Episode 14

LA NOCHE SE CIERRA

MANTENGO MI ALMA

DONDE SE QUE NUNCA LA ENCONTRARAS

Querían viajar toda la noche, pero ninguno había dormido mas de tres horas en dos hora. Todos estaba casi delirando por el cansancio. Nicholas había prometido solo una parada mas y llegarían. Saldrían en la madrugada y estarían en la puerta al amanecer. Se curaron las heridas, comieron una cena fría de pan, jamón, queso y galletas, y luego se acomodaron para pasar la noche. Se opusieron a cualquier instinto humano, el de la necesidad de crear luz y calor; no encenderían fuego a pesar de estar en el bosque en plena noche de invierno.No se podían permitir llamar la atención. Sarah no podía recordar la ultima vez que no había sentido frió.

Se acurruco en el asiento de enfrente en el carro de Sean; Niall y Winter estaban abrazados atrás. Sarah había captado de mala gana dormir en el coche, cobijada por uno de los sacos de dormir que tomaron de la residencia de los Midnight, aunque el recuerdo la hacia sentirse claustrofobia y le sacaba el aire de los pulmones. Sean no le permitiría dormir afuera, y por mucho que no aceptara ordenes de el ni de nadie mas, tenia que aceptar que tenia razón.

Gimoteo en sus sueños y se movió repentinamente, golpeo su mano en la guantera y se despertó con un sobresalto. Le dolía el hombro. Una vez mas, sus sueños no tenían sentido, eran confusos, un carrusel de imágenes aterradoras, colores y luces revueltas, y luego la mas profunda oscuridad, como si se hubiera quedado ciega al igual que Nicholas. La realidad parecía un espejo de sus sueños, como si todo fuera negro a su alrededor.

Subio el saco de dormir hasta su garganta, la cascada de su cabello estaba dentro para mantenerla caliente. Era imposible dormir. No con todo lo que estaba pasando, no con los sueños que la atormentaban, no con el dolor punzante en su cuerpo maltrecho.

sabia que si abría la puerta y salia, se encontraría a san sin poder dormir, como ella. El era insomne en las mejores situaciones. Sarah no podía recordar una ocasión en la que lo hubiera visto profundamente dormido. Incluso al principio, cuando se presento en su casa haciéndose pasar por su primo Harry Midnight, cuando estaba atado a el por la promesa de proteger a la ultima de los Midnight: Sarah. En aquellos días, ella podía escuchar el sonido suave de la radio que provenía de su habitación hasta altas horas de la madrugada.

Sarah parpadeo de nuevo al ver pequeños destellos de luz rojas que bailaban en la oscuridad e iluminaban breve-mente los brazos y manos de Sean mientra realizaba runas en el aire. Sarah se sentó derecha. Nunca antes había visto que las runas de Sean brillaran con un tono rojo. ¿Que estaba pasando?

Sarah se dejo caer y contemplo la absoluta oscuridad que envolvía el carro. Los destellos de luz roja se habían ido. Cerro los ojos y trato de imaginarse los brazos de Sean a su alrededor, su cabeza en el pecho de el y sus manos acariciando su cabello.... hasta que su cuerpo, exhausto, fue obligado entrar en un sueño inquieto.