GEMMA.
Toda una semana le supliqué a mi primo que me dejara trabajar junto a él, sé que aún no tengo una carrera, pero en estos meses e comenzado a estudiar en línea, pensé que se opondría pero mi sorpresa fue lo contrario, me dejó trabajar a su lado como su asistente, a sido tan maravilloso sentirme útil y sobre todo mantener mi mente ocupada.
Entre más avanza mi embarazo, la Nona siempre me pregunta que si llegó a tener antojos no dude en decirle ella estará más que feliz en preparar lo que mi bebe quiera, pero lo más extraño es que no, e leído un montón de post sobre el embarazo y en otras plataformas en todas dice que siempre la madre experimenta antojos ya sea dulce, salado o combinados, pero parece que mi hijo no tiene ganas de nada, las náuseas ya no me atormentan más, al igual que los vómitos matutinos, vespertinos y nocturnos.
Se podría decir que hasta este momento me siento plena y muy feliz, rodeada de gente que me ama y que están felices a la espera de mi hijo, porque puedo estar cien por ciento segura que será un varón...
Bajo las escaleras para ir a desayunar, al entrar están esperándome, Gianni al verme acaricia mi panza hasta dejar un beso sobre ella, sintiendo el terremoto en mi interior, desayunamos en silencio, nos despedimos de mi tía y la Nona, hasta salir directos a la empresa.
Al llegar caminamos al ascensor bajo la mirada de todos y sé que son miradas de curiosidad e intriga, al subir solo me ve Gianni quien termina abrazándome, salimos del ascensor caminando el largo pasillo, hasta entrar a la oficina, mientras se sienta mi primo le preparo el café hasta dejarlo en su escritorio.
- Gemma sabes que no es necesario lo del café, yo puedo hacerlo- niego sacando la agenda de mi bolsa.
- a mí me gusta hacerte el café cada mañana- él asintió acomodándose en su silla.
- bueno, dime que reuniones tenemos para hoy- asentí abriendo la libreta.
Diciéndole todas las reuniones pactadas para este día, empezaría dentro de dos horas y la última sería hasta las diez de la noche así que hoy llegaría literal muerta de cansancio
Las horas avanzaban hasta que ya estábamos en la última cita, reuniéndonos con unos hombres rusos que intimidaban, bueno al menos a mí si, porque a Gianni no se inmutaba ni un milímetro.
Después de la dichosa reunión, por fin salíamos a respirar aire fresco camine hasta el auto de mi primo, pero él me detuvo.
- ¿que sucede?, Gianni- de su bolsillo saco un pequeño collar con un camafeo- ¿y esto?.
- desde hace meses quería dártelo, pero quería estar seguro que estabas bien- lo vi extrañada porque no entendía a que se refería.- ábrelo, espero te guste mi sorpresa.
Al abrirlo lo primero que vieron mis ojos fue la pequeña foto de mamá, sentí mi corazón estrujarse, sonreí hasta abrazarlo y solo rompí en llanto, apretándolo fuertemente.
- gracias, es el mejor regalo que pudieron darme,- asintió dándome la vuelta, colocándome el colgante.
- yo encantado de hacerte sonreír por un momento- asentí acariciado con mi dedo el camafeo, me abrió la puerta hasta subir.
- que te parece si vamos a cenar, tengo hambre ¿tú no? - sonreí hasta asentir.
- no mucha pero vamos,- él solo asintió hasta encender el auto poniéndolo en marcha.
Al llegar pedimos nuestra comida, sintiéndome a gusto, ya que mi primo lo siento como mi hermano el que nunca llegue a tener, al terminar solo fuimos a caminar a un pequeño parque, Gianni me interrogo, quería saber cómo sucedieron las cosas, no entendía para qué pero le conteste absolutamente todo sin omitir ningun detalle como cuando le platique a mi tía, tanto lo que sucedió para quedar embarazada como la vida que lleve al lado de papá y su mujer.
▪️▪️▪️▪️▪️
LEANDRO.
Últimamente, me e sentido extraño, me da más hambre de lo habitual, hasta suelo levantarme en la madrugada a comer algo del refrigerador, me resulta más que sorprendente de mí, no es normal y eso papá, lo a comenzado a notar, haciéndome preguntas más que fuera de base.
Como puedo pensar que alguien puede estar embarazada si tengo meses sin meterme con alguien, algo que también me resulta más que extraño para mí, nunca había durado tantos meses, pero solo no tengo ganas, e dejado de fumar porque me es desagradable y de tomar, ni se diga.
Renato al enterarse no a parado de hacerme sus típicas burlas de mis extrañas limitaciones, Erick el médico de confianza me a echo diferentes exámenes y todo está mas que en orden, resultando aún más que extraño, no sé que me sucede, pero averiguaré y partiré desde la pregunta que me hizo mi padre, ¿será que alguien está embarazada?...
Bajo las escaleras y al oler la comida que proviene de la cocina hace que mi estómago se alebreste más, me siento a lado de mi padre, él solo me ve y niega hasta que habla siendo más que directo conmigo.
- Leandro, hijo, sabías que también uno de hombre experimenta los sintomas del embarazo- niego y vuelvo a reír como en las anteriores ocasiones.
- no, no sabía, pero tenlo por seguro que no hay ningún hijo regado, si no créeme que estaría bajo mi protección- asintió comenzando a comer.
- solo piénsalo hijo, puede haber una mínima posibilidad y tú aún no te des cuenta de eso- negué comenzando a comer.
Estábamos desayunando omelette, pero inconscientemente pedí chocolate bañandolos por completo y comencé a comer con desespero pero alegría a sentir los sabores, papá solo me veía, se levantó tocando mi hombro.
- has memoria, hijo- me palmeo y se fue dejándome solo en el comedor.
Termine y salí a encontrarme en la bodega a Renato que al llegar volvió a molestarme con sus clásicas burlas infantiles.
- bueno ya pongámonos serios, Leandro tendremos que cambiar las rutas, la policía cada vez nos respira en la nuca- asentí entrando a la bodega, donde estaba la gente trabajando empacando la mercancía.
- si lo sé, pero sabes que tenemos que consultarlo con el gran Tomazzo, esas rutas son legendarias- asintió sirviéndose un vaso de whisky mientras me entrega uno.
- Renato sabes que no me pasa el alcohol- asintió burlandose.
- si, como digas mami- negué más que molesto, le arrebate el vaso y me lo bebí de golpe, solo pasaron segundos cuando regrese el alcohol mojando la alfombra y casi ahogándome- hermano, ¿estás bien?, discúlpame no quería que pasara esto.
- pero lo hiciste, que no entiendes que no sé que me pasa ¡carajo!, papá insiste que son síntomas de embarazo- se queda en silencio por un momento observándome hasta que solo niega- ¿que sucede?.
- no nada, no lo creo, se supone que tú siempre te cuidas en tus aventurillas- asentí sentándome en el sofá.- solo queda esperar a que te pase eso que tienes.
Asentí y nos pusimos manos a la obra de buscar nuevas alternativas para pasar la mercancía y poderle mostrar las nuevas rutas a papá, para que diera el visto bueno.
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Updated 28 Episodes
Comments
Socorro Ramirez
jajajaja me encanta, ojalá la encuentre. y la ayude a venganse de esas arpías. oosshhh, las odio.
2024-11-28
1
GiovannaXchelMayaCejudo
ay Dios mío 😳😱🤯
2024-11-19
1
Joscelyn Galvez
jajajajajaja genial que el tenga los malestares a esperar como será su reacción al enterarse del hijo
2024-05-22
4