¿Qué harías si un día descubres que tu amada hija de seis años es maltratada por todas las personas responsables de cuidarla?
¿cómo te vengarías?
¿valdría la pena dejarlos seguir respirando?
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¡Por favor no me defiendas!
Capítulo 1
¡Por favor, no me defiendas!
“Vamos, la maestra se fue y la niña pobre está sentada allí, si ella cree que se va a librar de nosotros hoy está muy equivocada, en este colegio no cabe la hija de una sirvienta” dice Britanny mientras camina enérgicamente con sus cortas y regordetas piernas a donde se encuentra la lamentable niña, “Britanny, no creo que esa niña sea la hija de una sirvienta” le dice Mariana a Britanny con algo de nerviosismo en su voz, ya que su mami le dijo que todas las personas son iguales y merecen respeto, pero en este momento es su amiguita quien se dirige enérgicamente hacia Fiorella y ella realmente solo puede seguirla porque Britanny no la escucha, en este momento, Fiorella, una pequeña niña que no se ha percatado de que alguien viene hacia ella, se encontraba abriendo su lonchera para almorzar en el patio de recreo, ya que nadie le permitió sentarse en el comedor y mucho menos tomar la comida para los niños de ese lugar.
Al llegar al rincón del patio de juegos donde se encontraba niña de vestimenta humilde, Britanny rápidamente le tira la lonchera que sujetaba sobre sus pequeñas piernas al suelo, dejando caer totalmente su almuerzo sobre ella, Fiorella en este momento no llora, no se queja, no dice que su té estaba muy caliente y ya sus pequeñas manos se estaban enrojeciendo, además su ropa ya se encontraba mojada y sucia.
Al ver esta escena, muchos otros niños se acercan a la esquina donde hasta este momento solo se encontraban las tres pequeñas, esto ayuda a activar mucho más la malicia de Britanny, que aunque solo tiene 6 años al igual que el resto de sus compañeros ya sabe bien como menospreciar y humillar a otras personas debido a las enseñanzas de su madre.
Al ver que otros niños se acercaban, Mariana se sintió un poco apenada e intento tomar la mano de Britanny para ir a otro lugar, pero esta se soltó con brusquedad y comenzó a gritar a todo pulmón “Fiorella, ¿acaso tu papá chofer no te enseño a comportarte? ¿Por qué querías llenarme de tu asquerosa comida? Ahora por querer ensuciarme, mira cómo te ensuciaste toda, tu ropa siempre esta sucia, ahora tu papá chofer tampoco te va a querer y la maestra te regañara por malvada, si me hubieras ensuciado con tu comida, mi mamá seguramente te daría una lección hoy” estos gritos de la pequeña causaron que los otros niños se sintieran incomodos y comenzaron a acosar y gritarle a Fiorella, culpándola de la situación, después de todo son niños y algunos solo creerán lo que les dicen sin dudar. Pero en este momento, Ethan Domínguez, el hijo del primer Chaebol de nueva York, se paró delante de Fiorella con la intención de explicar lo que ocurrió por ella, ya que había visto todo desde su lugar en el comedor, pero su acción llego justo a tiempo para recibir un chorro de leche que estaba destinado a caer en la cara avergonzada de la chica acosada.
Este noble gesto del pequeño solo logro poner a la chiquilla avergonzada mucho más nerviosa, ya que ella había visto a este niño en las fiestas nobles que hace la esposa de su papá en casa y esa mujer le había dicho que él es una persona importante y ella solo es una pequeña sirvienta, por lo que tenía prohibido acercarse a él.
Lo tomo suavemente del brazo y le dijo “porfavor no me defiendas, puedo aguantarlo, ella todos los días hace esto” después de decir esto intento forzar una sonrisa, esta actitud molesto un poco al niño héroe, que solo estaba molesto por la injusticia que estaba sufriendo esa niña tonta, que además tenía las manos rojas de haber sido quemada por la bebida de su propio termo, por lo tanto comenzó a gritar eufóricamente y a todo pulmón: “Maestraaaaaaaa, maestraaaaaaaa…” los maestros desde el lugar donde se encontraban, podían ver perfectamente la escena del acoso a Fiorella con atención, pero no querían escuchar los ruidos quejumbrosos de Britanny, además si tenían que llamar a sus padres escuchar los gritos y amenazas de la madre de esa niña era un total castigo, por lo que decidieron hacer la vista gorda, pero al escuchar los gritos de Ethan, fue diferente, si este niño se enoja, se pueden meter en un gran problema, así que decidieron rápidamente empujar a la dulce maestra Sánchez a cumplir con su responsabilidad como docente responsable y lidiar con este grupo del jardín de infantes, que desde la llegada de la pequeña Fiorella se ha vuelto tan bullicioso a la hora de comer.
Al escuchar a sus colegas, la señorita Sánchez salió corriendo con su mejor cara de preocupación a ver a quien esta acosando Fiorella ahora. Ella lo pensó bien durante mucho tiempo, en este caso donde la mamá de Britanny es una mujer histérica que no está consciente de ella misma y de su hija queriendo resolver todo a gritos y tirando dinero, Ethan que aunque su padre nunca viene, su mayordomo es implacable para resolver sus asuntos y la pobre Fiorella que todos los días sufre del mismo acoso por su ropa siempre con manchas y la poca importancia que le dan, ya que la única persona que se preocupa por ella es su chofer, pero en su posición de chofer es muy poco lo que puede hacer… lo mejor es echarle la culpa a ella y se resuelve todo el asunto, fácil y rápido.
La maestra se dirigió al lugar pensando esto y se sintió muy feliz de ser una mujer realmente eficiente en la resolución de problemas, se decía a sí misma que es una mujer muy inteligente.