Episode 8

   BLANCO ES  EL COLOR DE LA MUERTE

 ORBITAR EN EL ESPACIO PROFUNDO Y FRIÓ,

 DI UNA SOLA PALABRA,Y ENTONCES ME SALVARE.

POLONIA.

_¿Que están haciendo?_ gruño Sean mientas arrojaba los restos de sándwich basurero que estaba a un lado de las bombas de gasolina.

Niall y Winter llevaban dentro de la tienda un buen rato, demasiado. No podían detenerse en ningún lado. Nunca sabían quien los reconocería, especialmente después del incidente en la frontera. Ahí, el corazón de Europa, asediados por demonios, de camino a la Puerta del Mundo de las Sombras, no podía haber descanso, ni de los demonios ni de los humanos.

_No tengo idea\, pero tienen que regresar ahora_ replico Sarah mientras veía a su alrededor ansiosa-mente. Superviso la escena\, buscaba posibles amenazas. Habia una pareja mayor regresando sobre su coche\, y una madre con sus hijos tomados de las manos en dirección a la tienda. La gente ponía nerviosa a Sarah. La gente podía salir lastimada\, o lastimaros.

Tuvo un sueño la noche anterior, una visión de algo grande que agitaba sus extremidades sobre ella, había flamas azules por todas partes. Fue una escena demasiado borrosa como para reconocer exactamente que era lo que pasaba, pero estaba segura que e un ataque era inminente. Sarah era una soñadora y sus sueños tenían que guiarla hacia los demonios que debían destruir, así como advertirles de los posibles peligros, pero en los últimos días eran alucinaciones de visiones terroríficas. No servían de nada. Tal vez no estaba durmiendo lo suficiente. Tal vez al dormir estaba demasiado afectada como ir al lugar de su mente donde sus sueños sucedían. O tal vez Nicholas se estaba metiendo en su cabeza de nuevo. No había forma de que estuviera segura.

Deslizo su mano su mano en la guantera del coche de Sean y saco su bufanda.Se la anudo en el cuello dos veces, como siempre lo hacia. Hacia tanto frió que ya estaba temblando.

En el estacionamiento contiguo, Elodie se quito el cinturón de seguridad.

_Iré por Niall_ dijo y salio del coche de Nicholas.

Nicholas se movió con nerviosismo después de que la puerta se azoto. No le gustaba cuando Elodie lo dejaba. No estaba acostumbrado a ser ciego todavía, y le temía a la oscuridad completa, a la perdida del equilibrio, a la sensación de no saberlo que podría estar asechando a su alrededor. Los cuervos de Nicholas estaban en el techo de la estación de gasolina y esperaban continuar el viaje. Sin ellos, el hubiera sido incapaz de guiar a Sarah y sus amigos a la puerta. Aunque conocía el mundo de las sombras como la palma de su mano, la perdida de visión le hacia imposible orientarse. Los elementales ahora veían por el.

Sarah soplo sobre sus manos y las froto. Habia sombras oscuras bajo sus ojos, y sus manos seguían abriéndose y cerrándose, como si estuviera preparando se para llaman a Aguas Negras, aun sin estar en una situación de combate. Estaba demasiado asustada como para apagadlas, e incluso sucedía en sus sueños, especialmente cuando el revoltijo de visiones crueles y confusas la hacia revolcarse y despertarse gritando.

_¿Estas bien?_ la pregunto Sean la hizo brincar.

_algo así\, ¿tu?_ respondió\, sin dejarle poner una mano en su brazo o acercarse a ella.

Se encogió de hombros.

No he dormido en una semana. fuera de eso, estoy genial.

Sus ojos se encontraron, se dijeron mas de lo que las palabras podían decir.

_¡Oigan!_ la voz profunda de Nicholas llego atravez de la ventana abierta.

_¿Que quieres?_ refunfuño Sean como respuesta. Habia aceptado la presencia de Nicholas: sabia que lo necesitaban pero no le tenia confianza y\, de haber sido por el\, le hubiera dicho lo que realmente pensada con sus puños\, solo para recordarle donde estaban. Pero Elodiee no lo hubiera dejado por alguna razón conocida solo por ella.

Nicholas salio del auto lentamente apoyándose con dificultad en la puerta. Sus ojos de obsidiana, turbios y sin vista, se voltearon hacia donde se escuchaban las voces de Sean y Sarah.

_Nos tenemos que ir_dijo\, y los curvos graznaron como respuesta una y dos veces.

_Si\, lo sabemos replico Sarah con un tono glacial.

Quiero decir, nos tenemos que ir ahora. Confíen en mi.

_¡Ah!_ Sarah volteo\, sus ojos brillaban verdes por la mirada de Midnigth\, pero no podía hacerle daño a Nicholas por que el no podía ver. De haber podido\, su vista lo había golpeado como espada entre los ojos.Estamos confiando en ti\, Nicholas\, si no\,no estaríamos aquí_espeto.

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