Dos semanas después del caótico debut de Sarah llegó una carta para ella, una invitación de parte de Lessonas a su fiesta del té en una semana. Los condes se alegraron muchísimo de ello, pensaron que su hija tenía una oportunidad en la alta sociedad. En cambio Sarah sabía que esa fiesta sería bastante infernal.
-Debes prepararte adecuadamente -Insistía la Condesa.
Rápidamente pasó esa semana y Sarah no tuvo más remedio que presentarse.
Y allí estaba, delante de la entrada a la mansión de los Marqueses de Cyanspring, mirando la puerta como si ella fuera un animal y ese lugar el matadero.
-¿Vas a estar ahí de pie todo el día? -Dijo una voz femenina detrás suyo.- Me llamo Tracey Glidersummer, hija de los Condes Glidersummer. Me gustaría decir que es un placer pero me temo que no sería agradable mentir en nuestro primer encuentro.
Era una muchacha con cabello rubio muy voluminoso, vestía un vestido naranja con detalles de flores rojas y encaje amarillo.
«Típico de Leo»
Pensó Sarah para sí misma mientras se reía por dentro.
Ambas entraron en la mansión y la misma doncella seria las recibió y las condujo al invernadero donde las esperaba Lessonas. Tras saludarse según el protocolo, se sentaron y empezarón su dulce festín.
-Estaba empezando a pensar que no vendrías, cuñada. -Empezó Lessonas.
-Aún no somos cuñadas.
-¿Estás insinuando algo?
-No, solo corrijo tu error.
-Oh, querida... ¿No sabías que es de mala educación corregir en público? -Dijo Tracey.
-¿Lo es? -Respondió Sarah.
-Por supuesto, así haces sentir avergonzada a la otra persona. Pero no te preocupes, nadie nace sabiendo. -Dijo Lessonas.
-¿Que intentas decir?
-Nada en específico, solo que hay personas que tienen dificultad para aprender. -Contestó Lessonas mientras cogía su taza de té.
Sarah decidió no seguir esa pelea.
-Por cierto, ¿Como te va con tu prometido? -Preguntó la rubia.
-Bien.
-¿Segura? Ya que no bailaste con él en tu debut... Es algo muy extraño eso.
-Mi hermano tiene muchas cualidades, pero ser romántico no es una de ellas.
-Y por lo visto tampoco la delicadeza. -Rió Tracey.
-Tampoco tiene mucho cuidado con ciertas cosas. -Contestó Lessonas.
-Tengo entendido que ese tipo de hombres en ciertos momentos delicados... suelen ser muy bruscos -Dijo la Rubia fingiendo sorpresa y preocupación.
-Oh... Pobre Sarah... Me tiene ciertamente preocupada. Si no sabe ni defender a su prometido, mi hermano, ¿cómo podrá defenderse a sí misma en la sociedad?.
-Bueno, recordemos que hay veces que la belleza es suficiente.
-Si, aunque a veces se puede estropear con la forma de hablar. Para algunas es mejor hacer como una muñeca, apartarse y callar.
Al escuchar eso Sarah decidió que ya era suficiente.
-Me temo que algo que he comido recientemente no le ha ido bien a mi delicado estómago, así que me retiraré antes. -Dicho eso, Sarah se fue al interior de la mansión muy enfadada.
«No me lo puedo creer ¿Quién se ha creído que es?»
La joven iba tan enfadada y tan metida en sus pensamientos que no se había dado cuenta de que se había perdido por la mansión.
-Estúpida mansión gigante. -Dijo en voz baja.
-Pues esta estúpida mansión gigante será tu futuro hogar.
-¡Vinward! -Exclamó asustada y sorprendida.
-No sé de de que sorprendes, vivo aquí.
-Jaja... Se me había olvidado.
-¿Te has perdido?
-Puede ser
-¿Me acompañarías a ver el jardín? Tenemos un laberinto y una fuente preciosa.
El joven Vinward estaba tremendamente nervioso pero había aprendido de la sociedad a tener una máscara para que no vieran sus emociones.
-Vale.
Ambos salieron al jardín, era mucho más bonito de lo que prometía Vinward. Ahí Sarah se dio cuenta de que las palabras no eran su fuerte.
-¿En qué eres bueno?
-¿Debería ofenderme por la pregunta?
-Quiero decir, ¿cual es tu mejor talento?
-¿Por qué lo quieres saber? ¿Acaso estás aceptando que nos casaremos?
-Para nada -Rió Sarah.
Caminaron en silencio unos minutos, aunque no se hizo incómodo para ninguno de los dos. Era como si nunca hubiera pasado lo del beso con Tyneth.
-¿Y si te digo que soy bueno besando? -Dijo señalando sus labios sonrientes.
-Te preguntaría con quién lo has estado practicando -Siguió la broma Sarah.
-Sabes que he tenido otras prometidas, ¿No?
-Si, ¿Y?
Vinward rió.
-Eres única.
Siguieron caminando unos metros más en silencio.
-Tenemos que encontrar una forma de romper el compromiso. -Dijo Sarah repentinamente.
-Pero...
-¿No lo quieres romper?
-No
-¿¡Que!?
-Me siento cómodo contigo, eres diferente a las demás.
«Oh no... Como se declare ahora me tiro por un puente.»
-No me malinterpretes, si no me caso contigo tendré que hacerlo con otra y estoy cansado de eso. -Dijo mientras se sentaba en un banco en el jardín.
-¿Cansado de qué? -Preguntó mientras se sentaba a su lado.
-Cansado de la gente, de aparentar, de la sociedad... Por eso no termino de encajar y debo hacer el doble de esfuerzo. No puedo permitirme el lujo de ser yo mismo. -Suspiró.- Nadie puede.
-La gente es el problema, no soportan las verdades.
-¿Cierto?
-¿Y que me dices de esa forma tan retorcida de decir las cosas indirectamente? ¡No lo soporto!
Vinward rió.
-Yo tampoco.
Mientras reían y se quejaban de la sociedad, empezó a llover. Ambos se miraron y sonrieron.
Casi parecía un chico normal. En ese momento Sarah no se sentía como si fueran prometidos, se sentía como si tuviera un amigo. Eran dos personas riendo y pasando un buen rato. Sin olvidar lo atractivo que era y lo que deslumbraba su sonrisa.
-Vinward.
-Dime -Dijo girándose a mirar a Sarah.
Sarah se sonrojó al verle de otra forma y se le olvidó lo que iba a decir.
-Nada, nada. -Dijo desviando la mirada.
En un abrir y cerrar de ojos, sin que Sarah lo viera venir, tenía los labios de Vinward sobre los suyos.
-¿¿P-Pero que haces?? -Preguntó roja como un tomate apartando a su prometido.
En ese momento Vinward puso su mano derecha detrás de la cabeza de la joven para acercarla y besarla de nuevo durante un par de segundos. Al separarse, Sarah estaba más roja que nunca.
-Ahora sí. -Dijo Vinward.
Sin mediar palabra Sarah salió corriendo al interior de la mansión. Hacía rato que ya no sentía el frío, ahora solo sentía sus mejillas arder.
«¿¡PERO QUÉ HA HECHO!?»
Al escuchar los pasos de Vinward detrás, decidió entrar en la primera sala que pudiera para despistarle. Ahora mismo no era capaz de mirarle a la cara. Una vez en la habitación, cerró los ojos y empezó a centrarse en su respiración para relajarse.
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Updated 54 Episodes
Comments
Mayte Valles
el amor 💜 se siente en el aire 🥰
2024-08-29
0
Siara
pov: se entro en la habitación de vinward jasjkajaj
2023-01-19
5
Lorena Alvarez
😅🤣🤣🤣😂😂😂
2022-09-13
3