Capítulo 14

Rafael se encontraba en su habitación, por alguna razón no

podía quitarse de la cabeza a Leila, jamás una mujer había ocupado sus

pensamiento de esta manera, ni siquiera Naomi, quien fue para el su primer

amor, la chica lo deslumbro con su actitud segura y personalidad fuerte, aunque

a veces se comportaba de manera altanera, siempre se aseguraba de actuar

correctamente frente a él, ahora pensaba que era un tonto por no haber visto la

verdadera actitud de la chica, quien cuando el más lo necesitaba se fue

dejándolo solo, desde ese momento se prometió no volver abrir su corazón a

nadie más, ya que no solo el acto egoísta de la chica lo afecto a él, sino que

también a sus hermanos y eso era algo que nunca podría perdonar, por eso sabía

que no podía permitirse seguir pensando en Leila, porque aunque sabía que ambas

chicas eran muy diferentes, Leila nunca seria para él y tarde o temprano

también lo dejaría.

Después de una mala noche tanto para Leila como para Rafael,

todos se reunieron en la cocina para desayunar, ya que el día apuntaba a ser

muy largo y necesitaban energía para poder superarlo.

Leila llego ya casi ultima, la mayoría de las personas que vivían

en esa casa ya estaban ahí, solo faltaba Erick

- Buenos días a todos – dijo Leila nada más entrar

– gracias por dejarnos quedar aquí – retomo la palabra la chica

- No tienes que agradecer\, si podemos hacer algo

para ayudar a alguien que lo necesita, lo hacemos con gusto – le contesto

Selia, ofreciéndole un plato con comida para que empezara a comer

Ya no hubo más conversación, todos comieron en un agradable

silencio, ya cuando casi acababan de desayunar bajo Erick en compañía de

Valerio, que a pesar de lucir cansado, parecía estar completamente recuperado,

Leila al ver a su amigo corrió a darle un abrazo

- Valerio\, me alegro tanto de verte – le dijo

Leila a su amigo aun en sus brazos

- Yo también me alegro de verte Leila – le contesto el hombre son una sonrisa

-  Creo que ustedes necesitan hablar, estaremos en

la sala, cuando estén listos búsquennos tenemos mucho que discutir – les dijo

Rafael a ambos chicos, para después darse la vuelta e irse

Selia y Cristian no podían creer la actitud de su hermano,

aunque parecía calmado ambos sabían que no era así, los dos se levantaron y fueron

tras Rafael, Erick al verse solo con Leila y Valerio tomo un plato se sirvió

comida, ya que el aún no había desayunado.

- Creo que estoy sobrando aquí\, los dejo para que

puedan platicar más a gusto, ahí hay comida, la necesitas para recuperarte, -

esto último se lo dijo a Valerio - adiós – y salió de la cocina dejándolos

solos

Leila se acercó a la mesa e imito lo que Erick había hecho,

tomo un plato y se sirvió comida luego tomo asiento e invito a Valerio a

sentarse con ella, una vez su amigo estuvo acomodado Leila le paso el plato

- Come\, Erick dijo que lo necesitas\, y él te curo así

que asumo que sabe de lo que habla

- Gracias

Valerio comió rápido y en silencio, tenía mucha hambre ya que

desde ayer no había podido comer nada, ya que Erick lo puso en un estado de

hibernación, y fue hasta esa mañana que lo había despertado, una vez acabo de

comer este volteo a ver a Leila

- ¿Qué está pasando? – le pregunto Valerio a Leila

Leila le hizo un resumen de lo que había descubierto el día

anterior, lo de los magos, las reliquias, las sospechas que tenía sobre el asesinato

de Griselda, le dijo todo, no dejo ir ningún detalle.

- ¿crees que podemos confiar en ellos? – le

pregunto Valerio una vez que Leila acabo de contarle todo

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