Amor de Marisa por Ian. El cual es discapacitado y deberá pasar su vida en una silla de ruedas. Marisa es una joven de 22 años, que proviene de una familia humilde y trabaja como Asistente Personal de Ian Andrew.
Ian es el CEO de una Planta Fundidora, probablemente la mas grande y productiva del país.
Ian está recluido de por vida a una silla de ruedas como consecuencia de las secuelas que le dejó un accidente automovilístico en el que murieron sus Padres y su Hermana mayor.
Cuando se leyó el Testamento de su Padre, quedó perfectamente estipulado que Leticia Zambrano quedaría como Tutora legal de Ian y que ella debería ir a vivir a la Mansión Andrew y hacerse cargo ella y solo ella de administrar los bienes de Ian hasta que cumpliera los 21 años. Y en ese lapso de tiempo, de los 8 años que tenía Ian al morir su familia , hasta que Ian cumpliera los 21, Leticia Zambrano sería La CEO de la Fundidora, ya que Leticia era una persona integra y honesta. Hasta que aparece Marisa Salvatierra.
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LA DECISIÓN
Cuando Marisa llegó a su casa, sus Padres y Alicia ya la estaban esperando, su Mamá preparó café y unos biscochos.
Saludó como siempre lo hacía y se fue a cambiarse los zapatos por unas sandalias más cómodas.
Cuando volvió al comedor todos la miraban con ojos de: Y bien?.
Marisa comenzó a hablar:
Mamá, Papá, Alicia, les comenté que el día de hoy iba a tener una reunión muy importante con la Directora Financiera de la Fundidora.
Sí, dijo su Padre. Leticia Zambrano.
Así es Papá.
Y?. Preguntó Alicia.
Me hicieron una propuesta que en realidad no sé cómo tomarla. Leticia me propuso ser la Asistente Personal de Ian Andrew.
El mismísimo dueño de la Fundidora, dijo su Padre.
En efecto Papá.
Me parece una gran oportunidad hija, dijo su Madre.
Claro hermana, dijo Alicia.
Creo que hay algo que no tienes muy claro, hija.
Si lo tengo claro, lo quiero consultar con mi familia es que si acepto me tendré que ir a vivir a la Mansión Andrew.
Ya que mi trabajo será de 24 horas por seis días a la semana.
O sea que te tendrías que mudar a la Mansión Andrew.
Si Mamá.
Viviría en un pequeño departamento que está dentro de la Mansión.
Ese departamento sería solo para ti.
Si Alicia.
Yo saldría cada domingo en la mañana y deberé regresar por la noche o bien, ustedes me podrán visitar en mi día de descanso.
Eso suena a que vas a tener demasiado trabajo.
Si Papá. Seré casi la sombra de Ian Andrew. Le tendré que organizar su día a día. Acompañarlo a las reuniones de trabajo. Visitas a otras empresas, acompañarlo a eventos, a actos de patrocinio. En fin. Va a ser una actividad desenfrenada y por eso es que debería ir a vivir a la Mansión Andrew.
Entonces solo te veríamos un día a la semana.
Si Mamá.
Y ya lo sabe Ricardo?. Preguntó Alicia.
Aún no. Mañana voy a hablar con él. Pero va a ser una plática en la que le voy a decir mi decisión.
Esa decisión que tomaré aquí en acuerdo con mi familia.
O sea que de esta plática vas a tomar la decisión, dijo Alicia.
Así es hermana.
Y el sueldo hace que valga la pena ese trabajo?.
Si Mamá. Vaya que si lo vale.
Pues la decisión que tomes hija, creo que todos la vamos a apoyar.
Claro que si Hermana. Es tu decisión. Y la tomes será para bien tuyo.
No Papá, que sea para bien de la familia. Con lo que ganaría en ese trabajo, tú podrías dejar de trabajar y te dedicarías a tramitar tu jubilación, yo seguiré apoyando a Alicia con sus estudios y a ti con tu rehabilitación. Y tu Mamá tendrás tu estufa y tu horno nuevos.
Y cuando te marcharías.
Tengo un par de días libres.
Te vamos a extrañar, pero si es el momento en que consideras que debes ya volar sola, tienes nuestro aval. Nos va a doler verte partir, pero así es la vida.
Entonces lo acepto. Mañana mismo se lo voy a comunicar a Leticia y también hablaré con Ricardo.
Hazlo mi niña. Ve y vuela, tu Mamá y yo te educamos lo mejor que pudimos y te inculcamos los buenos valores con los que siempre te has conducido.
Claro que sí Papá. No los voy a defraudar.
Lo sabemos mi pequeña.
Bueno, entonces la decisión está tomada, mañana se lo haré saber a Leticia.