DESTINO INESPERADO

Jorge:- necesito que busques toda la información que encuentres de esta enfermera, dijo que se llama Catalina algo, quiero alguna debilidad para que esté a mi lado, ya que no me sentí incómodo con ella a mi lado y creo saber la razón

David:- ¿estás seguro?

Jorge:- si, necesito hablar con ella y no iré con las manos vacías, así que mientras más rápido tengas esa información para mí mucho mejor

David:- así lo haré

salió de la habitación para cumplir su nueva misión hecho un mar de preguntas y sin la capacidad de poder tener respuestas, ya que conocía bien a su jefe y si él no quería profundizar un tema, ni aunque le tocará el tema, contaría mas de lo necesario

Jorge por el contrario estaba feliz de haber encontrado la persona que estuvo buscando por más de quince años, está seguro por su aroma que aunque muy débil sabe que es el mismo de ese entonces y esa canción lo confirmo, pues él no solo iba a Tarará por negocios, sino ha buscar una persona que lo ayudó en un problema que tubo lugar allí alrededor de diecisiete años atrás y le salvó la vida y solo él tiene esta información por lo cual nadie conoce sus pensamientos de venir una vez al año a este lugar a hacer negocios

Catalina tiene miedo de volver a ver a Jorge pero la insistencia de la jefe Andrea y la enfermedad recién descubierta de su madre la hacen tomar valor e ir otra vez para estar pendiente de ese ser desalmado, rezando para que la acepte y no la corran de la habitación pues en verdad necesita más que el ascenso el dinero para ayudar a tratar a su mamá, después de almuerzo decidió volver a tomar los signos y saber que necesita el paciente

Frota sus manos para pasar los nervios que tiene y golpea la puerta suavemente, esperando en el fondo que no abran la puerta, pero como no todo lo que se desea, la puerta se abrió y un amable asistente le dio el pase para ingresar, saliendo a su vez, para dejarlos solos y puedan hablar

Cuando Catalina vio a Jorge se estremeció por el recuerdo de la forma en que la trato en la mañana, entonces para calmarse, intento lo más bajito posible darse ánimos 'tranquilo, tranquilo dulce conejito 1,2,3 respira ojitos bonitos '

Al oír nuevamente la canción, Jorge esbozo una sonrisa disimulada, recordaba ese ritmo y aunque la letra en el trascurso de los años la había olvidado, al oír a Catalina cantar por segunda vez, sé aseguró que fue la misma canción que en aquella ocasión lo tranquilizó y le despejo la mente para lo que pasa después

Jorge:- chiquilla, podrías por favor, volverla a cantar un poco más fuerte, es que me calma y necesito estar tranquilo¿cierto?

Catalina:- no soy chiquilla, además es una canción para calmar mis nervios no los suyos, quedar algo más el señor o puedo tomarle los signos

Jorge:- no me toques si no cantas, no te estoy pidiendo demasiado para que te pongas altanera

Catalina:- está bien, si no me asustas mientras te tomo las muestras que necesito la cantaré para que nos calmemos 'TRANQUILO, TRANQUILO DULCE CONEJITO 1, 2, 3 RESPIRA OJITOS BONITOS, TRANQUILO AMIGUITO TODO ESTARÁ BIEN, CIERRA TUS OJITOS Y CALMATE ', mamá dice que nos ayuda a calmarnos cuando estamos estresados, pero a nadie la he oído cantarla solo la canto yo ja, ja, ja(risa incómoda)

Jorge sin pensar:- es verdad solo tú la cantas nadie más

Catalina:- ¿por qué dices eso?, habías oído la canción antes, que yo sepa solo mamá y yo la cantamos ni siquiera a Celia se la enseñe, (hace un puchero que a Jorge le pareció tierno)

Jorge:- podemos hacer un trato, sé mi enfermera de tiempo completo, te pagaría bien, si me cuidas mientras estoy ciego y después podemos seguir trabajando¿qué opinas?

Catalina se sorprende ante ese anuncio, nunca había pensado en trabajar fuera del hospital, le encanta la gente y el trato que se tienen todos ahí, sería triste irse, ya que aceptar sería tener que viajar a Villarreal porque es el lugar donde vive Jorge

Jorge:- no te voy a presionar, pero si necesitaré una ayuda cuando vuelva y si no puedo volver a ver, tengo que seguir adelante, pero estoy consiente que por ahora no puedo solo, piénsalo y me das una respuesta más tarde

Catalina:- lo siento, pero más tarde no te contestaré, ya que me voy a mi hogar y volveré hasta mañana en la mañana, está vez tengo el turno diurno, así que te responderé mañana

Jorge un poco mal humorado:- está bien y piénsalo porque para que me cuides tendrás que estar la mayor parte del tiempo a mi lado, soy ciego y no me puedo mover fácilmente, por ahora ayúdame a llegar al baño, David se fue y se está demorando y ya no aguanto más

Catalina:- no debería aguantar tanto, tome mi mano lo ayudó a ubicarse para que utilice el baño

Cuando Catalina le dio la mano y se tocaron, Jorge se alegraba de no sentir repudio por su toque y es que a lo que más temía era que al encontrarla lo enfermara como hasta ahora todas las mujeres lo hacían y se sentía impotente ante esta reacción, pero ya no se preocupaba, porque no solo la encontró sino que lo que los unió en ese momento, puede ser la razón para que no rechace estar cerca de ella

Catalina agenda a lo que Jorge pensaba, lo acercó a la puerta del baño y lo saco de sus pensamientos cuando habló

Catalina:- señor Alford, está en la puerta del baño

Jorge:- y como llegaré al inodoro, no está junto a la puerta

Catalina:- lo sé (suspira), siga derecho y llegará al inodoro, yo no debo entrar

Jorge:- ¿esa es la manera de cuidar a tus pacientes?, como llegaré y ¿si me tropiezo y caigo? Igual no podrás entrar

Catalina ya resignada con todo lo que Jorge le dijo:- está bien, pero cuando estemos frente al inodoro saldré del baño sin mirar

Jorge sonreía de imaginar lo roja que debería estar su Cata por esa situación, aunque tarde se dio cuenta de que era incómoda para él también

Después de realizar sus necesidades Jorge la llamo para que lo volviera a ayudar

Jorge:- ayúdame, no quiero moverme por temor a caerme

Catalina entra para llevarlo de nuevo a su cama, pero cuando Jorge sintió que estaba pasando la puerta se enojó

Jorge:- ¿para dónde me llevas?, ni creas que me voy a acostar con las manos así de sucias o ¿qué piensas?

Catalina entiende lo que sucede y lo devuelve al lavamanos abriendo la llave, para que él se asee las manos, suspira resignada, pero se da cuenta que si lleva un registro hasta sería sencillo cuidar de Jorge