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Corro al exterior del pasillo, llego a la barra acercándome a Olivia, la tomo de la muñeca y empiezo a correr con ella, no le doy tiempo de dejar el vaso en la barra, sigo escabulléndome de la gente, puedo sentir como nos siguen casi casi pisándonos los talones, entre nuestra huida rápida provocamos que la gente se enfade al derramar sus bebidas, hasta que ambas salimos del bar, mi amiga me sigue el ritmo, llegamos al auto...

--!Arranca!-- le digo, ella frunce el ceño, yo me subo y ella hace lo mismo-- !Arranca ya!

Ella obedece, enciende el motor y el auto avanza a velocidad, el viento revuelve mi cabello, volteo el rostro, y para nuestra gran suerte no han alcanzado a seguirnos...

--¿Qué paso?-- ya conducimos por la avenida hacia casa--¿A quién tengo que matar?

No le respondo, ella capta y sabe que no le diré por lo que solo se concentra a conducir a casa...

Entramos a mi habitación subiendo por la ventana a través de mi escape de sabanas, fue una gran lucha, pero por suerte no fuimos atrapadas por nadie, ahora estamos aquí ambas acostadas boca arriba en mi cama, en la oscuridad de mi habitación solo se refleja la luz de la noche a través de la ventana, ambas en silencio, no hemos musitado palabras desde que salimos del bar, y entonces Olivia decide romper el silencio preguntando

-- Annie ¿qué paso?

Giro mi rostro hacia el de mi amiga, luce confundida...

-¿Alguien se atrevió a hacerte daño? ¿quieres que vaya y liquide a quien lo hizo?

Santo Dios, y ¿ahora que le respondo?

Carraspeo tragándome mis lágrimas, me levanto sentándome y niego con avidez

--¡NO!, no te preocupes, no es nada de eso…

Y ella pregunta con rapidez

--¿Y entonces que mierdas es? solo fuimos por tu collar y luego emprendes una huida al estilo de rápidos y furiosos como si alguien nos siguiera...

Es cierto ¿ porque huí?, no lo entiendo, es como si toda mi miedo se hubiera convertido en adrenalina cuando me reconoció y sus recuerdos llegaron, sentí que debia irme, y correr, no se porque pero mi cuerpo se movio solo...

Habia sido grato conversar con él, su risa era un buen sonido que había quedado en mis oídos, y no queria admitirlo muy pronto pero me agradaba, ese chico parecía arrasar y llevarse adelante a todos aquellos que consideraba una amenaza, pero, al entablar conversacion con el te dabas cuenta que no, que solo necesitaba compañía, y me agradaba...

¿Quizas me agradaba de más?

--Bueno yo solo...-- el hipo me hizo sobresaltar...

--Sea lo que sea que me vayas a decir, sé que es una mentira…

Suelta un largo suspiro y se vuelve a acostar en la cama mientras el sonido del hipo continua, me observa desde la cama poniendo sus brazos detrás de su cabeza mientras dice con simpleza

--Está bien, no me lo digas…

No, es que, si muero por contárselo, pero no sé cómo vaya a reaccionar y ¿si no se lo toma bien?, me muerdo el labio inferior, mientras mi amiga relajada silba acostada en la cama una canción desconocida atormentándome.

--¡Me entregue a alguien!

Olivia frena su silbido y se levanta como un resorte sentándose frente a mí con rapidez

--¿Qué mierda?

Me muerdo el labio inferior antes de empezar a contarle todo lo ocurrido, mi amiga asiente en momentos escuchando todos los detalles, termino mi relato y la habitación se queda en silencio sepulcral.

Después de unos cuantos segundos mi amiga carraspea un poco y musita

--Esto debe ser una maldita broma…

Niego con mi cabeza en silencio.

--Te entregaste a un completo desconocido, que ni siquiera sabes su nombre, ni cuantos años tiene…--Mi amiga susurra con reproche -- Solo sabes que es un salvaje-- Pasa las manos por su cabello revolviéndolo mientras yo triste confirmo con mi cabeza-- Hoy lo volviste a ver y te gusto un poco más...

--Si, ¿que deberia hacer?

--¡Nada! Te prometiste que seria solo por una noche, y ya está,así que, OLVÍDALO, ya no lo volverás a ver…

Olivia tiene razón, debo olvidarlo.

Susurro en el pecho de mi amiga

--Tienes razón Oliv…--Sería demasiada coincidencia que lo vuelva a encontrar...

Ella asiente con confianza...

--Hemos recuperado el collar, lo que paso en el bar se queda ahí, hagamos como que nunca pasó, ¿si?...

Asiento...

--Lo que paso en el bar, en el bar se queda...

Unimos nuestros meñiques, y nos tocamos el pecho en el aréa del corazón...

--Promesa de corazón...-- juramos ambas...

Además solo hay 0,0000001 de probabilidad de volverme a encontrar al sujeto lo que lo hace imposible o...¿Tal vez lo es?