Mentirosa

Archer al llegar a casa, se muestra muy cariñoso con Lissy, la abraza.

- Mi amor, te cuento que tuve un día muy aburrido, pero como tenía miedo de salir a la calle me metí a la piscina para relajarme un poco.

- Qué bueno que te hayas podido relajar.

- Pero los sirvientes me han tratado mal, les pedí una toalla y le trajeron un trapo.

- ¿Cómo se atreven a hacer esto?

- Eso no es todo mi amor. Tuve que gritarles para que se apuren, ellos no me quieren.

Archer está enojado.

- Quiero a todos en mi estudio. - ahora se dirige a su novia - arreglaré el asunto mi amor, ellos tienen que aprender a darte atención.

- Soy tu futura esposa, ¿Por qué no me aceptan? ¿Es por qué fui secuestrada?

- Es un pretexto estúpido. Pero no volverá a suceder.

- Mi amor, no demores. No quiero sentirme sola más tiempo.

- Debo arreglar el asunto primero, luego pasaremos tiempo juntos.

-Te espero en el cuarto entonces.

- Ve, ya vengo.

Archer entró a la sala de estudio. Se sienta detrás de su escritorio, teniendo a la vista todo el personal de servicio. El mayordomo es quien da la cara.

- Se puede saber ¿Por qué odian a mi novia?

- Señor, nada de lo que hacemos le gusta. Las órdenes son a medias, hay que adivinar.

- ¿Estoy escuchando bien? Me están diciendo que mi novia no sabe dar órdenes. Es mi futura esposa, y más vale que la respeten. Mucho cuidado con insinuar que ella no sabe dar órdenes.

- La señorita lamentablemente no es honesta. Ella tuvo una visita el día de hoy. Vino un joven y pasaron la tarde.

- Mentira, mi novia me dijo que pasó el día sola, y si ella dice eso es por qué así fue. Dejen de odiarla, yo les pago para que la sirvan. Tienen que obedecer las órdenes que ella dicta ¿Quedó claro?

- Si señor.

- Largo de mi vista.

Todos se fueron. Archer se fue a su habitación, suspiró y le sonríe a su novia y juegan a los cariñosos. Los empleados domésticos se quejan todos contra el mayordomo.

- Ella es una mentirosa.

- Ella es quien nos odia.

- Esa es despreciable.

- Tenemos que aguantar y seguir juntando evidencias para que en el momento propicio se le entregue todo. Un solo video no es suficiente, unas fotos tampoco hay muchas cosas que el secretario necesita investigar.

- ¿Cuánto tiempo vamos a estar en esa condición? Desde que la mentirosa llegó todo se ha vuelto insoportable.

- Estoy en contacto con Simón. Está noche me va a llamar, nos vamos a poner al día. Pero por favor aguantemos, hay movimientos que tenemos que hacer.

- Que el secretario se apure quiero renunciar.

- El aguante tendrá su recompensa.

A la noche, Simón se comunica con el mayordomo.

- Buenas noches, señor Rivera.

- Buenas noches, señor. He visto el vídeo, por lo tanto, la señorita Lissy nunca fue secuestrada. Ahora bien, está tarde he ido a visitar a la señorita Emilia, la seuda secuestradora, está bien y no quiere saber nada en absoluto del señor presidente. No me dio la confianza y no quiere a nadie relacionado con el señor presidente, no se puede ir a visitarla.

- ¿Cuál es el próximo paso? La señorita Lissy es mentirosa y mucho.

- Es fácil, haré arreglos de manera que el presidente tenga que venir con papeles, en un descuido haré configuración de celular.

- Tendría que suceder un milagro para poder configurar los equipos.

- No, no creo que sea problema. El guardaespaldas es más hábil que yo. Ya lo coordinaré.

- ¿El guardaespaldas está en nuestro equipo?

- Si la señorita Lissy es mitómana debemos actuar rápido y eso va a perjudicar a todos.

- Aquí tenemos personal dispuesto a renunciar.

- No, eso no es favorable. Voy a ver la manera de hacer un movimiento lo más rápido que pueda.

- Está bien.

- Manténganse alerta. En cualquier momento haremos el movimiento.

- Entendido.

- Nos estamos comunicando, buenas noches.

- Buenas noches.

Al día siguiente, la pareja Blackville se despierta enredada entre sábanas.

- ¿Cómo estás mi amor?

- Yo, bien ¿Te quedas hoy en casa?

- No, estamos en un negocio muy importante y necesitamos evaluar todos los puntos antes de dar el siguiente paso.

- ¿Me dejarás sola otro día más?

- Amor, espero me comprendas, el mundo de los negocios bancarios todo procedimiento toma tiempo, no sé puede tomar a la ligera.

- ¿No puedes cancelar la reunión?

- Es imposible.

- ¿Cuánto tiempo más voy a estar solita?

- Paciencia. La paciencia es una virtud, si aprendes a esperar todo valdrá la pena.

- Está bien.

Archer toma desayuno y se va al trabajo. Los sirvientes se ponen a hacer la limpieza profunda. Remueven todos los muebles, sean sofás, sillones, reposteros, hasta las cortinas son removidas y llevadas a la tintorería. No dando oportunidad a Lissy de poder estar echada sobre el sofá dando órdenes y llamando por teléfono. Después de la llamada ella envío un mensaje Archer.

- Archer, los sirvientes han desaparecido los muebles y hasta las cortinas. Están enojados porque ayer los regañaste. Están tomando venganza y ni siquiera me han dado los buenos días.

Archer tiene el teléfono apagado, está en una reunión, así que Lissy no recibirá respuesta. Ella no se queda de brazos cruzados, baja las escaleras y reniega al personal.

Archer tuvo una reunión muy larga y difícil. Al salir, fue para la prisión, eran las cinco de la tarde. Emilia está ingresando al centro con sus amigas y se encuentra con el venado cara a cara.

- Tenemos que hablar. – Su voz es muy autoritaria.

- No hay nada de qué hablar.

- Tenemos que hablar. - se impone fuertemente.

Y la hace pasar a su celda, los carceleros cierran la puerta por seguridad y se van para no violar la privacidad.

-Tengo necesidad, soy hombre y no puedo resistir. Así que obedece o te irá mal.

Emilia teme por su bebé, no sabe qué hacer, las celdas son espacios reducidos. Archer se bajó los pantalones.

- ¡De una vez! - Levantó la voz.

Emilia tuvo que obedecer. Justo lo que no quería ver lo tuvo hoy. Archer obligó a Emilia a estar con él por media hora, no fue rudo, pero tenía que descargar toda su frustración en ella. Una vez descargado todo su estrés, levantó sus pantalones y se fue. Emilia lloraba, sentía asco y mucha incomodidad, temía por la vida de su bebé.

Al llegar a casa revisa su celular y tenía una infinidad de mensajes de Lissy y solo para quejarse de que la han maltratado. Archer ingresa a casa y ve las cortinas cambiadas, los muebles con fundas cambiadas también. La disposición de los muebles también ha sido modificada. El piso fue lustrado, por lo que hoy se hizo limpieza profunda como es costumbre cada mes.

- Archer, me han humillado, me han hecho vivir el infierno. Tus empleados me odian.

- Cariño, ¡No crees que exageras! Han cambiado todas las cortinas, la funda de los muebles, la disposición de los muebles.

- ¿No te importa como he quedado yo?

- Hablaré con ellos. Pero por lo que veo hicieron el trabajo que tienen por costumbre cada mes.

- ¿Los estás defendiendo? ¿No me consideras siquiera un poco?

- Es mi culpa, la soledad te está afectando. Pero no hace falta que exageres. Pero igual hablaré con ellos.

- Odio a todos los que trabajan aquí –alzó la voz– los odios hasta la médula, así como ellos te odian.

- Lissy, por favor tuve un día difícil con las negociaciones. No necesito escuchar gritos.

- ¿Estás de parte de ellos? ¿Dónde quedo yo? Yo soy tu novia, soy tu futura esposa. Fui secuestrada, me dejas sola con toda esta gente que me odia.

- Lissy me duele la cabeza, no grites. Tuve un día muy difícil. Y no me pidas para estar juntos. No tengo ganas de ti está noche.

- A ti no te importa cómo me han tratado de mal. Solo te importan tus negocios. - empieza a chillar.

- Por favor querida. Basta. - levanta la voz para tapar la voz de Lissy.

- Me dejaron sin comer, me odian. Quiero que pienses en mí. Soy tu mujer – no deja de levantar la voz.

Archer ve un plato tapado sobre la mesa. Levanta la tapa y está con comida, está intacta.

- ¿Esto que es?

- Recién me han servido, te das cuenta.

- El plato está frío. Hace rato que fue servido.

- ¡Vez! Me han servido el plato frío. Cómo voy a comer comida fría. Me han dejado al hambre ¡Considerarme! Soy tu mujer.

- El plato está allí, podrías pedir que lo calienten en el horno microondas.

- Comer comida calentada ¿Estás loco? O sea ¿A tu mujer le das comida calentada?

- La soledad te está afectando, pero no pensé que tanto.

- Fui secuestrada. Necesito compañía. Suspende las estúpidas reuniones, y piensa en mí, pasa tiempo conmigo. - Ahora hace berrinche – Quiero estar contigo, más intimidad como pareja que somos. No me haces el amor cómo se debe, no me satisfaces.

Eso enoja a Archer. Que su novia lo tilde de incapacidad para hacerla mujer. Eso sí que no le gustó.

- ¿Qué dijiste? ¿Hiciste todo esto para decirme que soy incapaz de hacerte mujer?

- No mi amor, - quiere corregir lo que dijo - me tratan mal, porque me odian y tú ya no tomas mi cuerpo como antes, como si yo ya no te gustara.

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