¡El definitivamente está loco!

Ya era hora de levantarse, lo sabía.

Había despertado hace varios minutos, pero el levantarse de la cama significa que todo era real y no quería que eso pasará.

Desafortunadamente, el hombre no tardo en aparecer mientras hablaba atraves de la puerta.

- Mi querida Principessa, si no te levantas ya, iré y te bañaré yo mismo!

- No lo hagas!! ya mismo salgo!.

Se levantó apresurada hacia el baño, lavo su cara, cepillo sus dientes y amarró su cabello.

Mientras se preparaba para darse un baño escucho la puerta abrirse de su habitación, se apresuró a la puerta del baño, cerrando con seguro, no sé arriesgaría a nada.

“ Talvez cambio de opinión y si querrá algo más... Dios no!!”

Pudo escuchar pasos por la habitación, se detuvieron en frente del baño.

- Tranquila, soy un hombre de palabra, recuerda solo son negocios, te he dejado ropa decente, esperaré afuera.

Los pasos se alejaron hasta que escucho la puerta cerrar.

Su cuerpo se relajo inmediatamente.

“Tranquila Elena, eres negocios, solo negocios”

-Solo negocios, negocios.

Se apresuró a la tina y tomo un baño rápido, no podía darse el lujo de tardar.

al salir del baño y acercarse a la cama, pudo ver un hermoso vestido sencillo pero elegante y unas sandalias plateada con brillantes, una ropa interior sencilla, nada extravagante, unas pantis comunes y un sostén blanco, eso la decepciono un poco.

Al colocarse el vestido se encamino al baño para verse, se sorprendió, la tela era suave y tenía un color rosa claro que parecía combinar muy bien con su color de piel, le llegaba a las rodillas, la parte de arriba es un hermoso diseño recto que no dejaba ver sus pechos.

El diseño parecía de esos que salen en las películas de los 50 pero con una sensación moderna.

"Es hermoso...Me imagino que este estilo lo usaba Marilyn”

Recordaba las películas viejas que veía con su abuela cuando escucho que tocaban la puerta.

- Ya vooooy!!

Se encamino hacia la cama y se colocó las sandalias con cuidado.

Al acercarse a la puerta el pánico y miedo la inundó.

“ Dios mío, que no me pase nada! te lo suplico!”

Era una mujer fuerte, debía enfrentar esto.

“Esto es importante, veré .. veré los alrededores y podré ver por dónde me escapó!"

Tomo aire y tocó un par de veces la puerta.

El hombre al verla no hizo ni un movimiento, se sorprendió por como le quedó el vestido.

- Vaya! Mi Principessa! Luces radiante, tal vez hasta sea divertido, cómo un proyecto de transformación, lo llamaremos... De sirvienta a princesa! suena genial!.

“ Definitivamente, este hombre está medio para allá.... talvez con un nombre como Enzo, le han hecho bullying y quedó con trauma"

Solo podía evitar reírse de el, no iba a jugar con fuego.

- ¿No? ¿Nada? eres una mujer aburrida - rodó los ojos-. De cualquier forma, es hora de ir por el desayuno, al cuál, gracias por la bella addormentata, vamos tarde - ofreció su brazo - vamos no seas tímida.

Se acercó con cautela y tomo su brazo, complacido por su obediencia comenzó a caminar.

Elena miraba sorprendida su alrededor, no era un palacio pero estaba bastante cerca, caminaban por enormes pasillos, pasaban obras de arte y muebles que debieron salir de revistas de diseñador, caminaron hasta llegar a una terraza qué tenía una hermosa vista al mar, con una mesa llena de alimentos.

el suelta sus brazos y se aproxima a la mesa.

"Si esto no fuera un secuestro, podría jurar que es un sueño...”

- Siéntate donde gustes.

Salió de sus pensamientos y se sentó en una de las sillas, miro los alimentos dudosa.

-No tiene veneno, puedes comer lo que quieras -hablo el hombre sin apartar la vista de su teléfono- recuerda, Eres negocios.

-Muy bien, muchas gracias.

Se sirvió en un plato panqueques y les coloco miel.

- Delicioso! -no pudo evitar decir- puedo tomar un poco de jugo? - pregunta mientras señala la jarra enfrente de ella-.

- Adelante, toma lo que quieras.

El desayuno paso tranquilo, la vista la relajaba completamente.

- terminaste?

Hace unos minutos que lo había hecho, pero la vista? nunca terminaría de analizar lo hermosa que es.

- Si.

-Muy bien, mia cara principessa, al observar la forma que ingieres los alimentos pude quitarme la preocupación.

- Preocupación?

- Por supuesto! tendría más trabajo si debo enseñarte a comer decentemente, es un alivio que no te comportes como perro muerto de hambre.

- ¿Disculpa?

- No te preocupes, no debes disculparte.

- No era una disculpa! -la indignación era obvia- para tu información señor príncipe, no soy un maldito mono con vestido! tengo modales y son muy buenos.

La miro sorprendido, no sé esperaba que le respondiera.

- Tienes razón, mi comentario estuvo fuera de lugar - se colocó en una mano en el pecho- chiedo scusa.

el silencio reino en la conversación hasta que ella decidió que debía recordarle algo.

- Recuerdas que yo no habló italiano verdad?

-cavolo dimenticavo!- cerro sus ojos y su palma toco su frente - cierto! no lo hacés.

-No, no lo hago.

- bien - abrió sus ojos y bajo su mano- chiedo scusa, me disculpo.

"Chiedo scusa, es me disculpo... recuerda eso, suena lindo"

- Está bien.

-Bien, ya comimos y hablamos, hora de irnos - se levantó y se encamino a la puerta - no vienes?

Se detuvo al ver que seguía en la silla.

- Debo ir?

- Acaso tienes opción?

"Maldición, tiene razón"

Se levantó y siguió al hombre de nuevo por los pasillos, se sorprendió al darse cuenta de que no iban a la habitación.

- ¿A dónde vamos? -pregunto con extrañeza - este no es el camino.

- Obviamente que no lo es, iremos a otro lado.

- Otro lado? a dónde?

- Ya lo sabrás, solo espera principessa impaziente.

ella rodó los ojos.

"definitivamente, está loco"

Llegaron a la entrada de la casa, bajaron los escalones y esperaron unos pocos segundos a qué el auto llegara.

"esto es definitivamente hermoso"

los jardines perfectamente cuidados, las fuentes con estatuas de hombres griegos, las flores.

- Definitivamente eres mafioso.

-Disculpa?

-bueno, está casa, bueno mansion, los jardines y todo...

- Oh!

solo quiso decir eso, no quería dar explicaciones.

el auto llego, era una carro de clásico, de cuatro puertas, era lindo? los autos no eran lo suyo.

Al entrar se colocó el cinturón de seguridad y el auto arranco.

Solo veía por la ventana, el paisaje.

los árboles pasando y el mar parecía más cerca.

"Bien, la casa está alejada de otras casas o el pueblo, no podría salir corriendo, me alcanzaría fácilmente... llevamos mucho rato en el camino, el lugar está lejos"

intentaba guardar toda información posible cuando se dió cuenta que las casas comenzaron a aparecer, llegaron a la ciudad.

-Ya podrías decirme a dónde vamos?

- Andremo solo a fare shopping - respondió distraído mirando y escribiendo en su teléfono-.

-Italiano de nuevo Enzo.

-Demonios! -se voltio Hacia ella - solo iremos de comprás.

ella recordó que mencionó algo de ropa para ella.

-no la traerán a mi habitación?

- Iban pero lo sentí impersonal, necesito saber cómo te quedarán exactamente, no quiero errores, aunque viendo cómo te quedó ese vestido será fácil.

se sorprendió por eso.

-Entonces, solo ropa?

- Solo ropa.

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- Ya Quiero irme!

- Irte? si apenas llevamos 5 horas.

- Exactamente Enzo!

- A las mujeres les encanta comprar Ropa, no sé porque te estresas tanto Elena.

- Ya tenemos ropa para un ejército!

El hombre miro su reloj.

-Para tu suerte tu deseo será cumplido, tengo cosas que hacer, así que vamos.

se encamino hacia la puerta, los asistentes llenaban el otro auto que el pidió ya que en el que vinieron se llenó.

Cuando entraron, por fin pudo quitarse las sandalias, eran hermosas pero como dolían!

"De seguro me las ha dado para torturarme, que dolor”

- ¿Que se supone que haces?.

lo miro con burla.

- Viendo si tengo plumas! -rodo los ojos-. ¿que crees que hago?! estas sandalias me están matando.

- che donna maleducata! -le respondió con burla - son de diseñador, se suponen que son hermosas no cómodas.

- Da igual si las hizo una kardashian! son tortura china!

-De acuerdo, haz lo que quieras, ve descalza! -su mirada volvió a su teléfono mientras sonreía - questa donna è decisamente pazza. (definitivamente esta mujer está loca).

ella en el camino solo podía masajear suavemente sus pies.

"una completa tortura china!"

- Diseñador?! ja! mejor torturador experto. no los volveré a usar.

al llegar a la casa, cumplió lo que dijo y camino descalza a la habitación mientras el hombre la miraba sorprendido.

al entrar y cerrar la puerta se escuchó un comentario del hombre del otro lado.

- Eres una mujer extraña!

no sé contuvo y no le importo nada.

- Y tu un hombre completamente loco Enzo!

Espero que el hombre entrará o talvez le gritará pero definitivamente no eso.

-Ja! por fin te diste cuenta principessa! disfruta la cena!

al ver en la habitación vío una charola en la cama.

"Bien, definitivamente el está loco!”.