Un lugar en el Cielo

En el hospital, Malena pasaba sus interminables horas pensando en cuando dejaría de sufrir por su incurable enfermedad, llevaba un año infernal entrando y saliendo del hospital, se pasaba meses ingresada y cuando parecía estar mejor le daban el alta,

pero cuando estaba en casa sólo pasaban unos pocos días para que volviese a recaer de su enfermedad y otra vez tenía que volver a ingresar en el hospital y así varias veces durante todo un año, sus padres no sabían qué hacer, habían visitado a los mejores especialistas de España y del extranjero y todos coincidían en el mismo diagnóstico, que no había solución, la suya era una enfermedad rara y desconocida y no había ningún tratamiento para ella, lo único que podían darla era morfina para aliviar sus dolores, y en cuestión de poco tiempo Malena moriría, la desesperación de sus padres era tremenda ya que su hija era muy joven, con apenas 16 años, iban a visitarla a diario al hospital, pero... aunque agradecía la compañía de sus padres, Malena sólo quería estar sola con su dolor...

Una noche malena creyó oír algo que provenía de la ventana de su habitación, Malenaaaaa, se oyó una voz que la llamaba por su nombre, la chica trató de levantarse de la cama asustada, pero pronto se dio cuenta que no podía, su cuerpo no respondía y además estaba enchufada a la máquina que la mantenía con vida en el hospital, y de nuevo otra vez aquella voz susurrante: Malenaaaa dijo la voz,

quien eres?,!!! qué quieres?!! exclamó la chica temerosa, quiero que vengas conmigooo continuó diciendo la voz, pero adonde? respondió Malena, a un lugar mejoooor siguió diciendo la desconocida voz.

Veteeee y déjame en pazzz!! gritó Malena presa del pánico.

La voz seguía martirizandola: ya falta poco para llevarte conmigooooo,

Malena no aguantaba más y gritó: enfermeraaaa!!!, al poco tiempo una enfermera entró en la habitación de Malena alertada por sus gritos y la inyectó un sedante para que se calmara, no pasa nada, niña, dijo, duerme, y al instante la chica cayó en un profundo sueño, la enfermera salió de la habitación pensando: pobre chica, tan joven...

A la noche siguiente Malena ya no volvió a escuchar ninguna voz, sin embargo tuvo una visión muy nítida y juraría que no lo estaba soñando, pudo ver la imagen de un ángel que resplandecia lleno de luz.

El ángel se acercó a la cama de Malena y la dijo: Soy tu ángel de la Guarda, no debes temer nada, te acompañaré en el camino hacia el cielo y verás a Dios Nuestro Señor.

Malena lloraba desconsolada pues sabía que su final estaba próximo, no quiero morir!!!, gritaba, tranquila niña, le dijo el ángel de la guarda, allá en el cielo vivirás eternamente, no habrá dolor ni sufrimiento, te garantizo que tu vida en el cielo será mucho mejor que la que has tenido en la tierra, y a Malena ya no le quedaba más opción que resignarse a su fatal desenlace.

La doctora que atendía a Malena llamó a sus padres, ante el empeoramiento del estado de salud de la chica, diciéndoles que se preparasen para lo peor, aunque ellos ya se lo temían, no pudieron evitar llorar por su única hija, no era justo que Dios permitiera que una chica tan joven muriera a edad tan temprana.

A la mañana siguiente la doctora notificó la muerte de Malena a sus padres y el cadáver fue llevado inmediatamente al depósito para que sus progenitores pudieran darle el último adiós. Cuando los padres aparecieron llorando en el depósito del hospital, fueron recibidos por el forense que les indicó donde estaba el cuerpo de su hija.

Al abrir el compartimento donde debía encontrarse el cadáver de Malena, vieron sorprendidos que el cuerpo había desaparecido y sólo quedaba la sábana que lo cubría, dónde está nuestra hija? gritó la madre angustiada, el forense se quedó perplejo sin saber qué responder, el padre de la chica le dijo al forense: Esto es increíble!!! denunciaremos al hospital!!!

encuentren el cuerpo de mi hija!!! sentenció.

Malena había despertado de su letargo y no sabía donde se encontraba, todo parecía muy difuso pero poco a poco su vista se fue aclarando y vio que estaba en un lugar hermoso rodeada de ángeles, y entonces divisó la figura del ángel que le había hablado en la habitación del hospital, era su ángel de la Guarda que la miró cuando vio que había despertado y se acercó a ella

Donde estoy? preguntó Malena

En el cielo respondió el ángel

Estoy muerta?

soy un espíritu? dijo.

No, niña, estas viva y sigues viviendo en tu cuerpo, se te ha concedido una segunda oportunidad para volver a vivir, dijo el ángel, pero con una condición, deber servir a Dios Nuestro Señor, vivirás aquí en el cielo y sólo podrás bajar a la tierra cuando se te encomiende una Misión, y no podrás ponerte en contacto con tus padres bajo ningún concepto.

Pero.... porqué? dijo Malena, no entiendo nada ...y de que Misión hablas?

Tu deber ahora es ayudar a los demás y para eso ya se te dirá cuando y a qué persona debes ayudar, esa será tu Misión, y por supuesto no sería justo decirles a tus padres que has resucitado, porque no lo entenderían, comprendes? le dijo el ángel

Si, lo entiendo...

Malena no sabía si su vida en el cielo iba a ser mejor, o si por el contrario hubiera preferido estar muerta, pues ahora estaba sola, lejos de sus seres queridos.

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