Isabella Rossi tiene 21 años, es la hija de un famoso empresario y lleva una relación con su novio desde los diecisiete años, solo esperaba graduarse para completar el compromiso que ambas familias han convenido desde hace muchos años, pero los padres de Isabella le dieron a escoger si casarse o no. Ella está muy enamorada de Sebastián Greco un joven apuesto de 25 años que es hijo de otro poderoso empresario, y no tiene dudas de él, pero pronto conoce el engaño de su prometido y su mejor amiga por eso su compromiso quedará disuelto. Al encontrarlo con su amiga él le dice que lo hizo por qué ella no lo representa y es demasiado mojigata, entonces ella decide cambiar tanto su aspecto como sus principios.
Te invito a conocerla.
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Debes salir.
Ha pasado un mes de aquella locura y sigo hecha un asco, mis amigas vinieron por enésima vez a convencerme.
Kath: Amiga, ya levántate, tienes que seguir adelante, demuéstrale a ese imbécil que dejó a un diamante y se llevó un carbón.
Sofi: Si amiga vístete, sé tú cómo realmente eres y le haces la vida de cuadritos, no viste el periódico, anunciaron que se casarán, hazlos pagar, amiguchis.
Isa: Perfecto, que se preparen esos idiotas, mi padre me mandará a una de sus empresas a manejarla junto a otros socios y ese imbécil es uno de ellos, así que por allí es que voy a comenzar, a demás la muy perra modela allí.
Kath: Así se habla princesa, levántate, es más, esta noche nos vamos de antro, siiiiii.
Sofi: Antro, Antro, vámonos a ponernos perras, amiga.
Isa: Amigas esta noche el objetivo es dejar de ser la idiota virgen que dejaron desde hoy cero amor, seré una perra al diablo con esas estupideces de casarme, si mi padre acepta bien y si no que se joda.
Mis amigas celebraban, nunca me revelé a mi padre, pero me cansé de ser la idiota e ingenua virgen.
Salimos al antro.
Isabella Rossi
Mis amigas están hermosas, Kath, lleva un vestido negro con un solo tirante de lado, un bolso de mano blanco y unos tacones negros.
Vestido de Katherine.
Sofía lleva un vestido rojo, corto, con un solo tirante y abierto en la cintura, unos tacones negros y su bolso de mano color negro.
Vestido Sofía.
Yo llevo un vestido negro, corto, escotado al frente y escotado en la espalda con tirantes cruzados, un bolso de mano color crema con zarcillos y pulsera a juego y unas sandalias altas negras de tiras.
Vestido de Isabella.
Llegamos al antro y nos vamos a una zona VIP, pedimos unos tragos y empezamos la fiesta, bajamos a la pista y empezamos a bailar un Reguetón que está sonando y pega mucho conmigo “Ella quiere beber”. Me olvido de lo descubierta que estoy, no me importa el mañana, tengo un objetivo emborracharme y tener muy buen sexo.
Empiezo a moverme lo más sensual que puedo y wow, no sabía que bailara tan bien.
Observo que mi amiga Kath, saluda a alguien y se va a un VIP.
Mientras habla con el chico me observa y se ríe, unos minutos después un chico guapo empieza a bailar conmigo, pone sus manos en mi cintura y las baja poco a poco hasta llegar a... ningún lado.
Un hombre hermoso, alto, guapo, cabello castaño, como de un metro noventa o más, piel blanca, con un cuerpo esculpido y una mirada intensa, lo empuja y le dice algo, viéndolo fijamente, pero por lo alto de la música no oigo que le dijo.
Franco Ferraro.
Él Adonis se voltea y me observa, toma mi mano y me lleva a un VIP dónde están Kath y Sofi hablando con un par de hombres.
Yo no entiendo nada, me acerco a ellos y los saludo, el hombre a mi lado jala mi mano y me sienta a su lado, luego empieza a regañarme como si fuera una niña pequeña.
Hombre: Oye, ¿qué te sucede, por qué te expones así? Estás ebria.
Isa: Solo estoy un poco mareada, me falta tomar más, ¿y qué me sucede? Nada, solo busco un hombre que cure mi enfermedad, así que permiso hablaré con mis amigas.
Logro acercarme a Kath y me explica que tres de esos cuatro chicos están disponibles.
El primero que es mi adonis, es un hombre frío, arrogante y usa a las mujeres una sola vez, yo pensé, bingo, pero luego me dijo, que él busca mujeres con experiencia y yo no tengo.
Al otro, le gustan las relaciones serias y salir, ya saben.
El otro chico es más relajado, si es sexo no importa con quién sea.
Isa: Okay amiga, lo encontré.
Kath: Si amiga, son amigos de Esteban, pero a ese no lo veas, es mío.
Se ríe coqueta y se va con él, volteo y está el hombre cruzado de brazos y creo que escuchó lo que mi amiga dijo, me toma de la mano y me sienta de nuevo a su lado.
Franco: Ahora explícame, ¿qué pasa y que enfermedad te quieres curar en un lugar como este? Por cierto, soy Franco.
Isa: Yo soy Isabella, bueno, te explico, vine por dos razones; una embriagarme hasta más no poder y dos; conseguir a alguien que me quite lo virgen, esa es mi terrible enfermedad.
Me río a carcajadas y él me ve sorprendido mientras continúo.
Isa: Mi amiga me habló de ustedes tres, me dijo que el chico de camisa blanca es un hombre que le gusta salir, conocer y no será algo de una sola noche, así que queda descartado, no quiero relaciones así en mi vida.
Niego con mi cabeza mientras lo digo
Isa: El segundo eres tú, me dijo que eres perfectamente lo que busco.
Dijo que no eras de relaciones, que usas a las mujeres una sola vez y chao, perfecto, hasta que me dijo que te gustan con experiencia y ahí sí que no tengo y no te voy a poner a que pases un mal rato mientras me curas la enfermedad.
Esta vez niego con mi dedo y me río
Isa: Eso deja al de la chaqueta negra como la mejor opción, dijo que era relajado y que con gusto va a aceptar, así que si me permites le voy a preguntar.
Hice para levantarme, pero me fue imposible, el hombre me detuvo y me sentó en sus piernas.
Franco: ¿A dónde crees que vas?
Isa: Ya te dije, a hablar con tu amigo y pedirle que me ayude, por cierto, me dices su nombre y me permites pararme.
Franco: Claro que no, nos quedamos aquí, estamos hablando, dime por qué dices que ser virgen es una enfermedad y por qué quieres perder eso, así con un desconocido y ebria.
Isa: No sé por qué, pero me siento en confianza contigo, así que te contaré mi patética historia.
Hace un mes me iba a casar con mi novio de hace cuatro años y el día que decidí acostarme con él, para que no siguiera molesto por yo querer esperar hasta la boda, lo encontré con mi mejor amiga.
Una lágrima bajó de mi cara, la limpié y seguí.
Isa: Estaban en su apartamento en una fiesta y cuando le reclamé, dijo que lo hizo porque era patética, aburrida, fea, y que no lo podría representar en sus cenas de negocios, que ella era mejor.
Tengo que hacer una pausa porque me duele recordar sus palabras.
Isa: Y que yo era una santurrona y una mojigata, salí destruida y pasé un mes ahogada en el llanto, mis amigas hoy lograron convencerme de salir, olvidarlo, vengarme y volverme la mujer que a los hombres les gusta.
Señalo todo el lugar y él está escuchando muy atento.
Isa: La que no tiene pudor y anda relajada con uno y con otro, por eso decidí que cero relaciones, cero sentimientos.
Solo quiero dejar de ser virgen y empezar a ser más relajada como tú, qué estás sin complicaciones, tienes sexo una sola vez con la misma persona, cero drama y sin traiciones, ahora, voy por tu amigo.
Traté de pararme y me tomó con fuerza, me miró a los ojos y dijo.
Franco: Tu ex es un idiota, tú no eres fea, eres hermosa y si eres como me dijiste, eres la mujer que cualquier hombre desearía. Ahora mismo la mitad del antro te está comiendo con los ojos, vamos, yo te ayudo con lo que quieres.
Me toma de la mano y hace para levantarse.
Franco: Yo tengo condiciones, pero eso lo hablamos al llegar.
Nos levantamos, me tomó de la mano y salimos, mis amigas me veían felices y los hombres en serio me comían con los ojos.
Franco me pegó más a él, luego subimos a su coche y llegamos a su apartamento, es grande y muy lindo.
Muchas felicidades hiciste un gran trabajo con esta historia