CUIDARTE

—Lava bien tus manos.

—Eso hago —pronunció y veo mi reflejo en el espejo.

Me causa gracia verme en este estado tan chistoso. Sonrió y me rio como bobo.

—¿Cómo te sientes? —Me pregunta.

—¡Estoy bien! Se me antoja otro vasito de alcohol.

—No. Es suficiente.

—¿De verdad? ¡No me digas que no! No es justo que ya no me quieras dar más —parezco desilusionado.

—Lo siento Julen, pero no puedo dejar que bebas más. Ya estas lo suficientemente borracho como…

—¡Quiero ir a bailar! —Lo interrumpo.

Y salgo del baño a toda velocidad. Corro, la música suena y yo me siento con mucha fuerza eufórica. De pronto, me tambaleo y caigo al suelo. Mis manos acarician el suelo, está frío, sonrió y no entiendo nada de lo que estoy haciendo. ¿Me veré bien?

Comienzo a incorporarme, me hinco y cuando estoy por levantarme, su mano atrapa mi mano. ¡Me levanto al instante!

—¿Estas bien? —Su voz, eso me gusta. Su tono tan vivo y grave.

—Yo estoy bien.

Su rostro me encanta, sus ojos están enfocados en mí. ¡Quiero tocarlo!

—Te llevaré a casa.

—No. Aún es temprano. ¡Quiero bailar!

—Raul me acaba de contar lo que pasó.

—¿Y que pasó? —Mi risa borracha me tiene descontrolado.

—Alguien intentó…

—¿Quien eres tú? —Apunto mi índice contra su pecho.

—Soy Christian. ¡Tu jefe!

—¿Mi jefe?

—Sí, yo…

—No, no, no, no. Tú no eres mi jefe. ¡Yo bese a mi jefe! ¡Mi jefe me beso a mí! —Vuelvo a reír. ¡Estoy en una realidad giratoria!

Me siento chido. ¿Por qué tengo tantas ganas de besarlo? ¡Este hombre está bien guapo!

—Te llevaré a casa. Dame tu mano.

—No. Yo voy a bailar.

Comienzo a caminar, me agarra una mano y yo se la arrebato. Vuelvo a caminar y me caigo una vez más. ¡Esto está mal! Me da vueltas todo. El suelo me gusta. Me acuesto boca arriba y lo veo observarme. Se agacha.

—Levántate, te estás ensuciando.

Un sentimiento sensible surge en mi interior. ¡Quiero seguir adelante!

—¡Me gustas! —No me da miedo decirle.

Sonríe tenuementez

—¡Lo sé! Tú también me gustas.

Sus palabras me emocionan a tope. Me siento en el suelo.

—Vamos, te llevaré a casa.

—¡Está bien!

Me toma de la mano, entrelazamos nuestros dedos y salimos de allí.

En su auto yo soy el que pone la música. Mientras busco algo que excite a mi borrachera.

—¿Cómo te sientes? —Quiere averiguar.

Dirijo mi vista a él, sus manos fuertes están aferradas al volante y se ve muy concentrado al frente. ¿Por qué tengo muchos pensamientos en este momento?

—¡Me siento chido! —Dejo escapar una risa boba.

—Bebiste demasiado otra vez.

—Solo un poco.

—¿Un poco?

—Sí.

Prosigo con la búsqueda de canciones y descubro We Can’t be Friends de Ariana Grande. ¡Me siento emocionado! El alcohol en mi sangre hace que yo abra el quemacocos del auto.

—¿Qué haces?

—Quiero ver la ciudad así.

Me quito el cinturón de seguridad y me pongo de pie. Atravieso el quemacocos, el viento me golpea en la cara y yo me siento bastante bien. ¡Estoy emocionado! Veo los edificios iluminados, las luces de toda la ciudad y la euforia borracha me hace sentir bien. ¡Me dan ganas de llorar! Me siento tan feliz. ¿Cuando fue la última vez que me sentí así? Por supuesto, antes de que ellos murieran. ¡Y no tenerlos aquí me duele!

—¿Te gusta lo que ves? —Pregunta Christian.

—¡Es increíble!

Le sube el volumen a la canción. Elevo mis brazos y de forma completa, me siento eterno.

...🍬🍬🍬...

Abro los ojos. Siento la boca súper seca y me siento en la cama. Ligeramente mi cabeza todavía da vueltas. Apartó las cobijas de mi cuerpo. Pongo los pies en el suelo y me doy cuenta de que no estoy en la habitación de huéspedes. ¿En donde dormí?

Su cuerpo está acostado. Tiene el pecho desnudo, hay vello en medio de su pectoral y este traza un camino hasta el hombligo y seguramente, continúa hasta su…

—¿Pasó algo anoche? —Pregunto sin pena.

Christian está dormido, no me responde y quiero dejarlo así. Voy al sanitario. Veo mi traje en el suelo y eso confirma que seguramente tome un baño antes de meterme a la cama.

Orino bastante. Tiro la carga de agua. Me detengo frente al espejo. Tengo ojeras y cansancio. ¿Debería volver a dormir? Mi boca sabe un poco amarga. Uso un poco de enjuague bucal. Juego el liquido con mi boca. Escupo. ¡Me siento mejor!

Salgo del baño. Christian sigue durmiendo. Compruebo la hora en mi celular, son las diez treinta de la mañana.

Me subo a la cama. Me siento y fijo la mirada en su rostro. ¡Se ve tan lindo! Duerme plácidamente. Su pecho sube y baja al ritmo de su respiración. ¡Este hombre es hermoso! Elevo mi mano hasta su cara y doy unas ligeras caricias en su mejilla. Siento un deseo de besarlo. ¿Estaría bien? Sonrió. Me ruborizo y al final, planto un beso en su mejilla.

Abre sus ojos, no me asusta. Sonrió. Me ruborizo más. Mueve sus cejas.

—¿Así me das los buenos días? —Pregunta.

—¡Por supuesto! ¡Buenos días Christian!

—¡Buenos días Juls!

...🍬🍬🍬...

Son las tres de la tarde. Estamos sentados en el sofá de su sala y el televisor está encendido. ¡Salieron más capítulos de Cautivar a un Rey!

—¿Por qué te gusta ver dramas? —Pregunta curioso.

El capítulo acaba de finalizar.

—Porque me gusta el romance. ¡Soy súper fan! Y el drama también me encanta.

Me mira con curiosidad.

—¿Tienes expectativas altas de un romance conmigo?

—No. Bueno. No he pensado en expectativas, pero me gusta todo lo que hemos empezado a vivir.

Sonríe.

—¿De verdad te gusta estar conmigo?

—Eres buena onda. Bueno, al principio eras engreído y mandón. Todavía eres mandón de vez en cuando.

—¿Soy mandón?

—Claro. Eres el jefe de una empresa importante. Es obvio que seas de carácter profesional y con habilidades de dirigir.

—¿Te ha gustado lograr una pasantía en mi empresa?

—Sí. Cuando me contrataron me sentí súper contento porque era un puesto que quería.

—¿Te gusta ser secretario?

Niego al instante.

—No mucho. Al principio no. Ahora ya lo he asimilado.

Se me queda mirando fijamente.

—¿Qué crees que podría haber pasado si te quedabas en el anterior puesto, como capturista? ¿Nos habríamos enamorado?

Sus preguntas me hacen pensar. Medito un poco, lo miro a los ojos.

—No lo sé. Quizá no.

—¿No crees que hubiera sido posible?

—No. Y eso me lleva a preguntarte algo.

—Claro, pregúntame lo que quieras.

—¿Soy el primer chico del que te enamoras?

Extiende su brazo sobre mi cuello y yo recargo mi cabeza allí. ¡Esto es reconfortante! Nos quedamos en silencio por varios segundos.

—Eres el primero.

Su respuesta me hace feliz.

—Tú también eres el primer hombre del que me enamoro.

—Eso me da gusto.

—A mí también.

Su brazo se mueve y me obliga a alzar la cara. Él se acerca a mí y planta un beso en mis labios. ¡Me aprieta a su cuerpo! Muerdo su labio inferior y disfruto mucho de este suceso.

—Vámonos. Es hora de ir a alistarnos para el evento de esta noche —dice al alejarse de mis labios.

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Comments

Diana Quintero

Diana Quintero

Christian es el primer hombre que se enamora, ya que le gustaban las mujeres 🤭🤭

2024-04-21

3

Mary (Lupis❤️🌹)

Mary (Lupis❤️🌹)

😍😍😍😍

2024-05-12

0

Scarlet José

Scarlet José

y el último verdad/Proud//Chuckle/

2024-03-31

3

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