Primer día de clases

La escuela Johnson es la escuela más antigua de San Carlo un lugar con mucha historia, en esta escuela es donde muchos momentos tristes y divertidos se darían a acontecer.

Llegando a las puertas de la gran escuela Amelia se puso nerviosa, sus pulsaciones se aceleraron y sus manos le sudaban frío del nerviosismo.

Jack: Vengo a recogerte más tarde hija, suerte mi princesa.

Amelia: Gracias papá.

Los niños de diferentes edades entraban a la escuela acompañados en grupo o solos, al no conocer a nadie del lugar entré y pregunté dónde era mi respectivo salón de clases.

El acabado interior de la escuela era de estilo vintage y tenía muchos pasillos y puertas donde se ubicaban otros grados, también había un gran comedor. Cuando llegué a mi aula había muchos niños, algunos de mi edad y otros mayores; Pasé por el medio del salón de clases donde las carpetas estaban separadas en dos secciones, una fila para niñas y otra para niños.

Por alguna extraña razón algunas niñas estaban sentadas en las carpetas de los chicos y miraban el juego de canicas hasta que ví un rostro familiar y era el centro de atención de todos, especialmente de las niñas que no dejaban de parlotear.

Amelia: *Sorprendida* [Es Lehan!]

Su expresión de sorpresa no desapareció de su rostro hasta que Amelia volvió en sí y busco un asiento libre para poder ocuparlo e instalar sus pertenencias. Una vez instalada el profesor entro al aula en una mano sosteniendo una varilla y en la otra mano un libro de historia, al instante todos los niños tomaron asiento y guardaron silencio.

Amelia: [Da miedo el maestro, luce inexpresivo y con esa varilla que estuvo sosteniendo desde que ingreso al aula...]

Profesor: Atención pequeñas calabazas, para los que me conocen y los que recién ingresaron a la escuela, yo soy el profesor Antonio de historia y seré su tutor hasta fin de su ciclo escolar (lamentablemente) Así que no esperen a que sea cariñoso y paciente como la señorita Mary *Azota la mesa*

*Susto*

Profesor: Las reglas son simples, si me entero de algún escandalo o alguna violación a las normas del salón establecidas por dirección * Azota la mesa con la varilla* Habrá consecuencias, entendido?

- Claro y fuerte profesor!-

Profesor: Bien, comencemos las clases.

Y de esa forma algo tosca dió el inicio de clases, en las dos primeras horas todo estuvo tranquilo por el momento en el área de historia hasta que el profesor mando a entregar las pizarras pequeñas para hacer la actividad que nos dejó.

Profesor: Tú niño del cabello escandaloso.

Lehan: ¡!

Profesor: Entrega las pizarras a tus compañeros.

Lehan: Si maestro.

Entonces Lehan entrego de abajo para arriba de las filas hasta llegar al último asiento de la fila de arriba para así encontrarse a un rostro familiar que no notó cuando entro al salón de clases y quedó sorprendido viéndola.

Está mirada fue percibida por Amelia cuya mirada se encontró con la de él y de pronto se sintió intimidado por esa mirada de enfado.

Lehan: [Entonces, ¿estamos en el mismo salón para poder vengarme por el rodillo que me tiraste en la mano? ¿por qué me miras de ése modo? ¿Acaso no te agrada verme que pasaremos todo el año escolar juntos? jajaja, será divertido molestarte]

Profesor: Qué haces viéndola tanto tiempo, acaso te gusta?

Lehan: *Voltea avergonzado* Ehhh!!! Para nada! no me gustan las nueces!

*Risas*

El profesor no dijo nada con respecto a Amelia que también se quedó viendo fijamente a los ojos de Lehan, al ser una niña recién ingresada no podía hacerla avergonzar de tal forma y se desquitó con Lehan en son de venganza por ser el más imperativo del salón.

Lejos de las miradas de los demás a una joven niña no le gustó para nada lo sucedido, se sentía amenazada por Amelia.

- [La broma de ese estúpido no tiene gracia, nadie me va a robar lo que es mío, con qué derecho esa mocosa se atreve a mirarlo y llamar toda su atención , ¡no me gusta nada! Campesina ignorante, Lehan es mío desde la primera vez que lo ví]-

- A Lehan le gustan las nueces, a Lehan le gustan las nueces, jajaja

Profesor: Sigamos con la clase calabazas, tienen 20 minutos para resolver el ejercicio.

Amelia:[ Como el profesor puede decir algo así... No deseo para nada que ése niño se fije en mí] * Comienza a escribir* [Puedo sentir pena por la perdida de sus padres pero lo detesto, es muy molesto...]

Patio de la escuela.

Grupo de niños jugando con canicas.

- Ya cuenta Lehan, acaso te gusta esa niña fea?

- Parece un espantapájaros, jajaja

Lehan: Para nada,cómo podría gustarme alguien tan fea.

- Pues eso no es lo que parece, por qué te la quedaste viendo por un buen rato si no te gusta?

Lehan: Deja de decir tonterías, aún estoy muy pequeño para pensar en eso, solo quiero terminar la partida e irme porque son insoportables.

- Eso si duele proveniente de un amigo

Lehan: [No soy tú amigo... Ustedes fueron los que se me pegaron por Florentina...] *Alza la mirada*

En una esquina de la escalera de piedra, Amelia esta sentada comiendo su lonchera sóla mirando su entorno con una expresión un poco triste.

Amelia: [Pensé que haría nuevos amigos... Nadie se me acercó a hablar, las niñas me excluyen y me miran con indiferencia]

Perdida en sus pensamientos, Amelia no se dio cuenta de que alguien se le acercó y le habló.

Amelia: Eh!

- Hola, ¿cómo estás?

Una suave y dulce voz resonó en los oídos de Amelia, volteó a ver quién era y se encontró con una hermosa niña de cabello plateado, ojos violetas y tez pálida que parecía una muñeca de porcelana.

Amelia: Me hablas?

- Si, por supuesto.

Amelia: Oh, bien gracias.

- Disculpa por ser descortés, mi nombre es Florentina Muller.

Amelia: Un gusto conocerte Florentina, me llamo Amelia.

Florentina: Que bonito nombre.

Amelia: Necesitas algo en lo que pueda ayudar?

Florentina: De hecho nada, solo pasaba por aquí y te ví sola, veo que las chicas aún no se te acercaron.

Amelia: ... ...

Florentina: Podría sentarme a tu lado?

Amelia: Claro!

Mientras ellas conversaban a gusto el grupo de niñas se acercaron a ellas y entablaron una entretenida conversación, con la sola presencia de Florentina hablándole pudo llamar la atención de todos.

- Que bonita Amelia son tus trenzas.

- Te gustan las empanadas de carne? Quieres una?

Amelia: *Sonríe* Oh, gracias.

En la entretenida charla de niñas de pronto la campana de la escuela sonó y todos los niños entraron a la escuela.

Florentina: Tenemos que irnos Amelia, ya van a comenzar las clases, ven *Extiende su mano*

Amelia: Si.

Tomadas de las manos ambas niñas entraron juntas y se dirigieron al salón de clases, al llegar Florentina cargo sus cosas y se sentó al lado de Amelia por lo que todos se llenaron de sorpresa.

- Qué buena es Florentina al hacerse amiga de la nueva niña.

- Tan encantadora y delicada Florentina -

Lehan: [¿Ella también va a ser parte de esas molestas chicas? Algo no me cuadra, Amelia no es exactamente el tipo de amiga que se junta con Florentina... Pero viéndolas juntas, una parece un patito feo y la otra un hermoso cisne]

Sin darse cuenta Lehan, las miró por un largo rato y Florentina lo notó y le dedicó una encantadora sonrisa que terminó por sonrojar a Lehan y rápidamente apartó la mirada.

Florentina: [Que bonito]

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