.Felicitaciones.
Belenchiipaz: Muchas gracias Tina, por llegar hasta el final de esta aventura ☺️
Belenchiipaz: Muchas gracias Tina, por llegar hasta el final de esta aventura ☺️
total 1 replies
Tina Ixchiel Puthod
bellisimo!!!!todos ellos merecen ser felices!
sotlas
que triste, la casaron con el violador, de paso es la segunda esposa y es maltratada...
Tina Ixchiel Puthod
pero es la primera vez q veo q malas personas son exiliadas.Eso es un peligro latente.
Belenchiipaz: Lo sé. y créeme que tenía un final cruel para ellos, Pero el final y el epílogo estaban tan bonitos que no quise empañarlo con ellos. Sin embargo creamos que el karma los alcanzará adónde van 🤭
total 1 replies
sotlas
que lindo
Cruz Mejia
A veces es necesario decir palabras sin filtro, pueden sonar crueles, pero de alguna manera te hacen reaccionar 🥴😵😅
Avery sin saber ha salvado al príncipe heredero y será un aliado fuerte a futuro /Pooh-pooh/. No me imagino a un hombre tipo vikingo, nervioso y sonrojado ante una pequeña e indefensa mujer 🙊🤭
Tina Ixchiel Puthod
puaaaa esa no la esperaba!!!que traidor hdp!
Tina Ixchiel Puthod
super capítulo
Tina Ixchiel Puthod
que ordinario!!!
Tina Ixchiel Puthod
mujer valiente,empoderada!!!!
margarita salas
una palabra puede salvar una vida o destruirla
Tina Ixchiel Puthod
Hermosa novela,muy bien desarrollada.
Mary Montilla
Hasta lastima me da Ágata por ilusa pobre tonta 🙄😁👍🏻😜
Cruz Mejia
Tan bien qué la estaban pasando, Avery se arriesga mucho y a sus acompañantes al ir un sitio así y sin guardias 🥺 además qué Fania no está acostumbrada a tomar y así sea un cerveza si se llega uno a sentir mal o quiere uno seguir tomando cuando le agarras el gusto 😏. Ya leí qué ese chico es el príncipe heredero 😔 no creo que sea solo porque su madre murió qué está así de deprimido, hay algo más 😔 o alguien 🥺
Avery ya se encabrono 😤 no debieron pegarle a su mamá, pero dicen que él qué mete paz, saca más y eso le paso a Eliana 😥 espero que salgan bien libradas de esto qué se avecina 😥. Dales con las sillas, los tarros de cerveza o lo que encuentres 🙊🍺🍻🍺 pero sin desperdiciar la cerveza 🤣😂🤣🤣🪑🪑🪑
Mary Montilla
Jajaja jajajaja jajajaja 😂🤣😂 Ese par parecen quinceañeros👍🏻😜❤️☺️
Mary Montilla
Ya Avery tiene su galán y no necesita a ese bueno para nada de Ossian 👍🏻😜
Io Soris
/Rose//Rose//Rose//Rose//Gift//Gift//Gift/
Tina Ixchiel Puthod
ella debia haber hablado aunque sea la noche en elmpalacio con el emperador.
Mary Montilla
Siiiiiiiiiiiiiii el Emperador y ya quedó flechado ❤️❤️❤️❤️❤️👍🏻🤭😜
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play