JAMES (CAP. 17)

Ese año me recibí y tuve entrada directa en el FBI.

Pasaron casi 3 años y es 09 de diciembre. Hoy cumplo 25 años. Mi padrino tiene que atender una reunión general con los altos mandos, así que solo seremos Martin, Cruz y yo.

Los chicos cayeron en mi casa, en DC, temprano. Martin con 24 años, ya está preparándose para su retiro de los SEAL. Mi tío querrá jalarse los pelos, estoy seguro que quería dejarle el cargo. Ya está empezando a organizar todo en su empresa de seguridad y Cruz lo está ayudando con la seguridad informática, dándole unos buenos programas.

Martin me mira y le devuelvo la mirada. Estamos preocupados.

Cruz es el menor de nosotros y, aunque antes era full risas y diversión, ahora está como apagado. Sí, tuvo que ponerse los pantalones de jefe de familia y convertir su hobby en un medio para sacar dinero, no del todo limpio, cuando era un niño; pero parece que desde hace un tiempo le está cobrando factura esa vida y esa carga que se impuso.

Está recostado en mi sillón, con la mirada perdida en el techo.

* ¿Qué te pasa?

Le pregunto, porque siento que no hay tiempo para decir las cosas con sutileza. Cruz mira a Martin, pero cuando ve que este lo observa, cierra los ojos, suspira y mira al suelo.

*- Tengo 22 años, desde los 13 tuve una vida tan acelerada, que siento que ya no me queda energía para más. Todo me aburre. Mi familia está en Knoxville y todavía me faltan dos años para la doble licenciatura en Stanford. Estoy lejos de ellos. Incluso, cada uno tiene una cuenta bien gorda de dinero. Ya no soy necesario. No soy estúpido. Sé que ellos y uds, par de viejos, se preocupan por mí. Simplemente, no hay nada que quiera, nada que me llame la atención, nada nuevo que despierte mi curiosidad. Me siento cansado e insensible...

Lo que más me preocupaba, es su actitud. En este tiempo, he tenido varios casos, varios testigos. Muchos son informantes, porque la moral los guía; otros, porque no temen morir y son tan imprudentes, como si invitaran a la muerte. La característica principal de esas personas son sus ojos y expresiones; las mismas que veo en Cruz.

**- Cruz, ninguno te tratará como un niño, así seas el bebé del grupo. La vida es jodida. A veces terminas sin nada, sin siquiera una base para tenerte firme y empezar a subir. No es tu caso. Tienes a tu familia y a nosotros, aunque solo somos tus amigos por el dinero, tu familia daría todo por tenerte bien.