19

Balián y yo bajamos en completo silencio hasta un jardín de flores ya marchitas y con un aspecto seco.

-¿Por qué nadie llena de vida este lugar? ¿Acaso no son lo suficientemente ricos para contratar a un buen jardinero?

-Este lugar era uno de los lugares especiales de una persona que nos abandonó hace muchos años, nadie se ha atrevido a poner una mano encima

-¿Cómo solía ser este jardín con esa persona?

-Por ese lado tenía las rosas, toda esa jardinera repleta de tulipanes -sonríe -Eran sus favoritas, por allá estaban las margaritas y las azucenas, le gustaba la combinación de esas flores juntas

-¿Estos árboles daban frutos?

-La mayoría de ellos sí, los otros solo llenaban el lugar de flores

-Luce muy triste todo este lugar

-Lo sé, se respira nostalgia

-¿Vienes muy a menudo por aquí?

-No tanto como me gustaría

-¿Por qué has venido hoy?

-Porque se acerca una fecha importante para mí

-¿Tu cumpleaños? -bromeo

-No precisamente, solo algo importante

-¿Y por qué me has traído?

-Porque no quería venir solo, no lo soporto

-Siempre que necesites un acompañante sabes donde encontrarme

-Gracias -susurra

-¿Puedo proponerte algo?

-¿Qué?

-¿Por qué no arreglamos este lugar juntos?

-No, no quiero hacerlo

-Entiendo

Me recuesto en la tierra seca y miro hacía el cielo.

-¿Qué haces? -dice riendo

-Estoy recostada mirando el cielo, está despejado pero aún así hay muy pocas estrellas

Balián se acuesta a mi lado mirando hacia el cielo.

-Mañana es un día importante

-¿Más que tu fecha especial? -lo miro

-No, no tan importante

-¿Qué pasará mañana?

-Será El Juego del Laberinto Averno

Me tenso inmediatamente al escuchar ese nombre.

-Todos iremos, tú incluida

-No puedo asistir -digo mientras trato de que la voz no me tiemble

-¿Por?

-No disfruto ese evento

-¿Has ido?

-Cuando era pequeña...

-¿De verdad? -me mira

-Sí -susurro

-Pues irás quieras o no

-Odio ser una prisionera

-No todo es tan malo, tienes el privilegio de tener mi compañía

-Lo único bueno de todo esto -sonrío elevándole el ego

-Eres como la amiga que siempre quise tener

-¿De verdad?

-Contigo es fácil ser yo mismo, no te enojas por mi sinceridad

-No, no lo hago -lo miro nuevamente -Es bueno tener un amigo sincero y que te dice las cosas claras

-Lo sé, aunque estoy seguro que terminaras mintiéndome tarde o temprano, yo te voy a creer y la amistad se irá a la basura

-¿Y si prometemos no mentirnos mutuamente?

-No lo hagas -dice mirándome con seriedad -Por que si lo rompes, juro que jamás volveré a creerte en la vida

Me siento con las piernas cruzadas y le extiendo mi mano.

-Prometo ser sincera contigo en todo momento

Balián se reincorpora, tomando la misma postura que yo.

-¿Estás segura? -dice mientras mira mi mano extendida y luego dirige su vista a la mía

-Sí

Esta por sellar nuestro pacto cuando alguien carraspea a nuestras espaldas.

-No deberían estar aquí -dice Bentley

Ambos volteamos a verlo y bajo la mirada.

-¿Por qué no?

-Porque Mr. Boulanger aún no se duerme y si los ve aquí... creo que no tengo que decírselos para que lo entiendan -habla en tono neutral

-Creí que habían terminado sus asuntos antes de la cena y que irían a descansar

-Pues ya vez que no -suspira -Vete a tu cuarto Balián, mañana es un día importante yo llevaré a Daelyn a su habitación

-¿Seguro?

-Sí, ya vete antes de que te descubran despierto

-Está bien

Balián me tiende la mano para ayudarme a ponerme de pie y se va perdiéndose en la oscuridad.

-¿Salir a sido su idea?

-Sí

-No entiende -susurra -Bien, vamos a tu cuarto

Empezamos a caminar, yo detrás de él conservando cierta distancia.

-¿Cómo está tu herida?

-Bien

-¿Has hecho esfuerzos?

-Quizá

-Si quieres puedo ayudarte a lavar la herida...

-No quiero que te tomes más molestias conmigo

-No son molestias

-De acuerdo, te dejaré hacerlo solo porque sé que serás más cuidadosa que yo y me urge que cicatrice ya

Llegamos al cuarto y va hasta al baño para sacar un botiquín, pero cuando lo saca cae un arma del compartimento al piso con una resonancia significativa.

-Con un demonio -maldice -¿Qué Balián no se aseguró antes de dejarte aquí que no hubiera armas?

-Creo que no

-Es obvio que no, pero me va a escuchar

-Bentley no se utilizar el arma, no te enfurezcas con él

Abre un compartimento secreto en la ducha y saca otra arma, junto con una navaja y tres cargadores llenos de balas.

-¿De quién era este cuarto? -le pregunto mientras veo como saca otra arma de detrás de un cuadro blanco y otra bajo la base de la cama

-Eso no te importa, además se nota que eres cero curiosa

-Soy curiosa, sin embargo, jamás he pensado en encontrar armas, además, ¿Qué podría hacer con ellas? -me encojo de hombros -¿Volarme un dedo? ¿Matarme? ¿Jugar a que los amenazo? -me río -Cualquier cosa suena tonta, ustedes no dudarían en matarme al instante si los amenazo con un arma cargada

-Eres muy inteligente, realmente piensas las cosas y no actúas por impulso

-Gracias

Deja todas las armas sobre un mueble y me arroja el botiquín. Logro atraparlo sin dificultades y le pido que se siete en la cama.

-Voy a quitarte la camisa -susurro

Él asiente con la cabeza, moviendo ligeramente sus risos rubios.

Tomo el bordo de su camisa y le ayudo a levantarla con delicadeza, trato de evitarlo pero mis dedos logran rosar su piel levemente. Puedo notar lo cálida y suave que es, pero con una apariencia evidentemente musculosa.

-¿Haces mucho ejercicio? -le pregunto mientras comienzo a quitarle el vendaje

-Sí -susurra

-Pues tendrás que posponerlo, porque si sigues esforzándote la herida jamás va a sanar

-Está bien Daelyn -dice mientras me mira

Aparto la mirada y dejo expuesta la herida, estaba con algo de sangre, así que me dedique por completo a limpiar su herida, tratando de no lastimarlo.

-Eres muy cuidadosa, tranquilízate, no estás lastimándome -me dice con una voz tranquilizadora y reconfortante

-De acuerdo

Termino de limpiar la herida y coloco una gasa para que no se infecte.

-Está listo

-Gracias

Levanto la mirada y choca con la mirada azul cielo de Bentley. Si me descuido en cualquier momento puedo soltar un suspiro.

-¿Qué te ha pasado en el rostro? -dice mientras acaricia con delicadeza con su pulgar la zona adolorida por el golpe que me dio el cerdo de criado que tiene

-Uno de tus hombres me golpeó

-¿Por qué? -frunce su entrecejo

-Porque lo llame cerdo por escupir un gargajo en el piso de la habitación

-¿Quién fue?

-No sé su nombre, solo sé que tu padre ha sido quien lo puso a mi cargo

-De acuerdo

-¿Le harás algo? -pregunto con miedo

-No te preocupes por eso, es información que no necesitas saber

-¿No vas a matarlo o si?

Me mira con cuidado, como si tratara de leer mi mente.

-¿Quieres que lo haga?

-No pidas otra vez mi opinión, ambos sabemos que no la tomaras en cuenta y harás lo que se te da la gana -me alejo para guardar el botiquín en el baño y tirar los guantes de látex que me puse al momento de empezar a curarlo

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play