La Reencarnación De La Emperatriz Sanguinaria.

Victoria Blackwood, la princesa más joven e hija de los emperadores de Umbra, desde pequeña demostró su destreza en la batalla, su fuerza y agilidad la hacían un arma letal. Como en Umbra las mujeres tenían más libertad, sus padres nunca se opusieron a que ella entrenará con sus hermanos mayores, después de todo, la primera princesa también lo hacía.

Y así, Victoria creció demostrando sus habilidades, pero con ello, también crecieron los celos y la envidia de sus hermanos, en especial de la primera princesa, Lethia Blackwood, quien detestaba que Victoria destacara incluso en belleza y ese fue el principal motivo por el cual la pobre Victoria perdería todo. Pero no ahora, porque la Victoria actual conoce todo ese futuro y el secreto de su inusual fuerza y agilidad, ella, no era humana, ella solo era la hija adoptiva de los emperadores, una niña que el emperador recogió cuando exploraba el bosque, la emperatriz al ver a la pequeña sintió pena al saber donde había abandonada, así que junto a su esposo, decidieron adoptarla y recibió el mismo amor que los hijos biológicos.

Después de asimilar que había reencarnado en un mundo diferente, en el cuerpo de una mujer diferente, ahora tenía que poner en marcha algún plan para evitar la tragedia. Cuando Victoria salió de la habitación después de cinco días de reportarse enferma, todos se sorprendieron al verla caminar por los pasillos del palacio, no llevaba su habitual traje de batalla, por el contrario, portaba un llamativo vestido color negro y algunos accesorios que resaltaban la belleza de sus ojos carmesí. Pero su andar fue interrumpido cuando la primera princesa, Lethia, se interpuso en su camino.

— ¿acaso vas a un funeral?, dejaste el traje de batalla para vestirte como un cuervo...— se burla.

— aunque te burles, con o sin traje de batalla, puedo cortarte esa lengua afilada, así que, cuídala o la perderás.— responde con una sonrisa burlona.

— ¿tú?, el hecho de que hayas ganado algunas batallas, no significa que puedas contra mí, yo ya habría ganado esta guerra.— presume con la mirada en alto.

— sueñas en grande, hermana, pero esto es la vida real y por algo, no lideras las tropas.— se burla.

Lethia solo se muestra molesta, mientras que Victoria la aparta para seguir su camino, no tiene tiempo que perder con esa basura.

.

.

.

Victoria llego a la sala de reuniones, donde se estaba llevando a cabo los planes de defensa contra los lycan. El emperador regaña a Victoria por llegar tarde y por no haber asistido durante dos días. Victoria solo observa al emperador, ese que fácilmente se dejo engañar por Lethia.

— me disculpo majestad, la próxima vez pensaré primero en mi deber antes de enfermar.— hace una reverencia agachando la cabeza.

Su voz sonó cortada, causando desconcierto en los generales y puso nervioso al emperador. Este garraspea para continuar con la reunión, mientras que Victoria observa todo, aunque prefiere no aportar ninguna idea, incluso cuando le preguntan, ella dice que no pensó en nada más, pues el único camino para entrar al país es aquel istmo, por lo que duda que los lycan tengan otra ruta.

Al finalizar la reunión, el emperador le pidió a Victoria estar preparada para la batalla, ella será la que guíe las tropas esta vez, pues gracias a sus habilidades se ha ganado ese "honor". Victoria agradece y se retira también.

♧♧♧♧♧♧♧♧♧♧♧

Más tarde, Lethia se ha enterado que es Victoria quien guiará las tropas, lo cual la enoja, porque para si misma, ella es mejor guerrera que Victoria, ella es la primera princesa y quien debe de tener ese honor. Lethia no dudo en expresar su descontento durante la cena familiar, ya que siente que ella es quien debería guiar a las tropas.

— padre, si Lethia desea tomar el control de las tropas no me opongo, temo no hacerlo bien debido a mi salud.— expresa preocupada Victoria.

Lethia y todos en la mesa se sorprenden por las palabras de la más joven. El emperador mira a Victoria con preocupación.

—¿tan grave es lo que tienes?— pregunta preocupado.

— no padre, estuve con fiebre, pero, mi cuerpo aun esta débil y temo no poder desempeñarme bien en el campo de batalla.— explica.

— ¿Victoria enferma?, eso si que es una novedad.— se burla Abel, el primer príncipe.

— tal vez solo es una excusa para no ir a la batalla.— agrega Byron, el segundo príncipe.

— Byron, Abel, suficiente. Si Victoria aún no esta lista, entonces podemos esperar, no nos podemos arriesgar, esta batalla es importante.

Lethia aprieta las manos molesta al escuchar las palabras de su padre.— ¡yo puedo guiar las tropas!, soy lo suficientemente fuerte, ¿por qué hay que detener todo solo para esperar?, los lycan no esperarán.— expresa enojada.

El emperador se queda en silencio, así que se queda pensando, pues Lethia tiene razón, los lycan podrían aprovechar la ausencia de las tropas para atacar.

— bien, Lethia tendrás una oportunidad, pero ten en cuenta que si fallas, tendrá consecuencias.— le advierte.

— no fallaré padre, le demostraré que soy la indicada para esta batalla.— asegura Lethia.

La princesa mayor estaba emocionada y feliz, finalmente puede demostrar que es mejor que Victoria, ella les hará ver a todos que los lycan se rendirán ante su poder. Victoria por su parte, solo sonríe ladina, siendo visto esto por la propia Lethia, pero le resta importancia, piensa que solo esta fingiendo que no le importa.

.

.

.

Después de la cena, mientras Victoria iba camino a su habitación es interceptada por Byron, quien dice no creer que ella este enferma, de estarlo, el médico ya habría ido a revisarla y hasta ahora, nadie ha visto médico visitarla.

— Moira me dio un remedio, ella sabe sobre eso. Pero mi cuerpo aún duele.— responde.

— si sabes que Lethia fallara, ¿verdad?, todos saben que eres más fuerte que ella, has estado guiando las tropas desde hace dos años, tienes más experiencia en el campo de batalla.—

— entonces quien se enfrentará a las consecuencias es ella. ¿Te preocupa?— sonríe ladina.

Byron niega y cuando Victoria llega a su residencia, Byron se despide, siguiendo su camino hacía su propio lugar.

•••